Cálculos tontos para tontos que no saben álgebra


Supongamos
x = Número de Calzado
y = Edad // El año en que naciste es 2012 – la edad que tengas: (2012 – y)

Este texto se transforma en lenguaje algebraico en:
(5x + 50) · 20 + 1012 – (2012 – y)

Sacando factor común en el primer paréntesis y multiplicando por 20:
(x + 10) · 100 + 1012 – (2012 – y)

Operando los paréntesis:
100x + 1000 + 1012 – 2012 + y

Voilà:
100x + y

Lo que deja las centenas para el número de calzado y las unidades para la edad.
Esto funciona sin problemas siempre que no se tengan más de 100 años.
Tal como está redactado, este calculito sorprendente es válido solo para este año (por cierto).

Un fin de semana largo

Exposición de Elias Arriero en el ChambaoHa terminado un largo puente de tres días, que en realidad no era un puente, que se supone pasa sobre algún día no festivo a modo de arcada, sino una extensión de la vacacionalidad de los dos días del fin de semana (sin tener en cuenta a quien trabaja sábados, pues tendría que tener en cuenta a quien trabaja domingos o, incluso, a mi cuñada, que trabajó el viernes).

En realidad terminó hace algunos días, más que ha terminado. Terminó denota una acción que ocurre en el pasado más alejado del día de hoy, o ayer… pero esa lejanía es subjetiva, así que su uso podría bien haber sido ha terminado.

Volviendo al tema… si es que este blog tiene alguno… diría que fue extraño.

Me divertí, varias veces, tanto el viernes, con mi amada Carmen, haciendo lo mínimo que necesito para ser feliz con ella, siempre tan fácil.

Me divertí también el sábado, comiendo con Mayte y su chico, al que he regalado (regalé) toda mi colección de CDs de Extremoduro. Les hicimos de comer comida rica, rica y con fundamento. Un delicioso primer plato de brócoli con bacon, ajitos, queso fundido y pimienta y un segundo plato de chuletas de aguja de cerdo (que son baratitas) con una salsa de cebolla caramelizada con mermelada de naranja al orujo. Fruta, helados y te, chupitos y, lo más importante, una fluida conversación.

Me divertí mucho, pero mucho mucho, en la noche del cumpleaños de mi amiga Aída, mi querida amiga a la que estoy empezando a echar de menos. Me reí como hacía mucho tiempo que no lo hacía, con su amiga Sofía, con un amigo llamado Sergio, que me contó el chiste más simple que he oído en años y, por ello, uno de los más divertidos y que dejo aquí para que no se me olvide:

-¿Qué sonido hace un gato borracho?
– …
– Mahou

Me divertí el domingo, también tenía otro cumpleaños. Nuestra amiga Simona celebraba una fiesta con intención de hacerla al aire libre (tipo picnic) y hubo de ser modificado el plan sobre la marcha, llevándonos a casa de su amiga Valeria. Fue divertido, muy «creativo», con ese estilo de fiestas laborales en las que hay que trabajárselo, como si no fluyera si no es gracias al ingenio creativo de los presentes, que no deja de ser desbordante: cantamos juntos, compusimos juntos, poemamos juntos… hablar menos, pero apenas nos conocíamos, así que igual… bueno, a mí personalmente me gusta más dejar que fluya lo que deba fluir, porque seguro que fluyen apasionantes conversaciones interpersonales. Pero no es su modelo, así que…

Y también era otra especie de cumpleaños-despedida: Simona, profesora y coreógrafa de danza contemporánea, ha decidido dejar Madrid para irse a vivir a Ginebra, Suiza. Es comprensible, sabiendo que aquí a duras penas puede subsistir y allí por aportar algo a la cultura de la ciudad, es remunerada con más de mil euros.

Ayer recibí un email de una de mis alumnas, una chica llamada Dolores que se va a vivir a EEUU, por amor, sí, por amor, pero no pude evitar sentir un pequeño dolor por dentro: 3 despedidas en 3 días. No le respondí un entusiasta grito de alegría, pero no podía hacerlo. No quiero que se vaya mi entorno.

Sé que de las tres amigas mencionadas hay motivos diversos que empujan a pensar que se habrían ido de no ser porque este país es cada vez más convexo: Aída y Dolores por amor, Simona por morinha de su tierra natal.

Pero no es del todo cierto.

¿Si en este pueblo las cosas estuviesen envidiosamente bien, acaso las parejas respectivas de Aída y Dolores no desearían venir, en lugar de pedir que se vayan ellas? ¿Simona no seguiría intentando animar con sus propuestas la inerte cultura de esta villa si se lo pusieran un poco más fácil?

Y después de tanta diversión, de tres días de desenfreno, me quedó, sin embargo, un triste sabor en la boca del estómago, un sentir que se desmorona algo delante de mis narices, que la vida se me rompe un poco, que habrá que reivindicar la movilidad e ir a ver a todos los emigrantes, que algo ha cambiado, ya no en esa macroeconomía más o menos alejada del sentir, sino claramente en esas pequeñas parcelas cotidianas de irse a tomar un café, o unas cañas, y no saber con quién.

Quedará gente después del éxodo, este que continúa sangrando España, pero la pregunta que hoy me hago es ¿Quién?

permutaciones de poema

Hoy he encontrado un comentario en una red social sobre la similitud de poesía y poseía, algo obvio, pero tierno y me han dado ganas de responder con un programa en C que desarrolle todas las permutaciones de una palabra tan sencilla y previsible como poema.

Son 120 permutaciones. Es fácil de calcular: 5! = 5·4·3·2·1 = 120.

Al principio he pensado que con hacerlas en un documento de texto writer era más que suficiente, pero luego he intuido que me iba a quedar insatisfecho porque era demasiado único, demasiado específico. Así que me he dejado seducir por la idea de hacer las permutaciones mediante algún método automático.

Lo primero que pensé fue en usar un programa con el que estoy encantado, de clasificación arbórea, como es el que permite organizar una mente, a priori, organizada (freemind), de mapas mentales.

Sin embargo, me pareció que no era demasiado automático. Requería que fuesen esas y solo esas las letras. Así que comencé un programa en C para ello. Para permutar las letras de palabras. Pero me he dado con un muro relativamente más alto y contundente de lo que pensaba. No es tan fácil y habría de tirar de programas o subrutinas ya desarrolladas, lo que no me apetecía mucho. Acabaría siendo sencillo, demasiado sencillo, plagiar y modificar algún programa preexistente.

Así que me limito a no hacerlo.

p
po
pe
pm
pa

o
op
oe
om
oa



Si te gusta, hazlo tú.

PS. Una bonita permutación es mapeo. Sí, mapeo un poema… 😉

Q

Hoy he terminado un libro que me prestó Hilario Álvarez. Uno de esos libros que dejan huella. No creo que pueda olvidarlo. Lo más terrible es que tendré que devolvérselo. Y no es un libro que me vaya a comprar… pero me gustaría tenerlo.

Lo acabo de descargar, como no podía ser menos, de su propia web, la del colectivo ahora denominado Wi Ming Fundation, y antes Luther Blisset que hace de Autor de esta novela formidable.

Por si te apetece descargarlo a ti también, te dejo el enlace desde el que lo hice.

Reproduzco un texto mecanografiado de este maravilloso volumen:

«Una Europa en que los banqueros alemanes dictan las opciones políticas; en que se lleva la fe religiosa en las banderas de los ejércitos mercenarios; en que poblaciones enteras son sometidas a la ley marcial. Una Europa recorrida por columnas de prófugos, en que la rebelión de los desesperados recibe la firme reacción de los linajes más rancios y de los poderes mercantiles incipientes. La misma asquerosa reacción de siempre: cañones y genocidios, y más hierro y fuego…»

Escrito en un texto que, como afirman en su página web: Transcurre en el Siglo XVI. Dos personajes principales. Uno quiere subvertir el orden establecido y el otro es un espía al servicio de los poderes que lo protegen. Q es un espía contratado por el cardenal Carafa, personaje ultra-conservador y de creciente influencia en la jerarquía de la Iglesia. Una novela épica desde las entrañas de la historia, ambientada en Europa central e Italia septentrional. Algunos han definido a este libro como «un western teológico».

Hay quien lo compara con El Nombre de la Rosa, de Umberto Eco, pero en mi humilde opinión hay algo más revolucionario y rompedor en este libro. Empezando por la declarada lucha antimercado, nuestra religión actual, que se lleva a cabo haciendo disponible el libro de forma completamente gratuita, con una licencia mucho más abierta que las famosas Creative Commons.

Tienen la declaración de guerra en toda forma, la llamada a la lucha a los creativos, a los que generan cultura, lanzándoles la primera piedra:

Desde 1996, por contrato todos nuestros libros llevan este anuncio: Está permitida la reproducción total o parcial de esta obra y su difusión telemática, siempre y cuando sea para uso personal de los lectores y no con fines comerciales; y con la condición de que se reproduzca este enunciado. Para conocer nuestras posiciones sobre copyright, copyleft, cc, uso legítimo-razonable y propiedad intelectual, visitad la sección OMNIA SUNT COMMUNIA de este sitio. Como nuestros libros están traducidos en muchos idiomas que no conocemos y han sido publicados en diversas partes del mundo, es muy difícil tener todo bajo control. Si la edición de vuestro país no contiene susodicho anuncio, significa que ¡habéis sido engañados! ¡Os han timado! ¡Estafado! ¡Os han tomado el pelo! ¡Embaucado! Rogamos presentar una reclamación al grupo editor y enviarnos una copia (con traducción, si es posible).

Y así, es, así nos ponen contra la espada y la pared de la supervivencia económica a partir de la creación, que ya he tratado en otras entradas de este diario que, por supuesto, es tan público y gratuito que no necesita ni siquiera una nota reconociendo su uso.

De su historia, de la de Luther Blisset Project, decir que merece más la pena pasar un buen rato leyendo la página web que esta triste reseña, pero me gusta la síntesis de este párrafo con el que prologan su presentación:

En 1994 cientos de artistas, activistas y bromistas de toda Europa deciden adoptar la misma identidad.

Apodándose Luther Blissett se preparan para desencadenar el infierno en la industria cultural con un plan quinquenal. Trabajaran juntos para contar al mundo una gran historia, crear una leyenda, dar vida a un nuevo tipo de héroe popular.

En enero de 2000, al finalizar el Plan, algunos de ellos se congregan bajo un nuevo nombre, Wu Ming. Este último proyecto, a pesar de estar más enfocado hacia la literatura y la narrativa en el sentido estricto, no es menos radical que el anterior.

Pero que su autor sea tan peculiar, tan único en su género como imposible de ser único, no merma en absoluto todo lo brillante que esta obra Q es.

Creo que, junto con «La Vida, Instrucciones de Uso», ha sido la más formidable novela que haya leído nunca. De múltiples niveles, puede ser leída en clave de actualidad, como si se tratase de un llamamiento a alzamientos del tipo 15M, pero puede ser leída como una novela histórica (he verificado hasta lo posible todos los acontecimientos y personajes que aparecen en la ficción), como un relato de aventuras y desventuras, una lucha contra el fanatismo, un alegato en defensa de la lucha contra el sistema, una lucidísima recreación de un periodo convulso del nacimiento de Europa, de los países como tal, como los conocemos, con la ascensión de la ortodoxia católica y protestante, esa ascensión cuya escisión seguimos viviendo, imposibilitando el nacimiento de una nueva Europa de pueblos, de gentes, que sigue siendo un patio de bandas dirigidas por príncipes y banqueros.

Tiene lecturas que estoy seguro que no aprecio, lo presiento, creo que referencias a movimientos políticos italianos, a pseudonacionalismos locales, pero que sé que se me escapan.

Habría de leerla otra vez, ¡habría de aprendérmela de memoria!

No, no es eso. Pero sí recomendar su adquisición, su difusión, la adquisición de información mediante esta antigua técnica llamada lectura, lectura de información y no sobreestímulo derivado de consumo mediático.

Novela formidable. Colectivo interesantísimo. Generan reflexiones: creemos un colectivo paralelo, en el que el ego se disuelva, que tenga un nombre, una poética. Escribamos la novela. Tenemos la obligación de hacerlo. Vivimos tiempos que nos requieren. Requieren nuestro compromiso. Hagámoslo.

Hierve la sangre

A pesar de que he dejado de leer la prensa porque considero que no me informa con la profundidad que requeriría y no tengo el tiempo para profundizar sobre cada uno de los titulares con fecha de caducidad que proporcionan, me sigo enterando de más cosas de las que en realidad deseo.

En FaceBook alguien colgó este artículo de El País sobre un tipo (no puedo ser más cordial) que afirmó, así, tal cual suena: «las leyes son como las mujeres, están para violarlas». Sí, sin edulcorar, sin modificar, sin necesidad de añadir nada para desprestigiarse a él y a su entorno (no solo su partido político, pero también).

José Manuel Castelao declaró ante algunos consejeros de la mesa que se ocupará de los temas de Educación y Cultura que “las leyes son como las mujeres. Están para violarlas”. (¿De Educación y Cultura? ¡¡¡¡En serio!!!!).

No sé qué pasa, pero me dieron unas ganas terribles de comprar un arma y salir a buscarle.

Dice el periódico, que por supuesto ya ha modificado la noticia, lo siguiente:

El presidente del Consejo General de la Ciudadanía en el Exterior –órgano consultivo y asesor perteneciente al Ministerio de Empleo–, Castelao Bragaño, ha declarado a El País que en las próximas horas presentará su renuncia al director general de Migraciones. Castelao, de 71 años y que fue nombrado el lunes, ha asegurado que su renuncia no tiene nada que ver con el comentario que realizó ante algunos miembros del consejo en una reunión en Santiago de Compostela. Una frase que despertó las protestas entre algunos miembros de este organismo y por la que después pidió perdón.

El tipo, este tiparraco sinvergüenza, se permitió decirlo para violar la ley. Ni más ni menos que mientras la violaba afirmaba esta joya. Y dimite y ya. Se va a su casa con una buena jubilación. Y nadie pide cárcel.

No lo comprendo: Si alguien afirmase que se podía violar la ley, y la violase, y dijese que era tan recomendable como violar a su majestad, lo más seguro es que estuviese en prisión ya mismo. Es más, su partido al completo estaría siendo acusado, por la ley de partidos, de apología de la violencia (y sería cierto) y estaría siendo ilegalizado.

Pero lo hace este facha, este asqueroso canalla y tan solo le piden la dimisión.

Pues no lo entiendo.

Y eso sin entrar en detalles de cómo un «señor» de esta catadura ha llegado hasta esta posición política, este cargo que nos representa a todos los españoles. Sí, ha dimitido y seguro que es más de lo que se podía esperar. Seguro que no es demasiado grave, es un hombre mayor, senil, lo que no le justifica ni lo más mínimo, y con un perfil que lograba pocos votos. No importa su dimisión.

Yo quiero que se le encarcele. Quiero que se lancen contra él acusaciones por incitación a cometer crímenes indecentes, tanto en lo que se refiere a violar mujeres como leyes. Quiero que se olviden también de sus declaraciones y que se fijen en que ha violado la ley. Es un delincuente. Debe pagarlo ante la justicia. O no se podrá creer que España es un país de derecho, como afirma nuestra constitución. Aunque hay poca gente que aún lo crea. Es triste.

No lo entiendo.

Definitivamente, no puedo y no quiero entenderlo.

Entenderlo, asumirlo, aceptarlo… ¿y después?

Errores lógicos

Al lado de esta imagen que estaba mostrada en FaceBook, dentro de una página que sigo sobre la República Española, encuentro el texto siguiente: «Aprende, Mariano Rajoy».

Pero me preocupa que no se den cuenta del error lógico en el que incurren: Que alguien sea estúpido y al mismo tiempo haga algo que le avergüence IMPLICA que diga que cumple con su deber. Resumiendo en formato de lógica de proposiciones, .

Pero que alguien afirme que cumple con su deber NO IMPLICA según esta afirmación que ese alguien sea estúpido y que esté haciendo algo de lo se avergüenza. Es decir:

(p y q) –> r

No es lo mismo que

r –> (p y q)

Sin embargo sí que sería igual a que

¬r –> ¬ (p y q)

Pero la negación de una conjunción puede ser desarrollada y, en este caso concreto, no significa que el hecho de que alguien no diga que cumple con su deber IMPLIQUE que ese alguien no sea estúpido y que no se avergüence, sino que IMPLICA que o no es estúpido o no se avergüenza.

Obviamente, habría que suponer que la premisa de Bernard Shaw es cierta, pero si a ello se sigue que si alguien no dice que cumple con su deber (se cumple ¬r), o bien es que no es estúpido o no tiene vergüenza. En lenguaje de lógica proposicional:

¬r –> (¬p o ¬q)

Lo cual no deja del todo mal a Mariano Rajoy, pues pueden cumplirse una o las dos de las negaciones: que no sea estúpido, que no tenga la más mínima vergüenza o ambas.

Por supuesto, siempre asumiendo que la premisa es cierta, lo cual es mucho suponer…

(No descarto haber tenido algún error lógico en este desarrollo)

3 elevado a 3 veces 3

tres elevado a tres elevado a tres elevado a tres es un número mmonstruosamente grande, que destroza mi calculadora básica y me manda a la imprecisión de la notación científica.

7,625597485×10¹²

Pero lo he querido ver en número entero moliente y corriente, así que he recurrido a lo analógico, bueno, en realidad a una mezcla más o menos optimizada de tecnología y cálculo mental:

3^3 = 27
(3^3)^3 = 19683
Y aquí empezaban los problemas:
(((3^3)^3)^3) se sale de la mantisa y me da como resultado: 7,625597485×10^12

Para ver cuál es ese número, usando calculadora he hecho una trampa casi imperdonable, que es descomponer esa potencia en:
(((3^3)^3)^2 x ((3^3)^3))

Esta cuenta cabe sin problemas en las calculadoras científicas medias:
((3^3)^3)^2 = 387420489

Pero la multiplicación de ella por 19683 ya es excesiva, así que he descompuesto esta multiplicación, a su vez, en
((3^3)^3)^2 x 19 = 7360989291
He añadido 3 ceros al final para tener
((3^3)^3)^2 x 19000 = 7360989291000
Y le he sumado este otro cálculo cuyo resultado también cabía en mantisa:
((3^3)^3)^2 x 683 = 264608193987
Ahora, puedo sumar los 2 números resultantes casi mentalmente
pero por seguir usando la calculadora, tomo los seis dígitos menores de un millón en ambos y los sumo:
193987 + 291000 = 484987
y como además tengo la suerte de que ni siquiera llegan a un millón, tomo los otros pedacitos de los números grandes y los sumo también:
264608 + 7360989 = 7625597

Pegando esta cabeza y cola de número billónico, tengo como resultado:
((3^3)^3)^3 = 7625597484987

Sinónimos de mente

Me encuentro con que según el Diccionario de sinónimos y antónimos 2005 de Espasa-Calpe
mente tiene como sinónimos:

entendimiento, intelecto, inteligencia, pensamiento, cerebro, razón
propósito, intención, designio, idea

Pero algo no me cuadra:

¿Mente es el aparato que alberga los pensamientos o los pensamientos mismos?

Según la RAE:

mente. (Del lat. mens, mentis). 1. f. Potencia intelectual del alma. 2. f. Designio, pensamiento, propósito, voluntad. 3. f. Psicol. Conjunto de actividades y procesos psíquicos conscientes e inconscientes, especialmente de carácter cognitivo. de buena ~. 1. loc. adv. ant. De buena voluntad, de buena gana. tener algo en la ~. 1. loc. verb. Tenerlo pensado o prevenido.

Así que quizá es más parecido, según la acepción 2 al propio pensamiento, a la voluntad de pensar, a la potencia, como dice el punto 1.

Entonces, tendríamos que usar cerebro para referirnos al aparato, pero, otra vez según la RAE:

cerebro. (Del lat. cerebrum). 1. m. Anat. Uno de los centros nerviosos constitutivos del encéfalo, existente en todos los vertebrados y situado en la parte anterior y superior de la cavidad craneal. 2. m. cabeza (? juicio, talento, capacidad). 3. m. Persona que concibe o dirige un plan de acción. 4. m. Persona sobresaliente en actividades culturales, científicas o técnicas.

Así que nuestros pensamientos se alojan en la mente, que son los pensamientos mismos o lo que es lo mismo, no parecen tener otra casa que la que son capaces de forjarse y se asientan sobre una descripción anatómica forense de la masa grisácea que ocupa nuestro cráneo.

A mí me falta algo…
No sé cómo explicarlo, algo software entre el hardware del nervio o conjunto de tales y la función que realizan, esa capacidad de generar pensamientos y que, si llamamos mente, coincide con lo generado.

Hummm… no sé muy bien si explico clara-mente mi duda. Pero la tengo y la man-tengo. ¿Es una cuestión idiomática? ¿o ideomática?

Esto no es una broma