Leyendo sobre la convocatoria y repercusión de la Huelga general convocada para hoy de enseñanza pública, me encuentro con una serie de cosas que me llaman la atención.
En la sección de «Sociedad» ha metido El País este artículo, cuando, curiosamente, en la sección cultura, no hay ninguna información al respecto.
Pero aún hay algo más llamativo: la noticia no es ni mucho menos lo más leído en esta sección, incluso siendo noticia de portada actualmente. Superada por noticias como:
- El Papa aparta de sus tareas al obispo megalómano de Limburgo
- El guardián de la Fe enmienda al Papa por su guiño a los divorciados
- Detectada la galaxia más lejana hasta ahora
- “Los chicos con TDAH necesitan atención constante”
- Los estudiantes claman contra los recortes educativos y la ‘ley Wert’
- Los estudiantes: “No son recortes, es lucha de clases”
- La niña que nació con VIH sigue sin el virus, según los científicos
- Sin noticias del antepasado común de los neandertales y los sapiens
- El 58% de la población de EE UU apoya legalizar la marihuana
- Movilización para bajar la potencia de luz en protesta por las subidas
¿Qué nos pasa? ¿Estamos ya dándonos por vencidos, agotados de una lucha que parece perdida?
Es cierto que la información que vamos a encontrar en los periódicos es, cuando menos, mediatizada, por no decir tergiversada, pero que ya ni siquiera queramos informarnos…
Voy a salir un rato a la calle a ver el estado de la situación. Formar parte de una manifestación más que, mañana, será una noticia más, que, pasado mañana, será una vieja noticia… o sea, un oxímoron.
Y luego, cuando me ataña, acudiré a la sanidad privada, en un vehículo privado y, si tengo hijos, los llevaré a un colegio privado porque hasta los propios profesores de la pública han tirado la toalla.
Buffff…. ¡qué desesperación!