Me siento afortunado por recibir regalos como estos, con los que seguir creciendo y desarrollándome como persona.
Confidencias
Pergamino o Papiro
He terminado el rollo que propuse como actividad colectiva durante la Presentación del Proyecto !ç~ñ¿.# consistente en rellenar una larga cantidad de papel enrollado a partir del que utilizan actualmente las compañías de envíos para proteger el interior de los paquetes sobredimensionados en lugar del anterior plástico de burbujas.
Me entretuve en enrollar cuidadosamente uno de esos papeles grises y de textura áspera en torno a sí mismo y lo introduje en un cilindro de una compañía de aromatizadores que también sobredimensionan su embalaje para proteger unos finos palillos que por capilaridad van absorbiendo el líquido oloroso de un recipiente y volatilizándolo hacia la estancia en la que se encuentre.
Enrollarlo cuidadosamente (repito) fue un proceso más relajante de lo que uno se pudiera pensar en primer lugar, teniendo que hacer eso y sólo eso, a modo de actividad zen, durante un largo rato, para lograr que el extendido y arrugado papel acabase formando un cilindro espiral de ajustado grosor para poder introducirlo en el estrecho prisma circular opaco que tenía dispuesto.
Durante la presentación fue desenrollado para ir conformando otro rollo en torno a otro cilindro al modo de los antiguos rollos de papiro o pergamino y pedí que fuesen escribiendo en él a lo largo del evento lo que deseasen con tal de que usasen exclusivamente los signos utilizados en el proyecto !ç~ñ¿.#
El resultado son más de 15 metros de papel enrollado que no sé en qué momento volveré a desenrollar para mostrar en algún sitio, pero es uno de los trabajos más interesantes que creo haber realizado o propuesto, a pesar de (o justamente por eso) su carácter pobre, sencillo y, al mismo tiempo, significativo.
ChromeCast
Desde hace unos días estoy disfrutando de este nuevo cacharrito tecnológico que viene a ser un dispositivo más de control y seguimiento de la sociedad (lo sé y aun así lo uso).
Hace años que no tenemos televisión en el sentido tradicional de la palabra (no está sintonizada) aunque el aparato lo utilizamos, conectado con un cable largo y bien parapetado en una canaleta técnica que hicimos cuando reformamos nuestra casa, para acceder a todo aquel contenido al que puedas acceder con un ordenador, ya sean plataformas de streaming, vídeos o multimedia en general e incluso el correo electrónico o navegar por la web.
Ese cable evita que echásemos de menos tener que comprar un televisor «smart» que básicamente lo que hacen es tener un pequeño ordenadorcito que hace algunas de esas cosas que nosotros podemos hacer con nuestro gran ordenador y un HDMI (PC->TV).
No obstante, llevaba tiempo pensando en el «derroche» que supone tener un PC encendido casi permanentemente para el visionado de series o películas, cuando hay opciones mucho más «ecológicas». Por otro lado, llegadas las épocas de regalos innecesarios navideños, agradezco que alguien me regale algo a lo que darle una mínima utilidad. Así que entre una cosa y otra…
El hermano de Carmen (que tiene una tienda Beep), tuvo a bien regalarme(nos) este pequeño cachivache al que se le pueden sacar varias pegas, pero también algunas utilidades. La principal y más evidente es la de poder tener ese PC del que hablaba apagado casi el 100% del tiempo, salvo para algunas excepciones, como por ejemplo para dar soporte a (Amazon) PrimeTV que no funciona con el ChromeCast (sin que sepa muy bien por qué).
Cada vez que se adquiere un dispositivo tecnológico casi sin pensarlo aparecen nuevas necesidades que antes de eso no se tenían. Es curioso. O no.
Ahora tengo un problema que no tenía: el ChromeCast que tenemos (creo que versiones posteriores sí lo incorporan) no tiene salida de audio independiente del HDMI, así que la única forma de oírlo es mediante el televisor al que está conectado, pero ¿qué hago si quiero conectarlo a unos auriculares como antes hacía con un dispositivo inalámbrico conectado al PC?
La dificultad está asociada a la televisión, que no tiene salida analógica de RCA o Jack de 3,5mm, sino tan solo una supuestamente inmejorable salida digital TOSLINK, pero los auriculares inalámbricos de esta tecnología son enormemente caros, así que no es una alternativa para cuando quiero disfrutar de una serie en la TV sin molestar a mi pareja que puede querer no oírla.
Así que ahora estoy buscando una pequeña solución a ese pequeño inconveniente que seguramente pasará por adquirir (o esperar a otros «reyes») un transformador de audio digital TOSLINK a audio RCA/Jack o, mejor aún, Bluetooth. Pero claro… son mínimos gastos que no veo tan necesarios.
Pero… ¿tiene algún sentido hablar de necesidad en la era del consumismo más salvaje?
La panadería
Cada semana compro el pan en esta (a)típica panadería, que tan solo tiene pan de trigo, de centeno y ahora también de maíz, hecho al modo tradicional, sin ningún tipo de rarezas añadidas (pipas, semillas, etc) que lo único que hacen es ocultar el verdadero sabor del pan.
Nos gusta especialmente la hogaza de trigo y centeno, que se vende al peso y solemos comprar más de un kilogramo por semana, cortado en ese momento a voluntad en rebanadas, se congela ese mismo día una parte y aguanta estupendamente. Al usarlo, basta con descongelar en el tostador cada rebanada y listo.
En las ocasiones en las que la hogaza de nuestras entretelas no se encuentra disponible, compro hogazas grandes de trigo o de manera más atrevida, pequeñas hogazas de pan de centeno, negro, oscuro, denso…
Y siempre es un enorme placer degustarlo casi sin nada más que unas gotas de aceite.
Lecturas sobre Ética
Algunas lecturas que estuve haciendo durante mis vacaciones navideñas en Vera sobre Ética. ¡Qué poco sé!
🙁
El té de cada día
Cada día tomo varias infusiones de diversos colores y sabores:
Té negro con cardamomo.
Té paquistaní (un tipo de té negro aromatizado) con un chorreoncito de leche.
Té verde de jazmín.
Infusión de jengibre con canela, cardamomo, tomillo y clavo.
Infusión de manzanilla con anís estrellado.
Infusión de jengibre con limón.
En ocasiones té blanco. Otros tés verdes, como el marroquí con hierbabuena o menta en verano, por ejemplo… así que mi vida gira en torno a tazas de té, infusores, teteras, agua hirviendo, vapor, algún edulcorante cada vez más en disminución (miel de romero para el jengibre y la manzanilla, principalmente).
He llegado a pensar en adquirir tazas para próximos proyectos y personalizarlas, utilizarlas a modo de «lienzo» sobre el que escribir poemas, o dibujar o…
De momento y no es casualidad, en la presentación de mañana del Proyecto !ç~ñ¿.# expongo varias tazas diseñadas para la ocasión.
El culo del ampli
La parte trasera de nuestro amplificador está hipersaturada, pero es que tenemos la casa completamente conectada. Desde casi cualquier sitio podemos poner audio saliendo por este aparatito que lleva haciéndonos el apaño casi desde comienzo de siglo.
Lo adquirimos para poder sustituir el equipo estéreo con el que comenzamos nuestras andanzas en Clave 53 en Campomanes, 8. Durante un tiempo aquel sencillo reproductor de CDs con entrada auxiliar nos sirvió, pero pasado el primer año teníamos que tener un equipamiento más profesional que durase más y mejor, además de permitir conectarlo a altavoces en condiciones para evitar el problema de sonido que provocó algún pequeño disgusto a la vecina del piso superior.
Hace una década que el mando a distancia no funciona y tampoco funciona el regulador de volumen, que está fijo a un moderado 40% del total. Se rompió el cilindro que lo modula, pero se puede ajustar (si fuese necesario) con un destornillador.
Ahora lo tenemos conectado a dos ordenadores (el mío (LINE) y el de Carmen (TAPE-1)), tenemos un cable que lo conecta (CD) a un reproductor de buena marca de CD que es algo completamente obsoleto, y un no menos caduco reproductor de DVD (TUNER). Una última conexión (TAPE-2) está disponible desde el otro extremo de la casa, cerca del Proyector, para reproducir audio desde cualquier dispositivo que lo necesite.
Nueva web para www.carmendelarosa.com
Tras años pidiéndomelo, el día 6 de diciembre de este pasado 2018 comencé a desarrollar la web para www.carmendelarosa.com teniendo en cuenta que su mantenimiento pueda ser hecho por Carmen sin mi implicación, así como la exigible calidad de «responsive«, es decir, que se visualice (vea quedaba muy vulgar) bien en dispositivos móviles así como en pantalla de ordenador.
La web anterior estaba hecha usando tan solo el VI y un básico HTML con CSS, pero sin tener nada de javascript ni, desde luego, cumplir muchas de las exigencias (porque lo son) del buscador universal para que la web esté mejor posicionada. Por ejemplo, usar FRAMES es algo que ha quedado obsoleto y, en parte, razonablemente, porque así aseguran que la parte incluida en la web visitada es material «interno» y no que en uno de los «frames» se cuele material procedente de otro lugar inadecuado. Curiosamente, los IFRAMEs campan a sus anchas, cuando hace tiempo se consideraban potencialmente peligrosos por esto mismo.
La estructura de la anterior versión era muy simple y la he copiado en varias ocasiones para implementar una página web con rapidez y eficacia: un marco superior (frame) para un índice, un marco inferior (frame) para una firma o nota al pie y un marco central (main frame) destinado a la información de cada una de las secciones accesibles desde el índice.
Este esquema permitía hacer una página muy sencillamente y ordenada, aunque con pocas posibilidades de búsquedas y, a medida que el tamaño de la web aumentaba, la complejidad interna hacía que las referencias entre archivos pudiese resultar difícil de «trazar», aunque teniendo ordenadas las carpetas del sitio se facilitaba bastante y permitía modificar pequeñeces con celeridad.
Pasar a utilizar un blog de wordpress para «programar» una web era algo a lo que me mostraba muy reticente, pero reconozco que es sencillo una vez elegido un tema «potente» que elimina casi por completo la preocupación «estilística» (fuera el engorro de programar reglas CSS sin tener nociones muy avanzadas), derivándola a la personalización del entorno de manera visual, lo que lo hace asequible a casi cualquier neófito como yo en esto de los blogs usados como web.
VACACIONES
Ya sabemos que eso de las vacaciones de un poeta
es como el contrabando de poemas
algo raro
pero quizá no solo soy poeta
y no solo se contra
bandeen
poemas
a la sombra de la huida.
Y sin embargo…
desconecto.
La imposibilidad del lenguaje inclusivo
He encontrado esta publicación en el muro de una amiga de FaceBook y me encuentro que intenta usar la arroba para «incluir» a quienes no se sienten incluidas con el lenguaje castellano, con esa gramática que dota al género «gramatical» masculino el uso de género neutro o mixto semántico.
Y ocurren cosas como esta:
– Que es lo que más te gusta hacer?
– Vivir
– Vale pero….de algo tendrás que vivir
– Claro
– De que vives entonces?
– De la vida
– Y eso te da para vivir?
– Si claro
– Tienes título? O eres solo aficionad@?
– Soy autodidacta, un aficionad@ de la vida
– Que valiente eres, hay muy poca gente que pueda vivir de lo que le gusta
– Soy afortunad@
– En verdad si, pocos he conocido que puedan vivir de la vida(mis momentos solitarios en el bar de la esquina, ojalá alguien conteste ésto algún día…)
Por lo demás, el texto me gustaba… pero es que la imposibilidad (no sólo fonética en este caso) se demuestra día a día.