Ruido de Fondo, de Don Delillo

Acabo de terminarme el libro de Delillo, un escritor característico de la nueva prosa norteamericana, que intenta luchar contra el desplazamiento del centro hegemónico cultural al lejano oriente. Es una batalla perdida, pues la hegemonía se impone mediante la fuerza de la economía.

Ayer, incluso, vi que empezaba a anunciarse en autobuses y marquesinas de Madrid, ciudad atractora de turistas, una oferta de viajes y alojamiento turístico en China. Incluso, después de desplazado el centro de producción industrial del mundo, ahora van a desplazarse los demás sectores. Es inevitable. La cultura (su centro «de influencia») lleva tiempo moviéndose hacia oriente: Japón, China, son cada vez más leídos en occidente, de una manera u otra. De hecho, es muy probable que el próximo libro que comience, mañana, sea el de Murakami: 1Q84. Está, como quien dice, guiñándome los ojos desde su hueco entre Muñoz Molina y Neruda.

Del libro que he terminado hoy, de Ruido de Fondo, decir que me ha gustado poco, menos que los últimos suyos que leí, o los de escritores que podríamos considerar de su misma generación o contexto social y temporal, como son los de Cosmópolis o los autores Palaniuk o Foster Wallace.

Pero, de cuando en cuando, en las 430 páginas, encontraba maravillas como esta que a continuación muestro y que me recuerda a las innumerables veces que hablo con el padre de Carmen y me siento exactamente como este protagonista cuya vida gira en torno a un trabajo de investigación acerca de la figura de Hitler, un trabajo de dudosa utilidad, de nulo pragmatismo, casi, diría, inútil (o poético).

libro delillo 2

libro delillo

Basta ya de tanto imperativo

daleEstoy empezando a hartarme de tanto imperativo, sí, incluso los que en el mejor de los casos se revisten de complicidad bajo una premisa hipotética o un condicional. Se supone, de alguna manera más o menos perversa, que si no lo haces eres cómplice, eres pecador, culpable, malo.

Y llegan todo tipo de acciones que te ves propulsado a hacer porque tu entorno social lo requiere, lo exige. Recuerdo el maravilloso libro de Roland Barthes, Lo Neutro, y lo que escribí sobre él sigue resultando significativo.

Firmas: más de 10 al día, insoportable. Empiezan a llegar aclaraciones sobre que se trata, en la mayor parte de las veces, de rumores, de hoax, de capturadores de información confidencial, de campañas de marketing o estudios de lo mismo más o menos bien orquestadas para no parecerlo.

Dentro de poco, no cederé ante esta presión, pase lo que pase.

Dimensión curva

Como texto para una acción o quizá como texto para una reflexión.

Dos trazos de función (gráfica de la misma, puesto que la función no es una visual, sino su representación), por ejemplo la de y=x², y la de y=sqrt(x) pueden ser la base del espacio plano.

Realizar estas curvas con versos (o besos).

Realizar estas curvas con diversos materiales y jugar con ellos.

En 3D, hacer lo mismo con tres tramos helicoidales.

Pensar esto sobre ejes cartesianos, ortogonales.

Belleza violenta

Hay una mujer en facebook
cuya belleza me parece
diría
violenta.

Está entre mis amigos o amigas
y siento reparos de comentar
sus comentarios
pensando
que pensará
que lo hago porque me parece
violentamente atractiva
o sexy.

Seguro que entre sus más de 4000 amigos
y amigas
alguno (y alguna) habrá que
como yo
se ruborice de pensar en ella
de maneras que casi podríamos considerar
inapropiadas
y es probable
incluso
que a ella no le desagrade
la idea
pero a mí me resulta violento
comprobar
que miraría sus fotos buscando motivos
para excitarme
aunque suelen ocasionarme más turbación
que otra cosa.

Recuerdo la adolescencia
y miradas de soslayo
a chicas a las que no deseaba mostrar
que las miraba:
aprendí pronto mis primeras clases de moderación
o represión
o autocensura.

Afortunadamente
tengo una pareja lo suficientemente segura de sí misma
como para poder hacerlo
ahora
sin que ella piense que he dejado de amarla.
(este párrafo es casi una explicación, una justificación:
una basura).

Sé que es consciente de su violenta belleza
hasta el punto de presumir de ser modelo
a tiempo parcial
y escritora
y seguro que más de un admirador
y admiradora
de sus textos
escuchan el latir de sus párpados
casi tanto como el de sus palabras
y es cuidadosa
aunque no lo parezca
de su intimidad
en una red social
en la que eso apenas existe
a duras penas
asegurándose de personalizar
el grado de accesibilidad de cada una de sus imágenes
a los mortales
y las mortales
e incluso
puede
a algún inmortal
o alguna.

Pero también me pregunto
si tiene instalado algún programa
o aplicación
de seguimiento de visitas de su perfil
que yo ni sepa que existe
como cuando siento
que una chica a quien miro en el metro
me observa sin que me dé cuenta
en algún reflejo
o de alguna otra manera.

Y vuelvo a pensar
en ser visto
mientras veo
en una lucha que supongo
deben de tener todos los voyeurs (o mirones o mironas)
del mundo.

Me avergüenzo
y
al mismo tiempo
no deseo evitar
seguir mirándola.

Me tiene atrapado con violencia
su belleza.

Día de la mujer trabajadora

8 de marzo

Es muy amargo, pero creo que es cierto. Es una frivolidad continua la de felicitar a todas las mujeres por igual, como si las no luchadoras mereciesen el aplauso. Y por no luchadoras me refiero a aquellas que aceptan la situación de sumisión a las que las somete el sistema (que somete también a hombres, pero hoy no es el día para hablar de ellos).

He llegado a ver un comentario que decía: felicidades a todas las mujeres, las que trabajan en casa, las que trabajan en oficinas y una felicitación especial para las que tienen un trabajo mixto, trabajando en ambos sitios. Y yo me pregunto si no es terrible esa felicitación, perversa, que anima a que las mujeres tengan esa sobrecarga de trabajo que nunca le desearíamos a nadie.

Por ende, felicitar a quienes deberían deshacerse de parejas tan sinvergüenzas como para permitir esa falta de reparto del trabajo o de las tareas domésticas es insultante, es depravado y sádico, incluso. Esas mujeres, responsables, porque siempre asumo que son responsables de sus actos, son merecedoras de insultos, si es que los insultos son alguna vez merecidos: al menos, se las puede tachar de sumisas más allá de lo razonable, perpetuando una situación que debe cambiarse ya.

No puedo entender que no se piense en ello.

Puedo comprender que algunas mujeres estén en esa situación, pero no, bajo ningún concepto, que esa situación sea felicitable. Es canallesca y debería ser cambiada, debería revertirse, debe hacerse un esfuerzo por mostrar rechazo social hacia quien acepta esas situaciones, para que la presión que las lleve allá sea «compensada» por presión en sentido contrario.

He encontrado este texto junto a esta imagen


mujeresEn 1908, 40.000 costureras industriales de grandes factorías se declararon en huelga demandando el derecho de unirse a los sindicatos por mejores salarios, una jornada de trabajo menos larga, entrenamiento vocacional y el rechazo al trabajo infantil.

Durante esa huelga, 129 trabajadoras murieron quemadas en un incendio en la fábrica Cotton Textile Factory, en Washington Square, Nueva York. Los dueños de la fábrica habían encerrado a las trabajadoras para forzarlas a permanecer en el trabajo y no unirse a la huelga. El 8 de marzo es día de conmemorar y no de festejar.


Y me quedo con esa última frase como algo que estoy empezando a ver: la mayor parte de las veces, las manifestaciones se convierten en fiestas, en lugar de lugar de reflexión y crítica, los días de conmemoración se banalizan, se celebran cosas (¡CELEBRAN!) como el día del hambre infantil o la desigualdad, o la violencia (de género o no), etc.

Ser mujer (como ser hombre) es algo casual y no es digno de ser ni celebrado ni conmemorado, es como ser alto o bajo, rubio, moreno, de piel clara u oscura, pero ser luchador o luchadora es una elección y eso forma parte de lo que nos caracteriza como humanos racionales, como seres más interesantes (interesantes) que el resto de los animales, la ética de la elección nos hace dignos y dignas, nos encumbra… o todo lo contrario.

Muchas gracias a Pilar Clua Nieto por enviarme ese texto que me ha hecho pensar. Muchas veces, sin alguien cerca para recordarlo, yo también caería en la simpleza de la banalización.

No te rindas

no te rindas

Soy un poco excesivamente crítico: veo este mensaje en una fotografía en una reputada red social y lo único que se me ocurre pensar es: sobra el nunca.

Sé que es deformación profesional, quizá, de escuchar, en mis talleres de poesía, calidad muy superior a la media de la expresión convencional, pero tampoco es para olvidar lo bonito del mensaje sin tanto análisis.

No sé dominar o apaciguar mi hemisferio racional, analítico y dejarlo dormir un rato mientras veo estas imágenes con eslóganes más o menos trillados y, además, redundantes. Pero creo que eso es justo lo que me convierte en buen coordinador de talleres literarios: este hemisferio trabaja dejando de lado el sintético o creativo, usándolo para cuando es estrictamente necesario, permitiendo que otros y otras lo desarrollen sin tener que atender a sus análisis.

Y esta deshumildad la afirmo hoy, después de que ayer estuviese en depresión (una bastante cíclica) por las bajas de mis alumnos de talleres de escritura que siempre (también innecesario, salvo por su valor enfático) me hacen cuestionarme, cuestionar si merece la pena defenderlos, si tiene sentido seguir luchando, si no sería más fácil y más cómodo rendirse, por fin, rendirse por algo que parece, en ocasiones, evidente: no interesan.

O no interesan los talleres que imparto o coordino o no interesa la forma en la que los hago o no interesa la manera de apuntarse, de inscribirse, de comenzarlos… desde hace casi 10 años me pregunto esto una y otra vez sin encontrar respuesta y sin que, en el fondo, me preocupe: los hago porque me apetece, los lucho y defiendo tal y como son porque es como desearía que fuese aquel al que apuntarme. Pero no todo el mundo es como yo.

Algunos días, el bajón es tal que casi me rindo… pero luego, después de una clase, una alumna/amiga me dice: «me cuesta salir del taller, me cuesta irme sin ti» y entonces todo vale la pena. En el fondo de mi corazón (o alguna otra víscera) se me arranca una lagrimita que me ilusiona de nuevo.

No, no me rindo. (¿Nunca?)

Dualidad o no dualidad, esa es la cuestión.

Pero establecer la cuestión de esta manera, tan dual, no deja de ser un contrasentido. Otra vez vuelvo a dejarme influir por mi amigo Xabi, quien ha realizado una magnífica descripción de lo que supone la naturaleza dual de la luz.

dualidadCon esta imagen, tan inteligente para mostrar lo que significa la dualidad de la luz, pero también de la materia (quedaba extender ese comportamiento ondulatorio a quienes estaban establecidos como partículas, en sentido contrario a lo que había hecho Einstein, completando de ese modo el ciclo), me he acordado inmediatamente del mito de la Caverna de Platón.

A bote pronto, y sin salir de mi casa mental, puedo decir que esto conlleva una conclusión inmediata, que es el hecho de que los experimentos solo son análisis de proyecciones de una presunta realidad existente. Pero de la que no sabemos nada, ni siquiera, y esto se presume en esta imagen, la manera en la que se proyecta ni el lugar sobre el que lo hace.

¿Cuál es el espacio en el que la Realidad existe (¿si es que existe?)? ¿Cuál es el espacio en el que la Realidad se proyecta? Podemos llamar al segundo espacio de lo experimental, pero no deja de ser un espacio por definir. Si bien la palabra espacio, de por sí, ha perdido su absoluto, su visión cartesiana, en aras de una visión más relativa, tanto que fue también Einstein, entre otros, quien la puso en jaque, llevándola a un concepto tan interesante como el de la mecánica cuántica: la relatividad.

El espacio dependía de la materia que lo ocupaba. Es como en el principio de incertidumbre, el objeto observado es afectado por el observador.

Ambas frasecitas se las traen, porque dejan a la ciencia algo más indefensa que antes, cuando podían afirmar con tajante claridad cómo eras las cosas, cómo se comportaban… y pueden hacer caer en explicaciones acientíficas de las que es mejor cuidarse, pues al menos, las primeras, tienen algún tipo de metodología y escapan o buscan escapar de dogmatismos fanáticos: que haya sido capaz, la ciencia, de cuestionarse su poder, es algo que pocas otras logias se atreven a hacer, demostrando que sí, que el método es lo que de verdad importa.

Pero volviendo a la dualidad… no hago más que plantearme si la metodología más acertada no podría ser la de la redefinición de los conceptos con los que nos hemos movido hasta ahora: objeto, partícula, onda, mundo…

En su día, mundo era sinónimo de universo; átomo significaba indivisible. Las cosas cambian, al cambiar las circunstancias, podemos cambiar la manera en la que se entienden los textos. Yo creo que sobra hablar de dualidad, lo que es necesario es entender que las partículas no son lo que eran, que las ondas no son lo que eran. (Y no quiero decir qué significaba desahucio, antes de que lo pretendan redefinir)

En varios de mis talleres de creatividad he jugado con esta idea de expandir el concepto de, por ejemplo, la palabra objeto, haciendo que signifique objeto textual, sonoro, visual, acción, tridimiensional, y que la creación poética pase a ser una labor de composición de objetos (en ese sentido extendido). Estoy preparando un taller de Haikus Conceptuales donde, en el fondo, la idea es la misma: ¿Qué es un haiku? Si extendemos lo que entendemos por tal, intentando captar la esencia del mismo, igual nos hallamos ante la posibilidad de crear una acción o un dibujo o un texto… o algo completamente multimedia, al más puro estilo Fluxus.

Me interesa mucho la idea de cómo las palabras son la base, la verdadera base de aprehensión de la realidad (que no deja de ser una palabra) y de cómo somos lenguaje, que diría Ludwig Wittgenstein, de quien debo leer más. En su día no me interesó, pero es que yo era demasiado pesimista como para despegarme del existencialismo. Ahora creo que puedo buscar un complemento interesante en este alemán magnífico.

Alguna de sus ideas, extraídas de una web poco cuidadosa:

Wittgenstein opina que el lenguaje es ideal, pero que es necesario buscar su lógica interna. Escribe un libro (Tractatus) con siete proposiciones para buscar esa lógica interna del lenguaje.

  1. Parte de la idea de que el mundo es todo lo que acaece (hechos), por lo que podemos decir que el último dato del mundo son los hechos.
  2. ¿Cómo se nombran los hechos? Nos hacemos imágenes, dibujos, representaciones del lenguaje. No está intentando referir cada palabra a un elemento de la realidad como hacía Russell. Cada proposición del lenguaje es ya un hecho, es “algo”, y hay unas ciertas relaciones entre lo figurado y la figura. Para nombrar los hechos se hacen figuras de ellos.
  3. La Isomorfía Semántica se estructura en una relación de isomorfía o de representación, lo que supone que la relación de isomorfía ya no es simétrica entre dos conjuntos iguales, sino que es una relación de forma, de figuración. Si esto es así, entre lo representado y la representación hay un mínimo lógico. Esta forma mínima es inalterable ! FORMA LÓGICA. Todo el mundo es lógico (incluido el lenguaje). Por ello no hace falta crear un lenguaje ideal porque éste ya es lógico de por sí.
  4. Russell dice que el lenguaje no es ideal porque hay cosas que no tienen referencia, pero Wittgenstein no habla de referencia. Cuando una oración es falsa, si tiene sentido no debe rechazarse porque pinta algo de un mundo posible.
  5. Wittgenstein opina que pensamiento, lenguaje y realidad son la misma cosa.
  6. En la realidad y el lenguaje se distinguen cinco niveles:
    1. NIVEL DE LOS OBJETOS: Aquellos que nombramos con los nombres, éstos pueden formar parte de un estado de cosas.
    2. NIVEL DE LOS ESTADOS DE COSAS: Composición mínima de objetos que queda nombrada por la función o proposición.
    3. NIVEL DEL HECHO: El conjunto de todos los hechos componen el mundo.
    4. NIVEL DEL MUNDO: Queda nombrado por todas la proposiciones verdaderas.
    5. NIVEL DE LA REALIDAD: Conjunto de todos los mundos posibles (incluyendo el que verdaderamente existe).
  7. Hay cuatro tipos de oraciones, podemos hablar de cuatro maneras distintas de dibujar la realidad:
    1. Lenguaje representativo, declarativo, descriptivo, lenguaje de la ciencia que da información.
    2. Oraciones de la lógica, estúpidas, porque son evidentes y no dicen nada, ej: a = a (tienen sentido, pero no dicen nada).
    3. Oraciones sin sentido, oraciones típicas de la filosofía, que parecen que dibujan algo pero no, ni siquiera en un mundo posible. Este tipo de oraciones no deben utilizarse y deben ser rechazadas.
    4. Oraciones que sirven sólo para saber cómo funciona el lenguaje, porque cuando lo sabes ya no sirven para nada. (Éste tipo no lo dijo Wittgenstein, fueron los críticos del Tractatus que escribió).

Según Wittgenstein, en su Tractatus logico-philosophicus:

  • Filosofía no es una teoría, sino una actividad.
  • Una obra filosófica consiste esencialmente en elucidaciones.
  • El resultado de la filosofía no son “proposiciones filosóficas, sino el esclarecerse de las proposiciones”.
  • La filosofía debe esclarecer y delimitar con precisión los pensamientos que de otro modo serían, por así decirlo, opacos y confusos.

Es curioso saber que el denominado neopositivismo ha sido prácticamente abandonado, sin embargo no ocurre lo mismo con la filosofía analítica, también corriente del movimiento analítico, que continúa en vigor en importantes áreas culturales del mundo occidental. Tanto es así, que el mismo Wittgenstein abandona el primero y con sus “Investigaciones filosóficas” crea esta segunda corriente, pudiendo hablarse incluso de Wittgenstein I y Wittgenstein II.

Carteles e imágenes subliminales

hansel y gretel Cartel completo

hansel y gretel detalleNo sé si es que estoy muy salido (que creo que no) o que la publicidad sigue jugando con lo más básico de la sexualidad para resultar captora. El otro día, caminando por el metro, me encontré con este cartel y no pude evitar fijar mi atención en ese detalle que, espero, resulte evidente. Buscándolo ahora en internet, para esta entrada, me encontré otra imagen de no menos carga erótica… Es fuerte, ¿no?

hans_gret

Después de esto, recuerdo unas fechas en que di clases de diversas materias a una alumna que, según ella, quería ser policía para pegar a los negros. Le mostré, en una de las clases, esto de la publicidad subliminal, de la potencia de las imágenes, de la capacidad de generarlas o modificarlas, como cuando la llevé a ver una exposición de Chema Mádoz en la Fundación Telefónica y salió tan emocionada, tan conmocionada, diría, que decidió cambiar de futuro y dedicarse al diseño gráfico. Ahora trabaja en la imprenta de su familia como tal. Me da miedo pensar que debajo del cambio, siguió siendo la que deseaba pegar a los negros… Pero sonríe más y eso, siempre, me parece muy buen síntoma.

Qué maravillosa generosidad: PRVSSOLOGIA KLOSSIANA: LINGVA BORVSSICA VETUS, II

Todo el mundo puede usar esto para la investigación lingüística y en sitios web propios o en obras impresas. Tan solo, los Drs. L. Palmaitis y P.Holzwescher esperan que se mencione su nombre, y desean que cualquier persona pueda utilizar esta presentación gratuitamente en el futuro.

Yo estoy encontrando en ella un rico texto en Antiguo Prusiano y me ha encantado mencionarles en el trabajo que estoy realizando.

Sin su trabajo no sería posible el mío, pero sin el de los anteriores como la Chronicon_terrae_Prussiae de Peter von Dusburg, tampoco habría sido posible el suyo.

OLD PRUSSIAN ELBING VOCABULARY

Aunque no existe en la actualidad…

Comenzar así a contar la historia de un país, de un territorio es cautivador.

El comienzo es de la historia de Prusia en la wikipedia, de la que dejo un pedacito para quien tenga pereza de navegar…

Aunque no existe en la actualidad, Prusia ocupa un lugar destacado en la historia europea ya que ha jugado un rol primordial en los acontecimientos mas importantes del continente, específicamente el periodo comprendido entre el siglo XVIII y la Primera Guerra Mundial. En el curso de su historia, Prusia se ha establecido como diversos estados:

  • La Prusia Teuronica (1224–1525): la tierra de los prusios bálticos conquistada por los Teutones durante las Cruzadas Balticas y gradualmente cristianizada y germanizada por parte de la Orden de Livonios.
  • Prusia Real: El territorio establecido tras la victoria Polaca sobre la Orden Teutónica en la Guerra de los Trece Años y que perteneció a la República de las Dos Naciones de 1466 a 1772.
  • El Ducado de Prusia (1525–1701): Un territorio formado por la secularización del Estado monástico de los Caballeros Teutones, primero bajo soberanía de Polonia y posteriormente gobernado por margraves de los Hohenzollern y electores de Brandeburgo;
  • Brandeburgo-Prusia (1618–1701): Una unión entre los gobiernos Hohenzollern del Ducado de Prusia y del Margraviato de Brandeburgo;
  • El Reino de Prusia (1701–1918): Formado por la elevación de la unión de Brandeburgo-Prusia a reino, y que pasó a convertirse en el principal estado del Imperio Alemán (1871–1918);
  • La Provincia de Prusia (1829–1878): Una provincia del Reino de Prusia, creada a partir de la fusión de las provincias de Prusia Oriental y Prusia Occidental;
  • El Estado Libre de Prusia (1918–1947): Estado de la República de Weimar formado tras la pérdida de poder de la monarquía Hohenzollern al final de la Primera Guerra Mundial. Prusia como estado quedó abolido de facto por el Gobierno Nacionalsocialista en 1934 y de iure por el Consejo Aliado de Control, en 1947, al finalizar la Segunda Guerra Mundial.
Esto no es una broma