Me parece de sentido común darse cuenta de que «el chino» es un término que tenemos que ir desterrando de nuestro vocabulario excepto para referirse a una persona de quien sepamos que su nacionalidad (no etnia) es china.
¿Tanto cuesta entender que es racista?
Por no hablar de tremendamente inculto pues en la mayoría de los casos no sabemos si quien regenta el colmado es una persona procedente, ni siquiera, de China.