Insólito: La poesía está de moda

Ayer tuvo el lugar el comienzo o arranque de mis talleres de Poesía y Escritura Creativa y se produjo algo tan infrecuente como agradable: se llenaron dos grupos cuando habitualmente habría dado inicio en curso con un famélico grupito (y tan contento, también) como vengo haciendo desde hace ya quince años.

Aún no acabo de creérmelo y espero que se materialice en pagos y, sobre todo, en continuidad a partir de la semana que viene, para poder trabajar relajado en generar estímulos para su creatividad y su compromiso con la escritura.

Este trabajo es algo vocacional, o absolutamente vocacional, pero eso no es óbice para desear que crezca sin excesos pero con confianza y en números manejables (grupos de 8 personas) e incluso idílicos.

La presencia en una plataforma como MeetUp parece que puede dar algunos resultados más eficaces de lo esperado y de lo habitual en este tipo de soportes más o menos publicitarios, pero en cualquier caso no es suficiente para explicar la afluencia de esta semana, pues muchas personas contactaron directamente por correo electrónico y otras por Facebook e incluso algunas por teléfono.

Llegó a ser tal el número de asistentes que olvidé el nombre de algunas de las presentes que, sorprendentemente, hoy mismo han llamado para reservar y asegurar su plaza.

Si sigue como ha empezado, hay una preciosa pareja de camadas nuevas de poetas que están deseando avanzar como tales.

Mi escepticismo se basa en tres lustros de experiencia. Pero mi optimismo no ha decaído y sigo pensando que, más que nunca (o como siempre) la poesía es una herramienta, y un propósito, absolutamente necesaria. Puede que al fin se haya dado cuenta el resto del planeta, así, de forma masiva.

Hay un ataque de poesía en masa.

N’Clave de PO(esía)

Tomar el té y leer poesía.

http://clave53.org/poesia/nclavedepo.html

Actividad completamente gratuita. Te invitamos al té.
Cada mes haremos un té distinto, y en ocasiones de diferentes tipos, para agradar la mayor parte de los paladares.
Tráete los poemas que quieras y los leemos en grupo.
Sencillo y cálido.

Seremos un grupo variado y cuyo único objetivo es leernos poesía mutuamente, simultáneamente, para compartir un tiempo no acotado, un espacio delicado y muchas ganas de conocer lo desconocido.

Participa de distintas maneras no excluyentes:

* leyendo poemas (tuyos o ajenos)
* escuchando los que otras personas leen
* informando a quien le pueda interesar
* alguna otra que no se nos ha ocurrido

Contacta por email (poesia@clave53.org) antes de venir.


Otro curso más fomentando la compartición persona-persona de poesía, de descubrimientos poéticos al calor de una infusión. Es una de esas actividades que me encanta coordinar. Da igual cuántas personas asistan, lo haría para 3 personas. para un puñadito de amistades que deseen tomarse un té conmigo y leer poesía.

En esta ocasión, tengo la impresión de que habrá un elevado número de asistentes y me congratula saber que hay mucha gente interesada por lo mismo que a mí me interesa. Supongo que es lo que hace que a quienes ven y van a un partido de fútbol les haga sentirse parte de algo superior a un individuo, algo sobrehumano, de alguna manera. Esto lo encuentro yo en la poesía. ¡Qué le vamos a hacer!

Desde por la mañana (por no decir varios días atrás) pienso en la lectura que quiero compartir, en el té que quiero preparar, en cómo habilitar la sala para ser un buen anfitrión… y me hace enorme ilusión saber que quienes vienen acaban por agradecerme esos detalles que me encanta tener.

Hoy se me agolpan en la recámara los textos de Poetas Bengalíes, mi admirado y querido Joan Brossa (en esta coyuntura tan catalaúnica ;-)), Wislava Symborzska y una interesante antología de Poetas mujeres de la Generación Beat.

Pero daré tiempo a que quienes asistan lean lo que desean compartir. Al fin y al cabo, mi labor debiera ser más la de catalizador que la de lector… pero es que quiero asistir como mero lector: Adoro este evento que, por suerte, puedo proponer regularmente un viernes al mes. Quizá en el próximo haya menos gente y pueda leer lo que quiera… pero descubrir poetas que no conozco (¡¡¡y son tantos y tantas!!!) es un verdadero regalo que me hacen las personas que se acercan al encuentro, a la tertulia, a la lectura… Y a tomarse un té conmigo.

Esto no es una broma