4 días sin redes sociales y aún no he muerto

parece mentira
pero he podido sobrevivir
cuatro días
seguidos
a una desconexión absoluta
(y mente voluntaria)
de las redes sociales
e incluso del correo electrónico
si bien es verdad
que escribí un par de mensajes
instantáneos
para concretar
una comida agradable
con mi buena amiga maría
y su familia.

parece mentira
lo que cunde el tiempo
cuando se emplea en cosas
mucho más concretas
que una entelética relación
que
por otro lado
no por virtual es irreal.

parece mentira
lo fácil que resulta
una vez que uno comienza
a tomar las riendas de su vida
y se empodera
o apodera
de su vida
como si fuese un ser humano libre
o un hombre libre
o una mujer libre
o algo, pero libre.

parece mentira
que la pareja con la que se comparte
piso, pasado, presente y esperanzas
risas y pieles
se sienta diferente
hasta reenamorarse
más
de lo que cabe en este verso.

parece mentira
que no importen las noticias
que no son nuevas
que la recuperación económica suene a hueca
que la ciudad huela a derrota
y al mismo tiempo a felicidad.

parece mentira
que los cantautores de antaño
aún me hagan llorar
oyéndolos en frente de unos ojos
miel
que las películas nuevas
sean poco más que viejas películas
que se ven otra vez
y se disfrutan
como la primera.

parece mentira
que los besos
disparen
ganas de versos
y que la ducha de agua caliente
se dé por supuesta
como si siempre fuese a estar ahí.

parece mentira
que sobre dinero a un poeta
a fin de mes
que sobre dinero a una bailarina
a principios de mes
y que se gaste despreocupado
en aras de hedonismo
sin dios castrante.

parece mentira
(sí)
pero es verdad.

Echaré de menos a XP

A punto de extirpar de las tripas
del portátil de mi madre
el obsoleto
(por decisión de Gates)
windows XP.

Casi reconozco
haberle cogido cariño
a este sistema operativo
que
con el paso de los años
ha demostrado ser
robusto
sencillo
fiable.

Pero llega el tiempo de abandonarlo
y me cuesta extirpar este duodeno
funcional
aunque sea para instalar alguna
distribución de linux
de bajos recursos
que sea agradable a la vista
y al tacto
de quien estaba acostumbrada a su Inicio
y las cuatro cositas que usaba.

Me resisto a no dejar ni una mísera partición
dedicada
con su formatito NTFS
y un arranque dual que garantice
poder seguir usando
lo de siempre.

Pero llega el tiempo de abandonarlo
y la operación debe ser
definitiva:
sin marcha atrás.

XP ha muerto.
No demoremos su entierro
que los cadáveres descompuestos
tienden a heder.

Desagradecido

Nací
de mi madre
y de mi padre
aunque más de mi madre
por aquello de la gestación.

Nací
sin haberlo pedido
sintiendo que era su deseo
su
deseo
y no necesariamente el mío.

Nací
hace ya más de 46 años
de los que gran parte sostuve
que desearía controlar
al menos
el final
ya que no pude el principio.

Nací
involuntariamente
y esa
carencia
está siendo arrastrada
losa
sobre la espalda
de un exceso de responsabilidad
quizá
mal entendida.

Nací
sin objetivo claro
sin destino
sin fin
y con un principio que no es de incertidumbre.

Nací
tarado
y superhéroe.

Nací
extraterrestre
en mitad de un tumulto de humanos sociales
por naturaleza
e incluso puede que buenos.

Nací
desarmado
y cargado de futuro
con una necesidad de alimento
que se come letra a letra
o verso a verso.

Nací
para morir
y siempre lo he sabido
pero incluso así
supongo
debería sentirme agradecido

y no lo logro.

Mi mente sigue en Ordesa

Circo de Soaso

Hemos vuelto de vacaciones
pero mi mente sigue en Ordesa
recorriendo una ruta con Carmen
sobre la nieve de los glaciares
derritiéndose
para darnos agua fresca que beber
para darnos luz blanca refejada
mientras buscamos un circo
cascadas
entre los hayedos
entre los pedregosos musgos
y mi mente sigue en Ordesa
con la de Carmen
besándose al amparo
de una era geológica diversa
de una era geológica
de fronteras grises como rocas metamórficas
apoyando los pasos en palos
de restos de ramas caídas
para no caer.

Hemos vuelto de vacaciones
pero mi mente
sigue en Ordesa.

Problema de Cinemática

Un camión parte de Barcelona en dirección a Madrid a las 14:00 horas, y conduce a una velocidad promedio de 72 km/h.

Una hora más tarde, desde Madrid sale otro camión con dirección a Barcelona conduciendo a una velocidad promedio de 90 km/h.

Sabiendo que la distancia entre ambas ciudades es de aproximadamente 620 kilómetros, ¿Cuál de los dos conductores sonreirá más?

Haré Confeti de mis Versos

Es un verso de Carmen Cruz, que dio lugar a diversas aproximaciones dentro del Taller de Poesía y Escritura Creativa de Clave 53 que mantengo.

Ya Sara Valverde había creado un poema del que hablase en otra ocasión en este diario, con ese mismo sugerente título.

Esta vez, fue Ernesto Pentón quien me pidió que lo leyese (si es que tal cosa era posible) en la presentación de su último libro de poesía, El Mago de Chicle, que tuve el honor de prologar.

El poema en cuestión es un objeto que existe dentro de una base de datos, que tras la ejecución de una determinada secuencia de comandos SQL, produce lo siguiente:

En el vídeo que se muestra a continuación, se puede ver la lectura que hice del mismo durante la presentación en el Centro de Arte Moderno de Madrid, el viernes 4 de Abril de 2014.

El poema, textual, que incluye la sentencia SQL es el siguiente:


HARÉ CONFETI DE MIS VERSOS
(Ernesto Pentón. El Mago de Chicle, 2014)

En este mundo traidor,
nada es verdad ni mentira,
todo es según el color
del cristal con que se mira.
Campoamor

sí, es cierto
también se puede hacer versos con una SQL
anidada

SELECT palabra1, palabra2 FROM diccionario

WHERE palabra1 IN

(SELECT palabra3 FROM laberinto)

AND palabra2 IN

(SELECT palabra4 FROM noche_oscura
WHERE luna IS NOT NULL)

UNION
SELECT palabra5, palabra6 FROM data_universo

WHERE EXISTS

(SELECT verso FROM rio_de_la_vida
WHERE fluye BETWEEN palabra5 AND palabra6)

UNION
SELECT palabra7, palabra8

FROM divinidad INNER JOIN humanidad
ON divinidad.centro = humanidad.centro

UNION

...y así ad-infinitum
(en el límite de anidamientos SQL de Oracle)

así que
si lo miras desde otro ángulo
yo me paso todo el puto día
escribiendo poemas
y
desde ese ángulo
cada día es una fiesta

 


La presentación completa del libro está en:
[youtube_sc url=http://youtu.be/O6oNnIU5Wg8?t=15m5s]

Miedo de pareja

Ayer hablaba con Carmen
sobre una amiga
de una amiga
de Carmen
que
según me cuenta
ha roto con su pareja
o su pareja con ella
debido a que
parece ser
había habido una infidelidad
de más de un año de duración.

Y lo que me aterra no es que me pase esto
en ninguno de los dos lados
de la ecuación
sino el miedo previo
el miedo al miedo a que me pase esto.

Sentir que podría sentir que sin ella tendría problemas para existir
de modo autónomo
me da tanto miedo
que supera
con enormes creces
al miedo que me da estar sin ella.

Esa sensación
resulta ser un miedo liberador
que exige una fuerza humana no desperdiciada
un movimiento activo
una energía emergente
un no sé qué
que me hace sentirme
persona
viva viviente
amada amante
persona
y
.

El ojo me ve

Miro a un ojo que me ve
con la oscura profundidad de un electrodoméstico
de plata falsa
y sé que me mira
con un ojo que ve en el mío
un ojo que ve
con la oscura profundidad de un humano
de carne falsa
y sé que sabe que nos miramos
sin el mínimo atisbo
de amor.

Son miradas antieróticas
rabia de una nube ciega
que no sabe que los ojos
no se hablan
porque no conocen el sigo de la noche
con el que emprender la palabra
a manos de un caballo desbocado
caballos
que siempre andan
(por ahí)
desbocándose
estúpidos seres animados por la violencia
de una masa energúmena de vísceras
cargada sin la belleza de la poesía.

Las nubes ciegas
no comprenden que hoy
el sol
me ha dedicado un saludo
con un ramalazo azul
como la lírica muerta.

Cuchillas invisibles

Cuchillas invisibles
levantan el vuelo a las 5 de la madrugada
y quedan en suspensión
hasta el mediodía
colándose en mi alcoba (o sea en mi habitación)
polvo de plata
disuelto en (aprox)
N2 (78%)
O2 (21,%)
Ar (casi 1%)
y un significativo 0.04%
donde se cuelan
He, Ne, Kr, CO2, CH4
y algunas
cuchillas
invisibles.

Cuchillas invisibles
en mis ojos
en mi nariz
en mi garganta
en mi memoria (hoy)
en mi esperanza.

Malditas
cuchillas
invisibles
que me hacen desear
un país tapizado de alquitrán
o de hielo.

Y silencio.

Esto no es una broma