Manga por hombro

desorden exterior
de mi
desorden interior
desoyendo
desoladas señales
desde el fondo de mi economía
desastrada como yo mismo
después de un periodo de calma
decembrina
descalabro de ruinas no reflexionadas
desacierto vital
delgada línea entre la frustración y el fracaso
deseado indeseado
desacelerando una elección que ha conducido mis elecciones hasta hoy
desmemoria de ayeres.

Esto no es una broma