Acción Huecos en la Memoria

Dentro del I Encuentro de Arte de Acción en Red MUCHO en el que participé en directo (vía Instagram Live en mi perfil de esa red social) el viernes pasado, nos pidieron que proporcionásemos una grabación preferiblemente horizontal de la acción en cuestión para disponer en el canal YouTube del encuentro MUCHO Acción.

Sigo sin estar convencido de que la acción (el arte de acción) se lleve bien con el vídeo, pues crea una falsa sensación de «presentación», mucho más aún cuando se trata de un vídeo, como el que yo les envié, que no ha sido emitido en directo, sino grabado para la ocasión, aunque sea sin ensayo, aunque sea irrepetible, aunque se intente emular todo lo que tendría de efímera una acción in situ.

I Encuentro de Arte de Acción en Red MUCHO Grabación realizada con una cámara auxiliar mientras se realizaba la acción en directo emitida vía Instagram Live.

Aquí está la emisión en vivo en Instagram tal como fue emitido, con mi teléfono móvil colocado de manera horizontal usando la cámara frontal (sin percatarme del efecto espejo) y recibido en múltiples dispositivos de manera vertical.

Transmisión (retransmisión) en vivo y directo, que ahora al estar grabada deja de estar en vivo y en directo, pasando de presentación a una sutil forma de representación, de la acción que realicé para el I Encuentro de Arte de Acción en Red MUCHO el día 24 de abril de 2020 a las 18:30 horas.

No contiene las interacciones de quienes estuvieron conectados en ese momento a mi emisión a través de mi perfil de Instagram (@giusseppe.dominguez ) https://www.instagram.com/giusseppe.dominguez/

¿Qué ocurre cuando una emisión horizontal se ve verticalmente en múltiples dispositivos? ¿Es eso una elección de un plano performático o sencillamente un descontrol inevitable de un público que puede o no girar sus dispositivos con los que van a asistir al evento?

Por último añado el vídeo editado (con OpenShot 2.5 sobre Linux Mint 18.3) para colocarlo «horizontal» porque así lo solicitaban para incluirlo en el canal YouTube del encuentro MUCHO Acción.

Transmisión (retransmisión) en vivo y directo, editada con OpenShot 2.5 sobre Linux Mint 18.3, para girar la disposición vertical con la que había quedado grabada en Instagram, de la acción que realicé para el I Encuentro de Arte de Acción en Red MUCHO el día 24 de abril de 2020 a las 18:30 horas.

Editar una acción hasta el punto de girarla, cambiar el tamaño de visualización, quizá podría haber aprovechado para cambiar la iluminación, incluso agregar algo de dramatismo sobreponiendo una música inexistente durante la acción… ¿no acaba por desvirtuar absolutamente el sentido de lo que una acción poética o una pieza de arte de acción o performance art debería ser? ¿No estoy siendo demasiado dogmático al preguntarme esto en estos momentos de retoque digital permanente? ¿No habría que considerar obsoletas las propuestas que no tengan en cuenta las nuevas tecnologías como dictadoras de las formas artísticas?

La Bola de Cristal fue irrepetible

No se sabe por qué hay programas de televisión que han marcado una generación entera, aunque puede que fuese por el hecho de que sólo había una cadena nacional. Sí, puede que fuese por eso. Por otro lado, no todos los programas que se emitieron entonces en esa única cadena nacional han marcado tanto como otros. En concreto, no conozco a nadie (de mi entorno) que no considere una joya la maravillosa Bola de Cristal, con sus Electroduendes, su Bruja Avería, sus llamamientos explícitos a dejar de ver la tele para no acabar convertido en un becerro, ni su aperturismo que llevó a ser prohibida (prácticamente) tras permitir canciones del punk más radical de aquella época. Hablamos de una época que acababa de vivir un golpe de estado (Tejero, 23F del 81) que reclamaba volver a los tiempos de Franco.

Y ahí, agazapada, galopaba la siguiente amenaza de la libertad, llamada consumismo, que nos hizo no caer en el comunismo, según algunos y que nos arrastró a la esfera del neoliberalismo que imperaba en la era Reagan-Thatcher.

Pero los guionistas de aquellos electroduendes eran verdaderos adelantados a su tiempo que vieron lo que se avecinaba y hacían decir a la antagonista Bruja Avería «¡Viva el mal, Viva el capital!» en cada episodio, amén de reírse del absurdo de practicar deportes en gimnasios, o vestir a la moda, más preocupados por la apariencia que por el contenido.

Llamaban a voces a leer, a desarrollar la creatividad, la imaginación, a desabrocharse la mente, a usar el paracaídas del cerebro que sólo sirve si está abierto.

Programa emitido en TVE entre 1984 y 1988, dirigido por Lolo Rico, si algo caracterizaba a La bola y la convirtió en un espacio único fueron las grandes dosis de imaginación y la libertad creativa. Siempre pendiente de las últimas tendencias, era lógico que se empapara de la estética y la cultura que marcó los 80: la movida madrileña, La Bola se convirtió en el mejor escaparate para este movimiento musical logró popularizarla y la acercó a todos los que no podían acceder fácilmente a ella por no vivir cerca de Madrid. Personajes hasta entonces nunca vistos como el Hada Truca (Alaska), El Cuarto Hombre (Javier Gurruchaga), el Librovisor (con Pablo Carbonell y Pedro Reyes) y, como no, los Electroduendes marcaron un antes y un después dentro de los programas infantiles. La Bruja Avería, Maese Sonoro, el Hada Vídeo y Maese Cámara hicieron reír y abrir sus mentes a una nueva visión de la actualidad a miles y miles de niños de la generación de los 80.

El sábado 18 de abril, descubrimos que RTVE (algo más modernizado que en aquellos tiempos) tiene todos los episodios que se grabaron de La Bola de Cristal disponibles en su plataforma RTVE A la carta, y Carmen estuvo disfrutando de uno de ellos en nuestra flamante televisor de pantalla casi plana, conectándonos con un dispositivo conocido como ChromeCast, que permitía manejar el programa desde el SmartPhone… y sin embargo, los guiones de entonces no parecían en absoluto obsoletos.

I Encuentro de Arte de Acción MUCHO

Me han invitado a participar en este encuentro y, aunque yo no soy muy de «emisión en vivo», por lo que no me ha gustado nunca la TV, ni la radio, he decidido poner mi atención (MUCHA) e intención para pensar una acción que tenga algo de sentido grabada/emitida y no sólo vivenciada.

Aposté, dado el tema de la convocatoria (La Memoria), adaptar una vídeo-creación del proyecto «Laboratorio de Experimentos Poéticos», titulada «Huecos en la memoria», basado en una expresión de
Geneviève Gaitan, de El Patio de Martín de los Heros, donde he realizado tantas acciones

MUCHA ATENCIÓN:

MUCHO está a punto de nacer.

MUCHO es un encuentro de Arte de Acción en Red con el tema central de la Memoria.

MUCHO se va a celebrar en streaming a través de Instagram el próximo viernes 24 y sábado 25 de Abril.

MUCHO cuenta con la participación de una veintena de artistas de la acción.

MUCHO tiene un canal de Youtube en el que colgaremos los vídeos de las acciones a posteriori ( por si llegas tarde), para su total disfrute.

MUCHO lo organizamos gente con mucho amor al arte.

MUCHO nos tememos que les va a encantar.

#artecontemporáneo #artedeaccion #mucho #performance #arte #artenstreaming #encuentro #memoria #cuerpo #pensamiento #arteadomicilio

Algunas de las personas que vamos a participar en este encuentro online (en vivo a través de Instagram) son:

  • @anamaesobroncano
  • @raroarteperformance
  • @pauladctnz.lr
  • @stahlfabrik
  • @laquerenciaacciones
  • @crisisximpum
  • @giusseppe.dominguez
  • @alinepart
  • @transformario
  • @grossifaustoe5
  • @arte.para.despertar
  • @v_ripoll
  • @micuerpohabla
  • @tarhaerena

Actualizando mi blog de desarrollo y backup

Sí, lo confieso, soy un paranoico y un obsesionado con las copias de seguridad. Eso lo sabe cualquiera que me conozca al cabo de menos de 5 minutos de conversación.

Por supuesto, una de las cosas para las que más utilizo una raspberry que me regalaron hace años es para tener, por fin, una copia completamente funcional restaurada de mi blog (este en el que estoy escribiendo) para poder hacer pruebas o sencillamente para dormir tranquilo sabiendo que uno de estos días, quizá mi Hosting Provider dejará de funcionar de la noche a la mañana… o algo similar.

Instalar un servidor LAMP en la raspberry es más o menos complicadillo, pero lo verdaderamente complejo es exportar mi blog del servidor original (alojado en el servidor compartido de mi proveedor) e importarlo en el local, lo que implica unos cuantos cambios, entre otros, de nombre de SITE para que no se vuelva loco con el original (lo que puede derivar en un desaguisado a la mínima).

Esta semana quería poder usar el servidor de backup (accesible externamente gracias a No-IP en https://clave53.ddns.net/blog)o de desarrollo para hacer pruebas de distintos «themes» antes de hacer la elección definitiva en el de producción. Resulta que cada vez que intentaba administrarlo WordPress me decía que tenía que conceder acceso FTP al mismo… y me estaba preocupando un poco por aquello de la inseguridad de las conexiones FTP, amén de no tener claro qué permisos debía conceder, ni a qué carpetas, al usuario que accediera por ftp desde los servidores de wordpress para actualizaciones o nuevas instalaciones de plugins, themes, etc.

Eso sin hablar de habilitar el puerto 21, por ejemplo, en el router para que fuese accesible desde TODA internet. Lo que no dejaría de incomodarme mucho… tan sólo tengo abierto el puerto 443 dirigido a la raspberry desde el otro lado de la red local. Y a veces no me deja dormir. 😉

Intenté que el certificado SSL no fuese autofirmado, así que aparece una advertencia diciendo que vas a entrar en un sitio poco seguro (siempre será más seguro que una conexión no cifrada, pero eso es otra cuestión), pero parece poco menos que misión imposible si tienes una IP dinámica y no quieres contratar servicios «profesionales» de un DDNS.

Por fin, en este artículo, encontré que había una solución que pasaba por dejar que la descarga se hiciese por HTTP y me pareció mucho más sensato, añadiendo esta línea en el archivo wp-config.php, que no me gusta mucho toquitear, porque no deja de ser uno de los más «sensibles» de la instalación del wordpress:

define('FS_METHOD', 'direct');

Eso ha sido todo y me ha permitido, por fin, actualizar el wordpress del blog de desarrollo, así como instalar nuevos temas para ir probándolos antes de usarlos en producción.

Por si fuera poco, de la tarjeta microSD que usa la raspberry hago un par de copias cuando considero que tiene una instalación que querría restaurar. (Es decir, un backup del backup). Sí, definitivamente soy algo paranoico.

 

Algo abochornado

El otro día, mi alumno de talleres y querido amigo Ernesto Pentón me dedicaba en su blog una entrada que me abochornó parcialmente, y la incluyo íntegra en este pequeño espacio propio:

Foto de GiuppeEste es Giusseppe, un tío genial que me ha enseñado un sinfín de cosas y me ha mostrado la libertad de la poesía.

Pero sobre todo me ha enseñado la belleza de su alma que siempre está disponible para la belleza.

Más allá de ser mi profe del Taller de Escritura Creativa y de haber prologado varios de mis libros es mi amigo y un ser humano con una calidez especial.

Amamos a la gente por todo tipo de razones, todas ellas pueden resumirse en una sola palabra: humanidad. Gracias a la vida por permitirme ser amigo de un gran ser humano.

E.

Hace tiempo que renuncié a ser el mejor en casi todo: el mejor científico, el mejor matemático, el mejor filósofo, el mejor filólogo, el mejor poeta, el mejor artista… pero no he renunciado a ser el mejor yo posible. Sigo intentándolo y sé que no es algo terminado, pues mi tendencia (digamos natural) es a no ser tan estupendo y maravilloso como me pinta mi querido Ernesto.

Soy de natural frío y poco empático, casi diría que con ciertas tendencias psicopáticas o incluso sociopágicas. Bastante neurótico y algo esquizofrénico… rencoroso y con una sangre fría que me asusta en ocasiones como cuando me da por pensar lo que haría ante un vecino molesto.

La empatía la construyo desde la razón y me acerco a una empatía que raya en una tolerancia intolerable, como cuando soy capaz de suponer que el pobre presidente de los EEUU quizá tiene algún problema físico que le hace comportarse como cuando la irritación de mis hemorroides me altera el ánimo y el humor, o cuando defiendo la persona de Esperanza Aguirre aunque aborrezca sus políticas.

La calidez la he ido aprendiendo gracias a rodearme de gente cálida que me contagia esa forma de sentir sin pensarlo todo, como mi maravillosa Carmen de quien no paro de aprender a abrazar con una generosidad que jamás soñaré con tener, o mis amistades varias (largo enumerar, Silvie, María, Aída, Jose, Xabi…) de quienes continuar adquiriendo la habilidad de relacionarme con personas que valoran a la persona por sí misma (ese algo indefinible) y no por sus cualidades.

Siento y sé que es algo «artificial» o racional mi construcción como «buena persona», pero no por ello me parece menos cierta, no intento decir que sea una mala persona disimulando, sino que intento ser la mejor versión posible de mí mismo, aunque me cueste no poder ser el mejor de otras cosas, porque a veces es así.

Cuando conocí a mi amiga Sylvie, allá en el lejano 1996, ella me hizo darme cuenta de lo importante de ser una buena persona por encima de consideraciones más, digamos, intelectuales. Y descubrí lo mucho que me quedaba por hacer en ese camino. Y me puse a ello. Y sigo en ello.

Por eso quizá quise poner en mi tarjeta de visita ese jueguito de:
Giusseppe Domínguez
Poeta, Performer, Persona.

Quiero ser la mejor Persona posible. Es mi gran performance en este mundo en el que quiero construir un poema llamado Giusseppe Domínguez que no se distinga en absoluto de la vida que vivo.

Agradezco que haya personas como Ernesto, con una bondad mucho más natural de la que yo pueda tener jamás, que me agradezca el trabajo realizado en esta dirección.

Composición de audio de Vivir es la última palabra

Ayer publiqué el vídeo de la pieza de Ana Matey, titulada «Retratos en mi ventana, 11», que es la que me dedicó con todo su cariño y buen hacer.

Hace unos días, me pidió amablemente, como suele hacerlo ella, que colaborase con su proyecto de vídeo-creaciones que pueden ser etiquetadas de performáticas o instalativas… o vaya usted a saber, y me sentí orgulloso de poder hacerlo.

En estos días de ruido y furia, de alborotos informativos y desinformativos, de miedos y alteración de la vida por causa de un virus que ha convertido el planeta en una jaula de jaulas por nuestra propia protección, en estos días de confusión y capas de voces que no se escuchan, salvo cuando se oyen a sí mismas, quise hacer una pieza de audio, que Ana iba a mezclar con un vídeo suyo (quizá o no, bajo la influencia de mi audio), que reflejase ese estado de solapamiento de voces, de ruidos sobre un inexorable paso del tiempo, de un pulso constante, representado demasiado obviamente por ese metrónomo de fondo…

Gracias a Audacity sobre Linux Mint, fui creando una pieza sonora con distintas pistas que se componían a modo de palimpsesto fónico que usaba el espacio acústico preexistente y con restos de piezas pasadas, como noticias en distintos medios de comunicación, en distintos idiomas, en distintos países… y un texto leído por mí con todas las palabras que comenzasen por VIR del diccionario de la RAE, que curiosa y afortunadamente concluyen con VIVIR, así que le dio el título perfecto a la pieza.

Las pistas que componen la pieza son:

1.- El pulso de un (pseudo)metrónomo generado con Audacity.
2.- Minutos de aplausos (dedicados al personal sanitario) desde mi ventana grabados el día 23 de marzo de 2020 a las 20:00, aproximadamente. Esta pista, que era mono, la corté y pegué en dos canales cada pedazo, de modo que no se corresponde directamente con el audio de los aplausos, sino con cómo lo oígo.
3.- La pista «Noticias», en estéreo, contiene noticias de Francia (en francés), en el canal izquierdo, y noticias de EEUU (en inglés) en el otro canal. Se solapan de modo que inicialmente sólo se escucha por uno de los canales y luego pasa a escucharse por ambos para terminar en el otro canal.
4.- Una pista convertida a estéreo del discurso de Pedro Sánchez sobre el confinamiento en la cuarentena a la que estamos ahora mismo sometidos.
5.- Una lectura de todas las palabras del diccionario RAE que comienzan por la terna de letras VIR, haciendo referencia a mi pieza de campo semántico VIR.

Vivir es la última palabra

Hoy he tenido el regalo de ser incluido en el proyecto de Ana Matey titulado Retratos en mi ventana rodeado de una veintena de artistas a los que admiro y respeto:

Jose Antonio Nieto aka Pangea, Mario Bastian, Wade Matthews, Isabel Corullón, Marta Sainz, Christian Fernández- Mirón, Mario Montoya & Daniel Spence, José Manuel Berenger, Yolanda Pérez Herreras, Bartolomé Ferrando, Giusseppe Domínguez, Nieves Correa, Felipe Ortega- Regalado, Johanna Speidel, Isabel León & Jorge Talavera, Sofía Misma, Pedro Alba, Joana Bravo, Joan Casellas, Paco Justicia, Maria Rosa Hidalgo, Rosa Palmeida, Enrique Zaccagnini, Paquito Nogales, Igor Sousa…

[youtube_sc url=»https://youtu.be/qkC96g9iRRg» title=»Retratos%20desde%20mi%20ventana%2011″]

Para la pieza que me incluye, la número 11, realicé hace unos días la composición «palimpséstica» titulada Vivir es la última palabra relacionada con la terna de letras VIR, en este periodo vírico que estamos viviendo con tamaña intensidad, lo que lo vincula a mis proyectos de Campo Semántico y Palimpsesto.

 

El monstruo de la noche

Duermes.
Duermes.
Duermes.

Alguna razón te sobresalta y te despierta.
(En realidad te despiertas reflexivamente)
(En realidad te sobresaltas reflexivamente)

No puedes dormir.
No puedes dormir.
No puedes dormir.

Pongamos que tienes tos.
Pongamos que tienes diarrea.
Pongamos que tienes cefalea.

Te levantas como si pudieses remediarlo.
Te levantas y sientes que te despejas del velo de la noche.
Te levantas y te separas del calor de su cuerpo.

No puedes dormir.
No puedes dormir.
No puedes dormir.

Y es entonces
en ese preciso instante
en mitad de un silencio oscuro.

Un pensamiento sacude tu mente con obsesión.
Un único pensamiento.
Un único pensamiento.

No importa el pensamiento.
No importa sobre qué irrumpe tu sueño en mitad de la nada.
No importa saber que no es algo importante.

Estás en la cama.
Estás en una ciudad que duerme.
Estás en un planeta que contiene el aliento.

Intentas dejar de lado el pensamiento.
Intentas volver a acostarte.
Intentas dormir.

No puedes dormir.
No puedes dormir.
No puedes dormir.

El pensamiento absurdo te asusta.
El pensamiento único te obsesiona.
El pensamiento no deja que afloren otros pensamientos.

Sabes que una buena manera de dejarlo de lado es durmiendo.
Sabes que a la mañana siguiente ni recordarás lo que pensabas.
Sabes que estás en un bucle que has roto mil veces.

Intentas pensar en otra cosa.
Intentas recordar los planes laborales de la semana.
Intentas contar ovejas o soldaditos de plata.

El pensamiento no se va.
El pensamiento te agarra por los intestinos.
El pensamiento se sobrepone a tus vanos intentos.

No puedes dormir y te acuestas respirando despacio.
No puedes dormir y te planteas volver a levantarte.
No puedes dormir y crees que no podrás en toda la noche.

No puedes dormir
No puedes …
No …



No me hago las fotos que hay que hacerse

Parece ser
que estar en una manifestación
es hacerse fotografías
luciendo un vestuario apto para la ocasión.

Parece ser
que estar en una manifestación
es dar los gritos o consignas
que nos digan que demos
o saltar por los aires salvo que seamos hitler.

Pero a mí se me da mal
hacerme las fotos que hay que hacerse
como cuando no hago fotografías
de los eventos que coordino
para que vea el resto del mundo
que no asiste a los eventos que coordino
que hago muchas cosas
como eventos que coordino
o performances de esas cuyas fotografía
dejan constancia del acto
que no sé si, en sí mismo, se considera importante
salvo que exista reportaje.

Pero a mí se me da mal
obedecer ciegamente
aunque soy bastante obediente
por otro lado
y saltar no está en mi ADN
ni lo soportan mis rodillas
ni mi repugna a las falacias
incluso aunque pueda parecer, visto desde fuera,
que no simpatizo con lo que hay que simpatizar
y me siento desconectado
expulsado sin que me expulsen
o incluso cuando sí que me expulsan
quizá justificadamente
porque quizá no soy rentable
para una lucha completamente necesaria.

Parece ser
que no soy apto
para manifestarme.

Nunca he sido buen participante en manifestaciones
que sean reivindicativas
o que sean recreativas.

Me agobio en conciertos
que superen las 30 personas.
Me orillo en masivas concentraciones
como cáscara de crustáceo arrastrado por las olas.
Me inhibo ante compromisos
que requieran mi simpleza.

Y acabo de constatar que llevo escritas tres
frases que comienzan por «me».

Quiero quitar»me» de en»me»dio
y dejar de estar donde no «me» quieran
quizá porque no soy estratégicamente útil.
No es (soy) tan importante.

La espera más larga de mi vida

Un pequeño trabajo en audio que realicé a petición de mi querida Ana Matey, quien acabó usándolo en un evento que realizó en Centro-Centro.

Fue así, directamente, sin ensayo, sin pensarlo apenas… mi confesión personal sobre la espera más larga de mi vida. No pude evitar pensar en mi proyecto performático «La espera», que había realizado unos años atrás.

Esto no es una broma