MadridTerapia

Mediante el disfrute de la ciudad de Madrid, el paciente experimenta una mejoría en su estado de ánimo, especialmente en estados carenciales, y una expansión de sus conexiones neurales así como un sentimiento de rejuvenecimiento sin perder la naturalidad de las tradiciones.

Hay infinidad de formas de gozar la MadridTerapia de las que comentaremos algunas como la consistente en combinarla con la CañaTerapia para amortiguar sabiamente los efectos de la elevación térmica en los meses de julio y agosto: Dirigiéndose a alguna de las múltiples terrazas de la ciudad, engullir un buen número de Cañas mientras se ve pasar gente que, sonriendo, van y vienen atribulados en ocasiones más rápido de lo necesario.

La MadridTerapia en autobús puede practicarse desde muy asequibles precios, adquiriendo un bonobus y subiéndose a alguno de los numerosos vehículos colectivos que circulan por Madrid dejándose sorprender por su viaje, efectuando un turismo accidental y sorprendente al alcance de cualquier bolsillo. Muy recomendable como entrada a la IdeaTerapia y combinado con la EscuchaTerapia puede proporcionar una explosión de sensaciones que alcanza límites insospechados de disparidad.

Esta Terapia, no obstante, también puede realizarse caminando para lo que se recomienda una temporada de aplicación de los meses considerados como entretiempo, es decir, descartar los que mencionamos anteriormente como cálidos, julio y agosto, así como los más peligrosos para practicar la MadridTerapia: diciembre y enero.

Diciembre y enero tienen asimismo la problemática, no exclusivamente climatológica, sino la combinación con la ConsumoTerapia convulsiva en masa que acarrea fuertes contrariedades como la dificultad de movimiento o la elevación intolerable de los usuarios simultáneos de la Terapia, con la pérdida de disfrute individual consiguiente.

La MadridTerapia está prescrita con ahínco para aquellos sujetos que rutinariamente tienen unas viviendas rodeadas de escasa población, para dinamizar sus costumbres si bien requieren de las precauciones esperables de un cambio radical de hábitat y hábitos.

Dosificación: Aplicar la MadridTerapia de manera continuada no resulta problemático, pero conviene atender a determinadas precauciones como la combinación con Terapias que conduzcan a la posible reducción del estrés, la aceleración del ritmo cardíaco o la usurpación de objetos apreciados por el paciente. Entre ellas, merece especial interés la KarmaTerapia, recientemente comentada que aporta a la MadridTerapia una componente de control espiritual haciendo de ambas un tandem muy equilibrado para conseguir una sanidad mental y física satisfactoria.

SobreDosis: Si se maneja sin atender a las precauciones mencionadas o durante los periodos más violentos, como los de diciembre y enero, puede irritar las terminaciones nerviosas hasta quebrarlas. El tratamiento relacionado con la adicción o el abuso de la MadridTerapia pasaría por el uso sustitutivo de la NadaTerapia o la huida a un lugar de densidad de población bajísima. Si el problema continúa, tomar medidas más drásticas como modificar el lugar de residencia o, incuso, hacer uso de la GiusseppeTerapia.

Otras terapias con la letra M, podrían haber sido:
MamiTerapia (acudir al progenitor que ocupó el rol fememino durante nuestra educación para que siga haciéndolo en periodos en los que no seamos capaces de hacerlo por nosotros mismos. Tener en cuenta que es adictiva y genera dependencia con facilidad), MuerteTerapia (la última y más contundente de todas, atendiendo a la vida como enfermedad mortal que se contagia por vía genética), MúsculoTerapia (consistente en la dedicación en cuerpo y cuerpo a la estimulación de la musculatura mediante su ejercitación, ya sea en gimnasios o en centros de trabajos corporales varios, como levantando sacos de cemento, o moviendo cajas de ropa de grandes almacenes), MacroTerapia (Terapia Grande o de lo Grande, en oposición a la MicroTerapia) y otras Muchas Más.

LunaTerapia

Terapia consistente en contemplar la Luna y dejarse llevar por sus influjos hasta parajes desconocidos a priori. La percepción de la Luna ha suscitado desde antiguo las más interesantes prácticas esotéricas, algunas de las cuales han degenerado en Terapias. Es conocido por místicos y míticos, el poder del Astro en la naturaleza humana.

Por Luna, entendemos únicamente el satélite natural que rodea al planeta Tierra con un ciclo de una duración aproximada de 28 días y cuyo movimiento, junto con el del planeta que tendemos a habitar, es altamente complejo de explicar en este pequeño apunte. No nos referimos, por tanto, a los metafóricos usos de tal palabra, como las de los escaparates o los vehículos.

La LunaTerapia se aplica únicamente desde la superficie terrestre, aunque desde aviones y otras formas de transporte elevadas su efecto es diferente y aún no se ha estudiado en profundidad.

Para aplicar la LunaTerapia, es preciso elevar la mirada por medios naturales como la curvatura de las cervicales o la modificación de la posición corporal hasta disponer los órganos visuales de manera perpendicular a la tangente de la curvatura terrestre, por ejemplo, tumbándose sobre la hierba fresca o sentándose en una hamaca sostenida entre dos árboles.

Si se aplican medios artificiales, la contemplación del astro no resulta Terapéutico, pero ayuda a conocer mejor la superficie de la misma y puede proporcionar placeres visuales insospechados, algunos de los cuales terminan figurando en los monitores de los ordenadores como salvapantallas o fondos de escritorio. Este proceso, repetimos, no es terepéutico, pero brinda un entorno de trabajo agradable con lo que, en ocasiones, redundar en un efecto saludable y confundirse con la LunaTerapia que estamos tratando.

Esta Terapia es muy recomendable ante estados de abatimiento para sentir la nostalgia con mayor intensidad, así como para aumentar la impresión de unidad con el cosmos y, de este modo, no considerarse tan solos en el universo. Puede incluso aplicarse para contemplarla simultáneamente por colectivos humanos que, así, tienden una conexión virtual entre sus sentidos, llegando a la falsa sensación de que están contemplando el mismo objeto en el mismo momento.

Posología: Aplicar las Dosis de LunaTerapia preferiblemente durante las horas del día conocidas como noche, para disminuir la posibilidad de resultados frustrantes al ser más sencilla su observación bajo iluminación solar indirecta.

Atender cuidadosamente a la elección del espacio desde el que se va a realizar la contemplación, para potenciar los efectos beneficiosos de la Terapia. Muy aconsejable combinar LunaTerapia con NadaTerapia para prolongar sin esfuerzo la práctica de ambas.

SobreDosis: La aplicación de la LunaTerapia durante periodos continuados largos, lleva a sentir dolores cervicales si no se ha elegido correctamente una postura que no suponga esfuerzo físico, así como ausencias de la realidad circundante, por lo que su afección provoca efectos dañinos alejándonos del entorno social colindante. Quienes padecen adición a esta Terapia, son denominados Lunáticos.

Otras terapias con la letra L, podrían haber sido:
LuchaTerapia (consistente pasar la vida enfrentándose a todo aquello que no nos gusta, pero que repercute en generación de estrés, ansiedad, tratable únicamente con Buen-HumorTerapia), LabiosTerapia (casi sinónimo de la BesoTerapia, sin atender a las posibles connotaciones explícito-sexuales), Lectura o LibroTerapia (consistente en considerar algo como la Lectura en una actividad conducente a la sanación del sujeto, pero sin atender a las posibles Malsanas Lecturas que pueden provocar daños irreparables en las conexiones neuronales), LíquidoTerapia (de similar acepción que la BebidaTerapia, aunque no necesariamente de ingestión bucal: muchas sustancias oleaginosas pueden usarse a modo de ungüento para realizar una LíquidoTerapia superficial) y algunas Terapias que aportan mayores grados de Libertad al individuo.

Esto no es una broma