El paraguas de la vaca

Que a una vaca le pongan un paraguas
es de una ternura
que no de una ternera
muy humana.

Esa vaca es la imagen de una conocida
tienda de souvenirs
o tienda de recuerdos
y objetos inútiles
que se pueden adquirir
para cualquier regalo
en una de las múltiples ocasiones
en las que adquirir algo innecesario
para alguien a quien queremos.

Esa vaca está
protegida
por un paraguas
que
además
estaba debajo de un toldo
que protegía el paraguas.

Ese toldo estaba
completamente desprotegido
de una lluvia
que apenas tocaba el suelo.

Cash only

Muy sorprendente: Alemania, tierra de gran prosperidad y modernez, sorprendió con la dificultad de abonar casi cualquier cosa con tarjeta de crédito o débito. No es que me molestase, pero sí que fue algo incómodo por no haberlo previsto.

Posiblemente no sea ni siquiera una mala práctica el acostumbrarse a pagar en efectivo para controlar mejor el gasto privado (como una teoría sostiene que tiene por finalidad esta práctica alemana), o reducir comisiones o dependencias bancarias, disminuir los incidentes técnicos o telemáticos, mantener accesible las modalidades de pago para las generaciones que no están acostumbradas a manejar un dinero mucho más virtual que unos billetes (que son también algo virtuales, aunque menos gente sea consciente de ello)… o cualquiera que sea la razón para mantener esta política.

Durante nuestras vacaciones hubimos de hacernos con efectivo estando en aquellas latitudes pues habíamos dado por hecho (mal de males) que funcionaría como en Madrid, donde casi cualquier cantidad de dinero en cualquier lugar imaginable acepta pagos con tarjeta, hasta el punto de que en muchísimas ocasiones no suelo llevar en mi poder más de 5€ de efectivo sin sentir que puede hacerme falta otra cosa.

Por cierto, menos mal que el cartel estaba en inglés, pues no encontramos mucha gente que lo hablase con la fluidez suficiente como para explicarnos por qué.

Remedios caseros

Llegamos a Madrid.
Había muchas moscas.
No era agradable.
Habíamos estado en Alemania cercados por avispas protegidas por el estado.
No queríamos moscas.
No queríamos usar matamoscas.
Leímos en algún lugar de cuyo nombre no quiero acordarme en internet que un montón de clavos de olor taladrando un inocente limón ahuyentaba las moscas.
Agujerear un pobre cítrico.
Las moscas seguían acudiendo por pareja a deambular alrededor de los contenedores de barro donde almacenamos el remedio casero.
La casa seguía teniendo moscas.
Un poco después la casa tenía también moho.
Bajo la amarillenta piel se fue formando por la humedad una suave capa verdegrisácea.
Tiramos los limones.
Fregamos los cuencos.
Las moscas seguían riéndose de nuestra ingenuidad.

men’s world

En Dusseldorf encontré este establecimiento que dice que «esa tienda» es un «men’s world«. Me hizo gracia pensar que pudieran pensar que «sólo» esa tienda era un mundo de hombres y no todo el mundo, así, en general.

Por supuesto, me hizo gracia y no me hizo ninguna gracia. Espero que se entienda.

Yo apostillé en mi mente: «men’s world»=»the world».

calendario

Muchas veces, el mejor calendario es el más analógico de todos: simple, presente, elocuente, fácilmente modificable, y que en un primer vistazo muestra lo agotador que suelen resultar los fines de curso.

Esta es una prueba de mis fines de semana (lo más difícil de recordar) de mayo y junio. El ocio se entrelaza con el negocio en una trenza algo perversa y contradictoria.

Yo soy el SPAM

Invitado por Andrea Vidal Escabí a participar en una iniciativa de arte postal en principio orientada a los 7 asistentes (ella incluida) de su grupo del Taller de Poesía de Clave 53 en el que se encuentra, decidí hacer extensivo del mismo a mi querida Carmen de la Rosa y enviarle esta postal fabricada con una fotografía orientada a una renovación de DNI o Pasaporte que, por la razón que fuera, había quedado sin usar. 8 fotos no usadas para una renovación que posiblemente ya no me servirían por el paso del tiempo fueron lo utilizado para la cara A de la postal, que rezaba SPAM.

La propuesta de Andrea era la de generar postales/collages con el correo no deseado, pero hace años que no recibo nada que no desee recibir. Es extraño, es como si hubiese dejado de existir como consumidor. ¿Se habrán dado cuenta?

Pero como no recibo SPAM (correo no deseado) en papel, estuve tentado de realizar algún tipo de collage con el SPAM electrónico, pero implicaba imprimirlo en algún momento y me parecía contrario al espíritu de la propuesta, que trataba de recuperar el papel innecesario, no tanto de generar nuevos papeles innecesarios.

Así que terminé por asumir que mis fotografías (ya obsoletas) eran ese papel innecesario con el que realizar, sobre cartulina negra, un simple mensaje que dijese que yo soy el SPAM, lo que no deja de ser triste: ¿no soy en absoluto deseado? e instaba a hacer «conmigo» lo que se quisiera.

En realidad, no sé si quería decir (sí lo sé, pero no pienso desvelarlo) si ese «conmigo» era conmigo como persona o conmigo como representación de una persona. ¿Quién está diciendo ese «conmigo»? ¿Soy yo (el que escribe) o es mi fotografía o la postal?

En cierto modo, cada cual es libre de interpretarlo a voluntad, teniendo en cuenta que me defenderé de aquello que no me guste que me hagan. Supongo.

Esto no es una broma