La cinta roja
en papel de cuadros
deja su sombra.
Una palabra escrita
con tinta de bolígrafo.
Ayuda agenda
parece otra palabra
bajo las letras.
El agujero roto
una hoz traza al silencio.
Diario
La cinta roja
en papel de cuadros
deja su sombra.
Una palabra escrita
con tinta de bolígrafo.
Ayuda agenda
parece otra palabra
bajo las letras.
El agujero roto
una hoz traza al silencio.
El curso estará dividido en las siguientes secciones:
El haiku, consiste en un poema breve de tres versos de cinco, siete y cinco sílabas respectivamente. Es una de las formas de poesía tradicional japonesa más extendidas.
Este camino
ya nadie lo recorre
salvo el ocasoMatsuo Basho
Canción protesta
después de los setenta
canción de próstataMario Benedetti
(como prueba de que se puede seguir reinventando el género)
Tradicionalmente el haiku, así como otras composiciones poéticas, buscaba describir los fenómenos naturales, el cambio de las estaciones, o la vida cotidiana de la gente. Muy influido por la filosofía y la estética del zen, su estilo se caracteriza por la naturalidad, la sencillez (no el simplismo), la sutileza, la austeridad, la aparente asimetría que sugiere la libertad y con ésta la eternidad.
Datos Prácticos:
Plazas limitadas. Grupos de un máximo de 10 personas. (mínimo de 4 personas)
Fechas: Jueves de ABRIL 2016
Horario: 21:00-22:00
Cuota: 40 Euros (4 horas)
Promociones: 29 € a desempleados, universitarios.
Inform. y Reserva: poesia@clave53.org // 655 99 04 13
Coordinador: Giusseppe Domínguez (www.giusseppe.net)
Lugar: C/Costanilla de los Ángeles, 2, Esc. Izda. 1-Dcha. Metro Ópera (L2, L5). A 5 minutos de SOL.
En el olvido
vivo impertinente
tu ausencia.
Con tres cañones
por banda viento en popa
a toda vela.
El sol canta
con fuerza ingente
la alergia salta.
Un ribosoma
en medio de la célula
se reduplica.
En la ignorancia
un grano de atrevimiento
es ignorado.
Bajo la manta
el ruido restablece
las libertades.
Las rayas de la camisa
que llevo puesta
no son de ninguna cárcel.
intrascendente
llama en la niebla
detrás
tus ojos.
ese bolígrafo
abrazado por palillos negros
llora silencios.
tu teléfono y el mío
mirándose
juegan a recordarnos.
su nariz
al volverse
me hizo una llave de yudo.
Se cruzan nuestras llamadas
con nuestra electricidad
y la energía
que nos comunica
viene cargada
de poesía.