Edad de la miseria
cuerpo de nieve
ruido alcalino
y un inigualable sentido del deber.
Cartel de retroalimentación
con una plata de titanio
en la base de la insignificancia
allá donde tus ojos
arriban a la meta de mis pantalones.
Brote de sofismos
contra la intolerancia ática
en la baraúnda de la estulticia
sin un ápice de olvido
en el abrigo.
Arte de ramas
mediante apóstoles de sol
cual hebras ciegas
celánicas
incluso.
¿
Así
llego a algún lado
?