El arte Postal ha muerto

Hace tiempo recibí la invitación a participar en la convocatoria de Arte Postal organizado por el Ayuntamiento de Morille y un par de amigos y conocidos:

TEMA: “Mail Art: Enterramiento final”

BASES DE LA CONVOCATORIA
Coordinación: Ibirico (AMAE), César Reglero (TDS) y Domingo
Sanchez Blanco. (MMM) Colaboran: (Museo Mausoleo de Morille),
Boek861, y Ayuntamiento de Morille.

BASES PARA PARTICIPAR:
FORMATO: Las obras deberán tener unas medidas máximas de A5
(210×148 mm) y ser enviadas mediante correo postal, siendo el
soporte la propia obra en sí, debidamente franqueada. En
cualquier caso, todas las obras deberán llevar impresa en cualquier
tipo y formato alguna alusión al tema de la convocatoria.

Compré 500 sobres recientemente, optimista al respecto del futuro del correo postal, si bien es cierto que últimamente los precios han subido escandalosamente y no paran de subir, llegando al absurdo de que resulte más económico ir en persona a llevar el objeto o repartir el propio envío, sin siquiera entrar a considerar las alternativas (no iguales, obviamente) de envíos telemáticos.

Con 9 sobres quise hacer un pequeño homenaje a esa muerte anunciada, usando tan solo el soporte de lo postal, sin casi ningún contenido, tan solo repetida sobre cada uno de los mismos la frase lapidatoria: «El arte Postal ha muerto» escrita de diversas maneras y oculta bajo capas de sobres que siguen afirmándolo sin que ese final acabe por llegar y, sin embargo, llegando todo el tiempo.

Esto no es una broma