En Verona
en Corso Porta Nuova, 57,
cerca de la estación de autobuses
cerca de la Piazza Brass
y de la Arena
esa singular obra elíptica
que me alegró tanto visitar.
Hotel Trieste
fue un placer estar
en una ciudad acogedora
que cada día horada más mi voluntad
de seguir queriendo cambiar Madrid
o me hace plantearme
abandonar el mesianismo
y abandonar
me
y
ya.
Trieste no triste.
Trieste en Verona.
Trieste
que te quiero verde…