Fotografías de diversos ángulos de un papel (cartulina verjurada negra, de 300gsm) repleto de restos de pruebas de distintos proyectos analógicos, sellos, etc:
Va quedando mejor que muchos de los proyectos probados sobre esta cartulina.
Diario
Fotografías de diversos ángulos de un papel (cartulina verjurada negra, de 300gsm) repleto de restos de pruebas de distintos proyectos analógicos, sellos, etc:
Va quedando mejor que muchos de los proyectos probados sobre esta cartulina.
Sobrecogedor que en el ARTE esté, implícito, el signo del €.
Nada que añadir.
Tengo un proyecto fotográfico en marcha tremendamente sencillo que juega (o jugaba) con realizar fotografías a través del hueco dejado por una mirilla sin vidrio adherida al objetivo de la cámara del teléfono móvil.
Sujetaba la cámara con la misma mano que la mirilla quedaba sujeta contra el mismo y fotografiaba algo que, de este modo, quedaba descontextualizado, resaltado, como si le hubiésemos realizado algún tipo de trucaje complejo, cuando la realidad era mucho, pero mucho, más simple.
La foto que usé fue una que contenía una combinación de un poema visual realizado con una bombilla y un libro objeto escrito a dos palabras por página.
Hoy he decidido usar uno de esos «bodegones» para ilustrar un cartel de los Talleres de Poesía Contemporánea de los grupos abiertos en la Asociación Cultural Clave 53.
Y el cartel resultante ha sido el siguiente, que acaba resultando un trabajo bastante arduo para una publicidad que caducará en menos de lo que canta un gallo.
Obvio que podían hacerse otras como…
Mucho más sofisticada, pero que conduciría a un trivial…
A veces no sé si avanzamos
o no.
Tengo una extraña sensación
de estancamiento social
de parálisis permanente
de insana quietud
de calma chicha
de mar muerta
de paz gélida
de guerra fría
de vida gris
de tormenta sorda
de ilusión apagada
de papel mojado
de lápiz romo
de palabras mudas
de amanecer opaco
de adjetivo inútil
de verbo pasivo
de enumeración nula
de rosa negra
de piedra pómez
de viento inane
de brisa cálida
de botijo roto
de libro huero
de texto ignoto
de tierra yerma
de llanto anquilosado
de llanta desinflada
de pulmones lacios
de pelo calvo
de cuero nuevo
de azulejos descascarillados
de tantas
tantas
tantas
pausas
no solicitadas…
como puntos suspensivos
para cerrar un poema.
Ayer «enmarqué» esta bonita fotografía Polaroid ® en la que se me veía contento rodeado de la gente del grupo que comenzó los talleres conmigo hace ya 2 años. El tiempo pasa rápido y su cariño va en aumento.
En la cena que organizamos a finales de junio de este curso pasado (2023-2024), Carla Aurelia trajo consigo una cámara Polaroid y un «carrete» para hacer fotografías esa misma noche y nos regaló una a cada persona de las que asistimos. Fue un precioso detalle.
Yo me quedé con el paquete gastado de las fotografías instantáneas y decidí usarlo de marco para la imagen que me correspondía.
Después de mucho pensar cómo fabricarle un soporte a esta cajita para que adquiriese la posibilidad de mantenerse verticalmente, me encontré en uno de los cajones de la mesa del estudio, el típico soporte de fotografías de mesa y no hube de hacer nada más, quedando la caja-marco de la polaroid encajada a la perfección.
Me consta que hay personas que comen esta guarrería gastronómica que, en alguna ocasión, ponen de «tapa» en los bares madrileños. Es algo cuya composición nutricional prefiero no conocer, amén de poseer una textura y un sabor inclasificables dentro de lo que llamaríamos habitualmente «comida».
Hace unos cuantos viernes le hice esta fotografía a un bol conteniendo algunas de estas cosas (llamarlas delicias me da escalofríos) y probé alguna mojada en cerveza. Mejoraba un poco su textura, algo menos cavernosa y áspera como lengua de gato muerto. Su sabor, no obstante, no demasiado. Como se dice ahora: sus propiedades organolépticas, no solo no tienen mucha forma de mejorar, sino que pueden acabar por demostrar su naturaleza plastificada y arder en el infierno.
Pensar que esa masa informe, globular, vaporosa, acabó depositada en las paredes de mi estómago me causa algo de desasosiego, pero no tanto como para preocuparme.
Las películas de terror cada día me dan menos miedo; especialmente desde que soy autónomo y me toca pagar las mensualidades de la seguridad social.
Hasta el suelo
a mis pies
se ríe de mí.
Algunos de los comandos que he utilizado recientemente para modificar el tamaño de infinidad de archivos jpg sin necesidad, ni siquiera, de editarlos con GIMP.
giusseppe@estudio53:/tmp/ultimas$ grep mogrify ~/.bash_history mogrify -resize 50% * find . -type f -size +1000k -exec mogrify -resize 25% {} \; mogrify -crop 729x729 * mogrify -crop 1000x1000 deformaciones.jpg find . -type f -size +1000k -exec mogrify -resize 25% {} \; mogrify -resize 1000 *.marco.jpg mogrify -crop 2424x1650 * mogrify -crop 2424x1635+0+1871 * mogrify -bordercolor black -border 290x675 *-0.jpg mogrify -crop 2424x1630+0+5 * mogrify -bordercolor black -border 290x685 *.jpg mogrify -rotate -90 *.jpg mogrify -resize 25% *.jpg mogrify -density 72 *.jpg
Estoy francamente encantado con el comando mogrify, del paquete ImageMagic que tengo instalado en mi ordenador Linux:
ImageMagick® is a free, open-source software suite, used for editing and manipulating digital images. It can be used to create, edit, compose, or convert bitmap images, and supports a wide range of file formats, including JPEG, PNG, GIF, TIFF, and PDF.
las gotas ocultan
sus formas
sinusoidales
dejando ver la sombra
imposible
de su transparencia
rota
unas impurezas
convierten la inocencia
del líquido elemento
en mar de átomos absortos
territorios aislados
islas de agua
rodeadas de sequedad
penínsulas húmedas
continentes inundados
de posibilidades
las gotas ocultan
su inexistencia