Tres definiciones de tres palabras para un poema.

Bazofia: Dícese del político sentado en el congreso. Casa con muchas filtraciones. Fruto del bazófiro.
Bistro: Crema refrescante para calmar las piernas inquietas. Libro religioso sobre los 10 mandamientos felinos. Tienda especializada en gafas.
Brócoli: Juego para niños de baile y canto. Un oso que vive en las amazonas. Timón de barco.


La bistro se derramó sobre la bazofia
donde habitaba el subsecretario
alcanzando el brócoli que dirigía su deriva.

Aquella bazofia acababa de volver
de un bistro en el que adquirió
nuevas formas de ver el universo
y capturar un brócoli brasileño.

Nada le convenció de que su bistro
impedía dar de comer bazofia
a su tigre de porcelana
con el que sus hijos construyeron el brócoli
desgañitándose en berridos barbilampiños.

Preparándonos para el invierno

Tras años sin usar la alfombra, que retiramos por la COVID y reducir el número de superficies porosas o peludas, la vuelvo a poner esta semana por el bajón de temperaturas y tomarse algo en serio el bienestar de las personas que vienen a los Talleres de Poesía de la Asociación Cultural Clave 53 o quienes vienen a tomar alguna clase particular de Matemáticas, Física o Química.

Además, he sacado, del fondo del armario como quien dice, el pequeño radiador de infrarrojos (al fin y al cabo casi todos lo son, pues es sencillamente el rango de frecuencias del calorcito humano, entre otros) y lo he enchufado por si alguien lo necesita. Yo, de momento, no, pero soy algo atérmico.

Me gusta mimar a quienes me rodean. Hacer del mundo un lugar mejor, al menos, en la medida de mis posibilidades.

Cadáver Exquisito

Compuesto entre María Jesús Orella, Pepa Delgado, Francisco Domínguez Agudelo, Carmen Garrido García y Giusseppe Domínguez, el martes 29 de octubre de 2024 en Madrid.


Los casuarios ponen huevos verdes
y los incuban siempre sin parar,
lejanos cascabeles en el ruidoso festival de luces,
de colores,
festival de lluvia en vasos opacos
para no ver la cantidad de agua,
la cantidad de agua que cayó,
que cayó
con un sonido sordo como horizonte perdido.

Mi única decoración de jalogüín

Esta pequeña cajita que me regaló Anita Ges a su regreso de México, después de que tanto la añorase en mis talleres. Hoy la he recogido y guardado en el lugar que le corresponde, junto a los libros.

Y un té negro de Halloween, que no sé muy bien en qué consiste, salvo en sumarse al carro del merchandising o mercadotecnia que no deja títere con cabeza, vendiendo ora una festividad cualquiera, aunque no sea autóctona, ora una causa más o menos perdida… al modo de gorra del Ché.

Soprendente Mario Montalbetti

Tengo que agradecer a Ettore Ravina, una de las personas que asisten a los Talleres de Poesía de la Asociación Cultural Clave 53, que el otro día, durante una de las lecturas de Té y Poesía que organizamos, nos introdujese un fragmento maravilloso del libro Notas para un seminario sobre Foucault de Mario Montalbetti.

Me he descargado el libro completo, que no sé cómo conseguí, pero es muy probable que me lo acabe comprando en papel para leerlo con mucha más calma.

De momento, dejo constancia de mi agradecimiento y un pequeño párrafo mal formateado (no tengo ganas de editarlo en condiciones), pero que representa bien el contenido del libro. Original e interesante.

Caminando hacia aquí me sorprendió comprobar
que los cambistas andan por las calles
con chalecos antibalas
eso introduce el tema de hoy: poesía & dinero

    “El dinero es un tipo de poesía” dijo W. Stevens.

Escribiré entonces la frase en la pizarra
(algo escrito en la pizarra)
El problema es que Stevens también dijo
que la poesía era un meteoro,
un café,
un faisán
y
una forma de redención.
No importa. Es un tipo de dinero…
…que es como preguntarse
en qué se parece el dinero a la poesía
Y yo les puedo decir: en todo .
Se parecen en todo .
Lo cual no quiere decir que sean lo mismo
—para parecerse no hay que ser
lo mismo:
Nada se parece a sí mismo.
que es la clave del símil

Entonces, se parecen en todo
dinero y poesía
pero no son lo mismo.
Piensen en esto:
¿por qué vale el dinero?
Y cualquiera sea la respuesta que ofrezcan,
(porque circula,
porque es un equivalente universal,
porque brilla,…)
será la misma para el poema:
¿por qué vale un poema?
Bueno, no porque circule
porque no circula mucho
—pero sí porque es un equivalente universal
¿de qué? Del mundo;
—y sí, también porque brilla,
… a su manera
… como brillan las cosas que no son visibles
No lo están entendiendo. Fíjense:
he dicho que
lenguaje lenguaje, no hay
¿qué hay entonces?
lo que hay son lecciones
lección de cosas,
lección de palabras,
trivia
aquí,
cada martes;
entiéndanme bien, trivia que se mueve

    El modus tollendo tollens (latín: «el modo que, al negar, niega», conocido como modus tollens, negación del consecuente o ley de contraposición) es una forma de argumento válida y una regla de inferencia en lógica proposicional. Se puede resumir como «Si P implica Q, y Q no es cierto, entonces P no es cierto».

como un modus tollens,
—que ya saben lo que es:
no llueve,
entonces no hay lenguaje
o, lenguaje lenguaje, no hay, tal como digo
También,
hay lección de dinero
el Sr. Bauer lo ha puesto con gracia:
“le pagamos más al que cuida de nuestro dinero
que al que cuida de nuestros hijos”
Y ¿quién cuida de nuestros poemas
(especialmente cuando son presentados
en público)?
Los presentadores de poemas, ¿los han visto?
cuentan anécdotas, se ríen, dicen ser amigos
del poeta, haber bebido juntos…
(que es como ponerse un chaleco antibalas)
dicen cualquier cosa —menos cuidar del poema
No dicen nada del lenguaje del poema
que es lo único que importa.
Se han vuelto periodistas
Lo diré inmediatamente: el valor de un poema
no reside en lo que dice / sino en lo que le hace
al lenguaje
al lenguaje lenguaje que no hay.

Un poema realmente bueno
siempre resulta ser más interesante
que cualquier comentario que esbocemos sobre él.
No hay muchos así.
Hace demasiado calor
Hagamos un pequeño receso
diez minutos, luego continuamos

    (
    —continuemos)

Durante el receso alguien me pidió
si podía elaborar lo de la lección de dinero.
No suelo hacerlo
pero tratándose de la sesión inaugural
daré mi mente a torcer
es muy sencillo, realmente
el precio de una cosa no es el valor de una cosa
el precio de una manzana no es el valor de una manzana
etc.
hay fórmulas, si eso los tranquiliza
(en Marx, en Saussure)
prefiero que vayan al mercado y se aseguren
pero ahí no encontrarán el valor de nada
encontrarán puestos de comida
y a media mañana: sopa de morón
si tienen suerte;

También alguien preguntó por el modus tollens.
Se trata de esto,

    (escrito en la pizarra:
    p -> q, ¬q, -> ¬p)

que lo único que quiere decir
es que si no llueve (¬q), entonces
cualquier cosa puede ocurrir
y lo que yo decidí que ocurra fue lo siguiente:
lenguaje lenguaje, no hay
porque asumí que si había lenguaje debía llover
(eso es lo que el lenguaje dice, ‘llueve’)
y no llovió
así que…
Ahora avanzaré un poco más
Esto es importante,
algunas palabras corresponden a cosas

    (al menos:
    ‘perro’ a perro,
    ‘avión’ a avión,…)

Esto es más importante aún,
ninguna cosa corresponde a nada

Práctica de Tango Clave 53

Próxima Práctica: 27 de Octubre de 18:00-21:00 horas
Organiza y Musicaliza: T-Dj Carmen de la Rosa
Calle Profesor Waksman 9, 28036 Madrid (Dance esCool) Cuzco

N’Clave de Tango
Un espacio donde Practicar y Bailar Tango de forma relajada y libre.
Un lugar de encuentro de amigos tangueros.
Un modo de comenzar a bailar Tango si te has iniciado hace poco.
Un sitio para experimentar y jugar con tu Tango.
Una forma de desarrollar tu baile.
Un ambiente fácil y accesible.
Un lugar de intercambio de ideas.
Un espacio de juego musical.
Un lugar de sugerencias.
Una cita tanguera especial.

Hoy en día las Prácticas de Tango Argentino continúan siendo una referencia en el Tango, un lugar de Encuentro y de Baile.

Revistas en octavillas

Por fin puedo retomar (no sé cómo ha pasado tanto tiempo sin que pueda hacerlo) esta pequeña diversión consistente en realizar revistas grapadas en octavillas, lo que es un pequeño infierno con una impresora casera, básica, pues se suele atascar con los papeles un poco más pesados (para las portadas uso cartulinas de 120gsm).

Hoy quería terminar una que hicieron los asistentes al Taller de Poesía de la Asociación Cultural Clave 53 de los miércoles a las 20:30, titulada «Gota de Agua», pero aún no he decidido ni el papel que voy a usar ni la cartulina de cubierta, ni la he diseñado, ni nada de nada…

Pero como tenía otros documentos creados casi automáticamente para una revista titulada «Serie Permutaciones», que incluye permutaciones de palabras o nombres propios, pues hice un par de pruebas y las imprimí.

Sedoka a dos manos

¿Cuándo se dan fenómenos de apropiación cultural?

A veces me pregunto si no corro el riesgo de promoverlos a raíz de mis propuestas de acercamientos a diferentes culturas dentro de los Talleres de Poesía y Escritura Creativa.

Procuro, eso sí, tratar con el máximo respeto esas culturas a las que nos aproximamos para que sean tratadas como algo digno de reverencia, como algo digno de enseñarnos nuevas vías de exploración creativa y no como meros «juguetes» o usados con fines no intencionados por la cultura original o incluso ofensivo para sus costumbres.

No obstante, eso acaba quedando fuera del ámbito de lo que puedo controlar y me limito a intentar que vayamos por el «buen camino» de la tolerancia, la admiración ante la diversidad cultural del mundo y el respeto debido a la diferencia.

El jueves, dos personas (Susana Recover y Alejandra Dieste), compusieron este sedoka, sin cumplir el casi intrasladable patrón silábico japonés, a dos manos (o cuatro), tras una breve introducción sobre lo que es esa forma estrófica japonesa y me maravilla lo sencillo que resulta si no nos complicamos la vida con imposibilidades intraducibles (intrasladables entre culturas tan alejadas):

Desde la última planta del rascacielos
se observa la ciudad dormida.
Esas torres a lo lejos.
Ya no hay nidos en ellas:
cristal y ladrillo,
luz oscura y fría.

Aquí la breve introducción que leí antes de aproximarnos a ello dentro del Monográfico de Poesía Clásica Japonesa:

Sedoka

Este estilo fue registrado en Man’yōshū y por Kokin Wakashu. El patrón silábico es 5-7-7-5-7-7.

Katauta: también Man’yōshū registró este estilo. Katauta significa «medio canción» en japonés. El patrón es 5-7-7, como una mitad del patrón Sedoka.
El sedoka tiene una estructura 5-7-7-5-7-7. Puede escribirse en dos katauta (dos estrofas de tres versos). También en forma de pregunta y respuesta. O en forma de bloque (seis versos corridos).

Renga (poemas /tanka/ encadenados)

Renga (連歌, canción encadenada) es un género de poesía colaborativa japonesa (escrita por más de un autor, trabajando en conjunto). Un renga consiste en al menos dos ku (句) o estrofas. La estrofa inicial del renga, llamada Hokku (発句), se convirtió en la base de la forma moderna de poesía Haiku.

Dos de los más famosos maestros del renga fueron los monjes budistas Sōgi (1421-1502) y Matsuo Bashō (1644-1694).

El sistema de producción conjunta, que se llama kyōdō seisaku está profundamente arraigado en la tradición japonesa.

El Renga clásico alcanzó su cumbre por la obra de Sōgi y se le denominaba kusari renga, presentando reglas de composición complejas y minuciosas.

Otra forma de Renga evolucionó hacia Haikai-no-Renga, (significa "renga divertido") que tuvo como autores destacados a Yamazaki Sookan (1465-1553) y Arakida Moritake (1742-1549).5​ Era un arte popular, sin pretensiones literarias, hasta que Bashō le confirió un carácter distintivo, dándole profundidad, sentido y trascendencia.

Ayer recibí unas tareas convertidas en regalo

Ayer jueves, Luíño Seoane, que asiste a los Talleres de Poesía de la Asociación Cultural Clave 53 que coordino con tanto cariño, nos sorprendió en el grupo de mensajes con unas tareas que le habían generado la friolera de un cuaderno de 29 páginas. Así que procedí a realizarle una bonita edición manual de un ejemplar, impreso en papel crema, grapado y con portada de cartulina roja de 200gsm.

Lo más difícil y que me llevó más tiempo (cerca de 2 horas) fue el reordenar las páginas para poder imprimirlo en un único PDF directamente desde a la impresora convencional del estudio, lo que supuso que había que imprimir a 2 caras y 2 páginas por hoja, pero el orden inicial no servía porque el gestor de impresión no es capaz de saber qué es lo que quiero hacer.

Además, había que añadir páginas en blanco y eliminar algunas páginas (sustituirlas por páginas en blanco) que estaba numeradas sin que tuvieran que estarlo.

Utilicé el programa PDF Arranger hasta tener las 32 cuartillas que se iban a imprimir en DinA4 a doble cara, pero siempre dudo sobre si hay que decidir imprimir a doble cara seleccionando la opción margen largo (estandar) o margen corto (girar).

Perdí bastantes hojas (no tantas en papel como en cómputo de HPSmart Print Plan) porque seleccioné la primera de las opciones y salieron al contrario de como yo las quería (supongo que esa opción habría funcionado si no fuese a doble página).

Finalmente, logré el PDF definitivo que realicé imprimiendo en blanco y otra versión en papel crema (digamos «deluxe»).

Todo preparado para una nueva presentación

El viernes pasado llevamos a cabo la Presentación del libro La Montaña, de Luis Naranjo, en el cálido espacio que coordinan Dora Moya y su querido Guille, Covington Gallery, donde he de reconocer que me siento muy muy a gusto.

Es un espacio pequeño para eventos que superen las 30 personas, pero es tan entrañable y bello, además de bien situado, que repetiría siempre que pudiese los actos de presentación de libro en este lugar.

En esta ocasión, hubo personas que tuvieron que irse por no poder entrar, así como algunas que deseaban irse tras la intervención, demasiado larga, de una de las participantes en la presentación. Conviene saber cuándo no hablar demasiado, cuándo hablar de manera ordenada o no decir nada… Sin parafrasear a Witgenstein.

Esto no es una broma