fui a hacer una presentación
con transparencias
en el portátil
y el tipo que se llamaba pedro
fumaba puros.
el sol entraba a mi espalda
en el recinto ferial
lleno de industrias
y yo recordaba que mi padre
nunca fumó puros y
había trabajado allí.
me molestaba la luz y tuve que agacharme
para que el tipo que fumaba puros y se llamaba pedro
pudiese bajar las venecianas
mientras yo encendía mi portátil
bajo sus pies y
temblaba
porque el chisme biométrico
no iba a funcionar
porque sudaban mis manos
porque temblaba.
mientras el tipo encendía otro puro
yo soplaba la yema de mi dedo como si no lo estuviese haciendo
y pensaba
¿qué coño hago yo aquí?.
justo antes de que
se pudiese verificar mi huella
pedro el de los puros seguía hablando sin parar
con mis compañeros
comerciales
y pensé si mi padre alguna vez había pensado en qué coño hacía él ahí a lo largo de sus años de trabajo.
todo fue como tenía que ir
pero muy rápido.
no tuve tiempo para pensar
en mi padre ni en mis dudas ni en el humo.
salí de allí con la voz grave de la seguridad en on
batiendo verdades
esgrimiendo argumentos
y había olvidado
a mi padre
mis dudas
y los puros de aquel tipo.