Ayer tuvimos un día bastante ajetreado y apenas tiempo para pensar en qué hacer de comer, así que, mientras veníamos del hospital a casa en el autobús de la línea 2, aprovechamos para pedir comida a domicilio, anticipándonos al hecho de que llegaríamos y no tendríamos nada que no requiriese bastante tiempo de preparación.
Lo hicimos a través de la plataforma just-eat, aunque previamente lo hacíamos vía laneveraroja.com, pero esta última fue, supongo, adquirida por la primera, perdiéndose el bello nombre de la segunda en el mar de dominios olvidados.
Desde el teléfono móvil, vía web (ya tengo bastantes aplicaciones que no utilizo con frecuencia como para justificar la instalación de una más), procedimos a la solicitud del pedido que ya habíamos hecho quizá dos meses atrás.
Fue sencillísimo el proceso y al cabo de cuarenta y cinco minutos teníamos el menú seleccionado en nuestra casa, aprovechando los treinta minutos que teníamos de trayecto, tan sólo hubimos de esperar quince que utilizamos para revisar nuestros correos electrónicos y esas otras tareas que es más cómodo hacer en el ordenador.
Pedimos el Menú de Pareja (A) que consiste en 4 rollos de primavera (crujientes y pequeños) + Pollo al curry (abundante y sabroso, pero no en exceso) + Arroz frito (convencionalmente rico y sencillo complemento) + Ternera a la plancha (con una deliciosa salsa de soja, que reservamos para hoy). No incluye ni bebidas ni postres (15,65 €). Pero sí trajo unas crujientes láminas especiadas y dulces que hicieron la suerte de postre.
Como otras veces, pensé que era más cómodo comer fuera de casa e incluso más económico, pero ayer necesitábamos estar en casa un rato y no queríamos comer en ningún restaurante. Eso sí, la verdad es que la comida a domicilio de este sitio vía just-eat es mucho mejor que la mayoría de las comidas a domicilio que no soportan bien el tiempo de trayecto. Seguramente, dentro de otros dos meses, repetiremos la experiencia.