La primera general en el ejército español

Leyendo este artículo de El País, me encuentro con una imagen que no sé si es intencionada, pero está claro que lo que sí resulta es elocuente:

Preguntada por el proceso de integración de la mujer en las Fuerzas Armadas, Ortega respondía a este diario: “Creo que podemos sentir orgullo. ¿Hay alguna sombra? Obvio. Somos el reflejo de la sociedad y en las Fuerzas Armadas hay cabestros, como en todas partes. Pero institucionalmente se han tomado medidas para que determinadas cosas no pasen y, si pasan, se corrigen”.

¿A qué cosas se refiere la general? ¿A las dos que se reportan en las imágenes inferiores, es decir, tomar medidas expulsando todo aquello que genere controversia o que denuncie que no se toman otras medidas?

No espero mucho de una institución como el ejército español (ni ningún otro)… pero este artículo me ha resultado divertido y esa frase de Tomar Medidas me ha recordado una acción que realicé el año pasado… sobre lo vacuo de esa expresión que vuelven a usar constantemente.

7 versos

Estos siete versos pueden intercambiarse sin problemas, permutándose y dando lugar a:

7! = 5040

poemas diferentes, muchos de los cuales son razonablemente sugerentes. Otros son muy malos, lo reconozco.

Pero el pequeño artefacto está hecho con cartón recuperado de los envíos que suelo pedir y cuyo material estoy reciclando como un auténtico poseso… pero no hay manera de lograr reducir la cantidad de cartón que genero, salvo que deje de pedir envíos.

Albatro

Azul rinoceronte
vuela obtuso
hálito de sangre.

Cabaña rizomática
añora semifusas
suelo de plata.

Efigie metanolítica
salta balances
brisa de muerte.

Regurgitar

regurgitar:
Del lat. *regurgit?re, de gurgit?re.
1. intr. Biol. Expeler por la boca, sin esfuerzo o sacudida de vómito, sustancias sólidas o líquidas contenidas en el esófago o en el estómago.
2. intr. rebosar (? derramarse por encima de los bordes).

Esa especie de vómito de sustancias que hemos ingerido en otro lugar y que expelemos a diestro y siniestro, publicaciones de Instagram que capturamos para volcar en Facebook, siendo además la misma empresa, imágenes de Facebook que volcamos en Insta, capturas de pantalla de Facebook con un vómito procedente de Insta que incrustamos en un blog que captamos para incluirlo en una foto que enviamos y alguien republica (no república) en otra red social.

Es un juego a regurgitar permanentemente sin creación, sin criterio, sin personalidad, vacuo, hasta rebosar. Pero ¿qué es lo que rebosará?

Y así seguimos.

Esto no es una broma