Me gustan los recorridos como el de hoy, donde soy consciente de lo que me ahorro en gimnasio por el mero hecho de carecer de vehículo y disponer de tiempo. Tiempo que, no obstante, ahorro también en gimnasio.
No es que sea una cantidad ingente de kilometraje, pero día a día, es un poquito de ejercicio en el hábito que me hace monje. 😉