Qué curioso, estoy de acuerdo al 100% y, sin embargo, no estoy de acuerdo.
Sigue pareciéndome, sutilmente si se quiere, sexista el contenido.
Me pregunto qué pasaría si sustituyo esposa por esposo y sirvienta por sirviente y algo me dice que no suena igual.
Cuando lo leí (hombre que soy) creía que era a mí a quien me preguntaban lo de quieres casarte conmigo… e inmediatamente, tras leer la respuesta, me dije: yo sí que sé lavar, planchar y cocinar (aunque me niegue a planchar, por motivos socioeconómicos ;-)), pero cuando leí la última réplica, me di cuenta de que lo había comprendido al revés.
Se me había pasado el hecho de que quién hace la pregunta es, de habitual, el hombre. ¿Cómo y por qué se me había pasado este detalle?
Y añadí una cosita más, me parecería necesario que si se tratase de un hombre se exigiese que, antes de proponer matrimonio, supiese lavar, planchar, cocinar (incluso coser y cantar). En resumidas cuentas, que fuese un ser independiente y capaz de resolverse sus necesidades domésticas.
Pero aún hay más, ¿por qué limitarlo a las exigencias para un hombre? También para una mujer. Para cualquier persona, independientemente del género, raza, religión, etc.
Y esto entraba un poco a cuestionar lo que venía a decir el mensajito de red social típico/tópico. Así que, por supuesto, no compartí.
Me parece que pierdo demasiado tiempo pensando en naderías en torno a naderías.