Pasé por delante de su oficina
hace tan poco tiempo
que casi uso el presente
y quise llamarle
no sé para qué,
supongo que para decirle
que está presente en mi vida,
en la vida que me dio
donde hace una semana
volaban versos
hechos de seda negra.
En otro tiempo,
yo no entendía a mi padre
y aún hoy
no le entiendo
pero ahora da igual
porque quise llamarle
no sabiendo para qué
desde la puerta del edificio
de una oficina
que ya
no es su oficina.