Un encuentro inesperado

Viendo una serie bastante «tontuna» en netflix para pasar la sobremesa de diario con Carmen sin salir corriendo a trabajar, me encontré con este fragmento de la cabecera que me recuerda muchísimo a una amiga suya y coordinadora de una de las milongas más exitosas de Madrid.

(Con respecto al éxito de convocatorias de eventos:

No me canso de repetir que éxito no es tener mucha gente que acuda a tus eventos, sino tener mucha gente que está contenta de haber acudido a tus eventos. No siempre coinciden ambas acepciones)

Decimonónico

Cuando dices de algo que es decimonónico estás dejando claro que tu siglo es el pasado, el siglo de Cambalache, estás demodé y lo sabes o no lo sabes. No entiendes debates que parecen no ir contigo, no comprendes usos del lenguaje que te parecen modas, como si no fueran siempre las modas la forma de ir haciendo del lenguaje un habla, no te gusta la forma de vestir, te parece caro lo que antes era, según tú, accesible… vamos, que casi estás dispuesta a asumir que con Franco o contra Franco se vivía mejor.

No es mi caso, pero a veces sí siento que mi siglo ya no es este. Es curioso, porque es muy probable que acabe viviendo más años en este 21 que en el SXX, y sin embargo mi tiempo pasó.

Tengo un proyecto abandonado, o más bien postpuesto, de 100 CDs al que he llamado «mi siglo» que hace referencia a ese siglo que puede que viva, eso sin ser una, no tan velada, referencia al libro de Gunter Grass.

CDs: esas cosas que servían para almacenamiento de datos en una era que está más que terminada. Son algo casi decimonónico. Y quizá por ello tenía que usarlos.

La poesía IA IA IA…

He decidido que quiero entrenar a una IA (Inteligencia Artificial) para que escuche poesía, no para que la escriba, que eso ya lo hago yo. 😛

Harto de ver cómo la gente genera «poemas» con una IA no hago más que pensar (con esta inteligencia natural que tengo) que ¿por qué no se entrena a la IA para que escuche poesía y no para que la escriba?

En realidad, se entrena a las IA para que HAGAN cosas, pero eso está dejando claro a qué acciones no consideramos HACER, por ejemplo: escuchar, atender, aprender, respetar… y sólo son medios, caminos para conseguir fines en esta distopía maquiavélica llamada SXXI.

Voy a escribir (seguramente por carta y manuscrito en búsqueda de lo analógico anacrónico) a varias personas enviándoles un texto que diga:

Este poema está escuchado por una IA de código abierto.

Ucrania en pequeñas dosis

Veo esta pintura sobre un bolardo de piedra de la calle y lo fotografío para enviárselo a una alumna ucraniana de los talleres de poesía para decirle, sin decírselo, que estoy de su lado en esa «guerra» que es sencillamente una invasión.

Es curioso que, lo primero que le dije justo hoy hace un año es:

Pero dejar de depender de la energía rusa tendrá un coste complicado de asumir para europa y los europeos…

y no me equivocaba. Europa sigue con reacciones tímidas y negociando con Rusia pues la dependencia energética parece ser imposible de romper así como así. El otro día leía sobre la necesidad de seguir adquiriendo energía nuclear a Rusia y por muy rápido que queramos fluir a otras fuentes de energía, en una carrera que no se está haciendo seguramente con mucha cordura y planificación, no va a ser sencillo abandonar sin entrar en una crisis inasumible para la ciudadanía europea.

Así que hacemos pintadas en bolardos de piedra de la calle y algunos gestos incluso institucionales como las banderitas en la Cibeles de Madrid (aunque unos días después las sustituyeron por las de Qatar).

Yo aún recuerdo mi equidistancia o aparente neutralidad en el conflicto Libio y en tantos otros de cuyos resultados no soy consciente pues dejan de ser noticia y no es fácil permanecer informado.

Cada día me encuentro inserto en menos causas.
Cada día me encuentro menos.
Cada día menos.
Cada día.

La personalización del blog

Esta semana he estado personalizando el blog (este diario en el que escribo) y la web de Clave 53 con el fin de homogeneizar las 3 webs que van a estar relacionadas, que son la web de Clave 53, la web de Giusseppe.net, que a su vez es trina, así que incluye las páginas HTML hechas por mí, el wordpress en el que estoy escribiendo ahora mismo y la aplicación Piwigo que sirve como soporte a los álbumes de fotografías que utilizo en la web, y por último la aún no realizada web de la «Editorial» que está a medio camino entre la de Clave 53 y la de Giusseppe, lo que me ha condicionado a elegir una tríada de colores «armónicos» así que será con fondos verdes donde la de Clave 53 es morada y la de Giusseppe es naranja y algún juego similar con los tres colores básicos que he decidido que sean:

Giusseppe.net: Color protagonista naranja (#ff9900)
Clave 53: Color protagonista morado (#800080)
Editorial: Color protagonista verde (#008000)

Para personalizar el blog, que está realizado usando una plantilla denominada Tulsi he utilizado el siguiente código extra (extraído y adaptado desde la web de giusseppe.net):


/* Cabeceras */
.entry-header {
  padding: 30px;
  background-color: #333;
  -webkit-animation: slide-in-left 3s both;
  animation: slide-in-left 3s both;}
h1.entry-title {font-size: 2em}
h2.entry-title a {color:#ff9900;}
h2.entry-title a:hover {color:#FFF;}
a, a:visited {
  color: #ffffff;
  font-weight: bold;
}
a:hover {color:#ff9900}
/* Marco Redondeado */
/* Marcos redondeados */
main {
  padding: 10px; 
  box-shadow: 0 0 30px rgba(255,159,0,0.7);
}
/* Quotes */
blockquote {
  font-size:1em;
  color: grey
}
/* Widgets */
.widget-title {
  background-color: #333;
  font-size: 16px;
  -webkit-animation: slide-in-right 3s both;
  animation: slide-in-right 3s both;
}
.sidebar .widget {
  font-size: 12px;
  background-color: #ff9900;
  color: black;
}
.sidebar .widget a, .sidebar .widget a:visited {
  color: black;
  font-weight: bold;
}
/**
 * ----------------------------------------
 * animation slide-in-left
 * ----------------------------------------
 */
@-webkit-keyframes slide-in-left {
  0% {
    -webkit-transform: translateX(-1000px);
    transform: translateX(-1000px);
    opacity: 0;
  }
  100% {
    -webkit-transform: translateX(0);
    transform: translateX(0);
    opacity: 1;
  }
}
@keyframes slide-in-left {
  0% {
    -webkit-transform: translateX(-1000px);
    transform: translateX(-1000px);
    opacity: 0;
  }
  100% {
    -webkit-transform: translateX(0);
    transform: translateX(0);
    opacity: 1;
  }
}
/**
 * ----------------------------------------
 * animation slide-in-right
 * ----------------------------------------
 */
@-webkit-keyframes slide-in-right {
  0% {
    -webkit-transform: translateX(1000px);
            transform: translateX(1000px);
    opacity: 0;
  }
  100% {
    -webkit-transform: translateX(0);
            transform: translateX(0);
    opacity: 1;
  }
}
@keyframes slide-in-right {
  0% {
    -webkit-transform: translateX(1000px);
            transform: translateX(1000px);
    opacity: 0;
  }
  100% {
    -webkit-transform: translateX(0);
            transform: translateX(0);
    opacity: 1;
  }
}

 

y luego llega la muerte

le cuentas a una mujer
que viene a limpiar la casa
tres horas al mes
que tienes un problema
muy grave

muy grave
porque se ha roto una bañera
y tienes que cambiar el baño entero
y no puedes ducharte
salvo en casa de los vecinos
o en la casa de tus padres
si fuese estrictamente necesario
o en casa de múltiples amistades
que te rodean en sus casa
donde a veces
va a limpiar
por unas horas al mes
una mujer
a quien le cuentas tus problemas
del primer mundo

y un día
ella te dice
que su principal contratante
donde habita
en régimen de cuidadora interna
y limpia su casa
más de tres horas al día
y cocina
más de dos horas al día
y donde se ducha

su principal contratante
muere delante de ella
a los cincuenta años de edad
y se ha quedado
sin casa
sin empleo
sin amistades
sin familia
sin baño
sin bañera
sin …

y te sientes tan avergonzado
que escribes este poema
en segunda persona
porque sabes que no puedes
hacer nada por ella
que ayude en su situación
de búsqueda de casa
de empleo
de amistades
de familia
de baño…

y te disculpas diciéndole
que hace tiempo
ayudaste a alguien
con sus papeles
de extranjería
para que pudiese trabajar en este país
y cotizase
y regulase una situación
inasumible

y te das cuenta
de que ya no puedes hacerlo
y vuelve a preocuparte
tener un problema grave
muy grave

muy grave…

y
estúpidamente
piensas en las viñetas
que te pedían
que no olvidaras Haití
y sabes
que lo has olvidado.

Degustación

Voy a una peluquería
que no es una peluquería
sino una escuela de peluquería
porque en esa peluquería
cortarse el pelo
es muy
muy
muy barato.

Hoy en la peluquería
que no es una peluquería
sino una escuela de peluquería
hablaba sobre restaurantes la peluquera
y los menús de degustación
que eran según ella
muy
muy baratos.

Estando en la peluquería
que no es una peluquería
sino una escuela de peluquería
me parecía que me estaban tomando el pelo
cuando decían que los menús de degustación
a cincuenta euros por persona
eran muy
muy baratos.

Cuando estaba en la peluquería
que no es una peluquería
sino una escuela de peluquería
recordé los restaurantes
donde yo he comido estos meses
por veinticinco euros por persona
que no eran muy
muy baratos.

Se está cayendo

la vida
la forma de vida
la forma elegida de vida
la forma elegida para mi vida
la forma elegida para vivir mi vida
la forma que creía tener elegida para vivir mi vida
la forma que creía que podría tener como elegida para vivir mi vida
la forma que creía tener elegida para vivir mi vida
la forma elegida para vivir mi vida
la forma elegida para mi vida
la forma elegida de vida
la forma de vida
la vida

se está cayendo

a pedazos

no sé qué hacer con esos pedazos
no sé qué construir con esos pedazos
no sé en qué se está convirtiendo esa ruina de pedazos
no sé en qué consiste que se esté cayendo a pedazos
salvo que sirve
para dar dramatismo a un poema
que intente mantener
en pie
algo de la forma que creía que podría tener como elegida para vivir mi vida

la vida:
una ilusión…

Planes de presentaciones

Tener que planear los fines de semana de los próximos 6 meses es algo estresante, pero forma parte de querer ser editor, es decir, querer estar presente en presentaciones de los libros que, poco a poco, voy generando en esta nueva faceta.

Hacerlo convivir con las demás actividades es ligeramente molesto y obliga a pensar con una antelación de la que no hay garantías de cumplimiento. Esto suele agobiarme un poquito.

¿Es el futuro algo que puedo controlar? ¿Es mi futuro algo que está en mis manos?

ufff…

Otro día hablamos del «que todo fluya» o similar.

La molestia de la estética y lo técnico

Me envía mi querida y admirada Ana Matey publicidad de sus estupendos Talleres de Creación y le comento, algo tontamente, que cuando se ve su mensaje, aparece una ristra de datos técnicos que no deberían estar ahí, seguramente puestos por la plantilla wordpress que debe de estar usando en su sitio web.

Y es que estas tonterías entre «simplificarnos» la vida con plantillas de WP evitando desarrollos HTML personalizados, supone que muchas veces acabamos teniendo «morralla» de código generado y que no sabemos de dónde ha salido. Pero, supuestamente, ha sido fácil generarlo. Lo que no suele ser es fácil modificarlo.

Espero que mi amiga no se tome a mal mi comentario que pretende ser constructivo.

Esto no es una broma