.gl

TLD (Top Level Domain) de Groenlandia.
Tiene la curiosa casualidad fonética de pronunciarse con el final de goo-gle. Y casi la misma grafía.
Así que lo utiliza para sus acortamientos de URL (Uniform Resource Locator)
Me gusta especialmente para los mapas:
Donde
https://maps.google.es/maps?q=groenlandia+dinamarca&client=ubuntu&channel=cs&hnear=Groenlandia&gl=es&t=m&z=3
se queda en
http://goo.gl/maps/q9Vuz

La tecnología internáutica es tan diversa que permite incrustar cositas como:

Ver mapa más grande

Y hacerme recordar que hubo un tiempo en el que deseaba ir a vivir a Groenlandia, a vivir de una mina de Wolframio, que ahora se denomina, en muchos lugares, Tungsteno y que castellanizadamente se escribe Volframio. Hay que ver, la de vueltas que da el planeta… y yo casi sin enterarme. Pasan tantas cosas…

El elemento químico 74 es denominado de dos maneras diferentes: Volframio y Tungsteno.

Del mineral wolframita compuesto químicamente por una proporción iónica de calcio, volframio y cuatro partes de oxígeno, fue donde se descubrió originariamente este elemento químico, y de ahí su nombre, adoptado por la IUPAC en su 15ª conferencia, celebrada en Ámsterdam en 1949.

No obstante, en 1758 Axel Fredrik Cronstedt lo denominó como Tungsteno que significa en sueco «piedra pesada» en alusión al mineral que lo contiene, esto hizo que en el mundo anglosajón fuese adoptado el nombre de Tungsten en detrimento de Wolframium a pesar que el símbolo químico es W.

El nombre Wolframio fue suprimido en favor de Tungsteno en la Nomenclatura de Química Inorgánica. Recomendaciones de la IUPAC de 2005. Los miembros hispanohablantes de la IUPAC, entre otros, han impugnado esta recomendación y abogan por la adopción del nombre de Wolfram en inglés y su correspondiente Volframio en español, acorde con el símbolo químico que lo representa W.

15 de Junio, día contra los CIEs (Centros de Internamiento para Extrangeros)

user_422_dia_contra_los_cies_15_jHoy una alumna de un taller de poesía me ha recordado esta efeméride triste, devastadora, que me hace sentir como un alemán que no hubiese querido saber nada de los campos de concentración durante el gobierno nazi.

Leo en wikipedia, sobre Dachau, lo siguiente:

El Campo de concentración de Dachau fue un campo de concentración nazi cercano al pueblo de Dachau, al norte de Múnich, en Baviera (sur de Alemania). El campo fue construido sobre una fábrica de pólvora en desuso y sus instalaciones principales fueron terminadas el 21 de marzo de 1933. Al día siguiente, los primeros prisioneros fueron internados en el campo. Junto con el mucho más grande campo de concentración de Auschwitz, Dachau es uno de los más recurridos ejemplos de campo de concentración nazi para el público.

Gestionado al principio por las SA y SS locales, desde 1934 estuvo bajo la autoridad de las SS. Fue escenario de castigos tremendamente crueles y fue modelo del sistema de campos ordenado y eficaz. Su gestor principal, Theodor Eicke, nombrado por Heinrich Himmler, fue el responsable de la consideración de los prisioneros como enemigos infrahumanos del estado y del especial tratamiento dado a los judíos, en forma de castigos devastadores desde el punto de vista físico y psicológico. En Dachau se realizaron también cientos de experimentos médicos ilegales e inhumanos.

Y me detengo en esa última palabra: «inhumanos«. Pienso si no debería corregir la edición de la entrada correspondiente en la enciclopedia libre y eliminarla, pues lo que ha quedado demostrado es que fue tremendamente humano lo que se hizo allí y lo que se sigue haciendo en tantos otros lugares.

La noticia que ella, mi alumna, trae a colación es la siguiente:

¿Sabes que son los Cies? Los Cies (Centros de Internamiento para extranjeros) son cárceles donde se encierra a las personas que no tienen papeles, hasta 60 días, a la espera de su expulsión, que no siempre se produce. Muchas veces detienen a una persona en una redada por fenotipo, la liberan a la semana de estancia o a las 60 días, o la expulsan… No tener papeles no es un delito, es solamente una falta administrativa y no puede estar penado con la cárcel. En España hay 7 CIEs. El de Madrid está en Aluche. Seguro que has pasado por delante muchas veces sin saber que estaba ocurriendo allí.

Sobre Lusacia y los Sorabos

Hoy he terminado (después de una semana de locura en la que tuvieron que ser dejados a medias) los trabajos sobre las lenguas sorbias o sorabas. Ha sido interesante, pero algo desesperante porque apenas había información separada para los dos idiomas (alto y bajo sorabo), como ya me pasó con el Tocario (A y B).

He encontrado material increíble, como la descripción fonética de ambos idiomas, o mapas históricos como el que presento en esta entrada. Ha sido una especie de viaje maravilloso por el tiempo y el espacio… sin efectos cuánticos adversos.

Sorbios en S XVIII

A pesar de la complejidad e inabarcabilidad del proyecto, sigue pareciéndome fascinante el proceso, la búsqueda, la indagación, el aprendizaje…

No pude huir de una maldita procesión

El domingo pasado, en Daimiel, no pude escapar de una maldita procesión, de esas religiosas que inundan las calles de nuestro país con la excusa vana de la tradición.

Me planteaba un problema que era el de estar formando parte pasiva del evento: habíamos ido (Carmen y yo) a tomar unas cañas con su hermano y su familia. Estábamos en mitad de una plaza cuasi peatonal por la que, repentinamente (aunque estaba avisado, pero yo no lo sabía), se presentó una comparsa de sevillanas y viejitas con mantillas, unos cuantos en una banda musical tocando pasodobles y marchas militares, aunque casi podría decir que son sinónimos (alguno lo hacía bien, he de reconocer) y unas niñas vestiditas con trajecillos típicos manchegos. Detrás, terminando la procesión, un grupo de hombres cargaban con una estructura que se preveía pesada sobre sus hombros. Sobre la estructura una figurita de una presunta madre de un presunto hijo de un presunto dios… cuya sexualidad queda en duda. La madre no era tan natural como para haber sido engendrada de manera heterosexual, sino por algún tipo de inseminación artificial, según cuentan.

Aún había más: detrás de esa ostentosa muestra de horterada dorada, avanzaban unos lugareños con velas y otros aparejos encendidos, con miradas pánfilas y saludos de cortesía.

radicalMi problema/dilema era si seguía formando parte de aquello o me levantaba y me iba.

He decidido hace tiempo que es necesario empezar a ser un poco más radical. Parece mentira, pero sí, me parece que hay que empezar a decir más frecuentemente no. Un NO grande y obsceno, un no, de los girondinos, de los guillotinantes, un no noooo, un puro no, vaya, un no de tres y cuarto, un no de no me da la gana, real o republicana…

Inclusive, he llegado a escribir un curso para decir no, completamente gratuito.

Por ejemplo, habiendo tanta gente que dice ser atea, o no practicante, ¿cómo puede ser que no conozca apenas nadie que se niegue a entrar en una iglesia a formar parte de una ceremonia religiosa? Sé lo que es presión social, pero debe ser contraatacada, porque está empezando a hartarme tanta pasividad.

Llegan estas fechas, primaverales. Los infantes hacen las comuniones, las parejas se casan (aún por la iglesia muchas) e incluso bautizan sin parar a bebés ignorantes de lo que les hacen. Las familias, con cariño y buena fe, invitan al personal a formar parte del evento, invitan a asistir al acto sin darse cuenta o no queriendo darse cuenta de que es un acto político: Están dando importancia capital a eventos religiosos. Y luego, dicen, hay contrariedad por la Ley Wert… pero no es cierto. Nadie (o casi nadie) dice NO. Yo no quiero formar parte de ese evento porque es religioso. Así, sin más. Por el hecho de que mi no-religión no me lo aconseja. Por el hecho de que deseo un modelo de sociedad laica y desenganchada de la simpleza de la religión y, más aún, porque me cabrea sobremanera que sea realizado en un recinto financiado con dinero público.

Podría compararlo con qué haría la gente en una manifestación mayoritaria, en la que vuelva a pesar la presión social, como ocurre en la fotografía que acompaña esta reflexión. Podría compararla con una participación masiva en un ritual de festejo irrespetuoso como el de una victoria fulbolística, por poner un ejemplo.

En esta ocasión se trataba de enfrentar el hecho de que la procesión había ido a donde yo estaba y no al revés, y pensé en si era una incoherencia mantenerme allí. Sentí que no debía dejar el sitio, que no debía irme, que aquello era, de alguna manera, ceder terreno en una guerra…

Pero no pude evitar sentir también cierta tristeza sabiendo que estoy absolutamente en desventaja.

Los estúpidos dicen estupideces, pero no todo aquel que dice estupideces es estúpido.

Hablar con alguien que dice una estupidez no es considerar a esa persona estúpida. En caso de considerar que eso es cierto, sería preferible dejar de hablar con esa persona por considerar que no tiene arreglo.

Implicaciones éticas, políticas o morales surgirían del hecho de considerar que la humanidad está dividida en estúpidos y no estúpidos, una visión elitista que no me agrada desde un punto de vista estético.

Distintas capacidades no hacen una diferencia en la humanidad (calidad de humano) de las personas. Puede haber quien tenga cierta forma de inteligencia afectiva o resistencia ante el dolor emocional o empatía… habilidades que suelen estar menospreciadas ante la capacidad de análisis o la ambición, por ejemplo.

El sábado mantuve una acalorada conversación con una amiga de Carmen a quien no considero estúpida pero que sí dijo un buen número de estupideces argumentando su visión simplista de la creación, basada de manera infantiloide en la de la Biblia, sin que ella la hubiese leído, por cierto, afirmando que la experimentación científica es algo tan «opinable» o cuestión de creencia como lo es el creer en verdades de un libro supuestamente escrito o dictado por dios.

Sus razonamientos (por llamarlos de algún modo) eran básicamente los mismos que los de los creacionistas Bush-eros, con una sofisticada falta de interés por la cultura, por la confianza en la experimentación científica, sin el más mínimo respeto por los trabajadores que dedican su tiempo y sus vidas (y así ha sido a lo largo de toda la historia de la humanidad) a ampliar los conocimientos que tenemos de nuestro pasado, de nuestro presente, de nuestro contexto natural y social… científicos o investigadores de historia, ciencias varias, sociología, etc… Pero a ella le basta con una exención de su propio conocimiento para decir que es dudoso lo que han descubierto. Y asume que no sabe, pero que a ella le resulta difícil de creer…

Y aquí confunde un creer con otro creer: No está hablando de duda metodológica, lo que habría sido, al menos, respetable, aunque también, y de manera diferente, nos llevaría al epojé o un silencio escéptico; no, no hablaba de ese método de pensamiento, hablaba de no creer lo que no ha visto porque ella no lo ha visto… y lo compara con lo que no he visto y que otros (visionarios) sí que han visto. Pero aquí es donde el plano de creencia es diferente: lo que ella no ha visto (o no conoce) no le es inaccesible (a menos que supongamos cierta incapacidad mental), sino que no ha hecho el esfuerzo para acercarse a ver o conocer las pruebas objetivas que cualquier otra persona puede ver. Lo que yo no he visto (una virgen apareciéndose en lo alto de un cerro, por ejemplo) no es verificable objetivamente, no puedo guardar registros de los mismos y, desde luego, eso no merma su posible verdad, pero es una verdad (caso de serla) no científica, es decir, de un plano diferente de conocimiento.

En ciertos momentos, le pregunté, para descartar si era un escepticismo auténtico, sobre si creía en que ella estaba delante de mí, si otro podía verla y comprobar, mediante la vista, una presencia objetiva. No era esa la duda que albergaba, en realidad, solo dudaba de algo que no comprendía por el hecho de que no lo comprendía. Vamos, por poner un ejemplo, como si yo digo que los chinos, entre sí, no es que hablen un idioma propio, sino que están jugando a hacer soniditos sin la más mínima intención de trasmitir mensajes, única y exclusivamente por la razón de que yo no sé chino. Así que bien podría ser la segunda una explicación «razonable», eso sí, para mí y solo para mí.

A pesar de que esto segundo pueda parecer estúpido, que yo lo pensase no me convertiría en estúpido, pero negarme a aceptar que pueda ser de otra manera, quizá sí me convierta en estúpido irreconciliable. Al menos en el sentido de fabricante de dogmas basados única y exclusivamente en mi aceptación de que sobre lo que yo desconozco es mejor afirmar cualquier cosa que creer la que puedan darme como explicación aquellos que dicen tener pruebas refutables.

¡¡¡¡Aggg!!!! Fue amarga la noche, con momentos en los que, enajenado, le dije que no podía respetar sus estupideces, sus argumentos carentes de toda lógica y que bien podía metérselos por el culo. Mi vehemencia me traiciona, pero es que me sentía insultado, tratado como un charlatán cuyas afirmaciones eran poco más que opiniones propias basadas en ignorancia. No quise ser arrogante, o pedante, pero sabía de lo que estaba hablando, sabía lo suficiente sobre la teoría del origen de las especies y el cómo se ha llegado a ella como para poder ceder, callado, a sus desprestigios, a sus, aparentemente inocuas, descreencias… ¡Me estaba llamando mentiroso! Y no me iba a estar callado.

Tampoco me iba a aguantar que me dijese frases impersonales o imperativas como «en algo HAY QUE creer». Me parece bien que ella crea en aquellas cosas que le hagan falta para ser más feliz, para suponer que se va a encontrar con su madre muerta o lo que sea, cuando muera, puedo tolerarlo o respetarlo, pero no puedo respetar su simpleza al no darse cuenta que está imponiendo una actitud, está afirmando algo que no es cierto y que me atañe: No HAY QUE creer. Se cree o no se cree, pero no es necesario y, mucho menos, obligatorio.

Y eso sin volver al tema de que su «creer» era un creer de fe, pero no de conocimiento comprobable, sin embargo, seguía menospreciando el conocimiento científico, por la ridícula razón de que no haya sido capaz aún de dar con una cura contra el cáncer (de lo que murió su madre), sin tener en cuenta ni aceptar como válido, ni como réplica que sí se hubiese sido capaz de dar con curas para enfermedades incontables desde hace millones de años. ¿Merecía la pena que le contase que en los últimos siglos la población del planeta se había multiplicado por mucho? ¿Que la esperanza de vida y la longevidad eran las más largas de la historia de la humanidad?

Todo giraba en torno a lo que sus limitados conocimientos veían. Todo lo demás, podía, según ella, ser explicado de cualquier manera (bíblica, claro), porque no aceptaba la existencia posible de otras deidades que no fuesen únicas (y masculinas, para más inri). Podría haberse, al menos, dejado atraer por la creencia en cualquier cosa, como la New Age parece promover, pero no, ella seguía anclada en una visión preconciliar de una mezcla de catolicismo y autoinvención, oportunista, infantil, estúpida (la mezcla).

Pero limitar lo que es el mundo a lo que ves de él, a lo que eres capaz de explicar, sin ni siquiera desear ver más, no es ceguera, es voluntad de ceguera… y esta actitud me parece, simple y llanamente, repugnante.

Me acordaba tanto de las conversaciones verdaderamente rigurosas que había tenido justo una semana antes hablando con mi querido amigo Xabi que no podía dejar de pensar en ¿por qué algunas personas no comprenden que si perdemos la lógica en la argumentación no queda nada que justifique que sigamos hablando?

La metodología del pensamiento es la base del mismo, sin él, se convierte en un conjunto más o menos arbitrario de suposiciones todas las cuales pueden ser tanto ciertas como falsas y carece por completo de sentido el intentar hablar sobre ellas, es decir, sobre cualquier cosa o materia.

También recordaba a otra amiga, también de Carmen, que sostenía que no todas las personas tienen capacidad para comprender ciertos temas. Ella, profesora de filosofía, discrepa conmigo en una visión sobre la naturaleza humana pues sostiene que sí es razonable establecer esa distinción entre «estúpidos» y «no estúpidos», por decirlo de manera exagerada, pero no puedo o no deseo creer en ello. Aunque días como el sábado me hacen replantearme mis propias creencias.

Terra Nullius

En la Antártida, aunque sea un poco fría, es la única parte del planeta donde queda algo de este estúpido concepto de Terra Nullius.

antártida

De wikipedia:

Terra nullius es una expresión latina que significa «tierra de nadie», y que se utiliza para designar la tierra que no es propiedad de ninguna persona (al igual que res nullius hace referencia a una cosa que no es propiedad de nadie).

El concepto de terra nullius se utilizó durante la época de la colonización para reclamar los territorios de las colonias como tierras no ocupadas y que, por tanto, el Estado descubridor o conquistador podía ocupar legalmente.

Francisco I

El otro día comenté en una red social
que Francisco I
es mi padre.

Con ello estaba jugando a afirmar
que el único que reconozco
con la autoridad
suficiente
para tener el título real
es a Francisco
Domínguez Núñez
es decir
mi padre.

Gran cantidad de gente
se apresuró a suponer
que me refería al recientemente
elegido por dios
como papa de la iglesia católica apostólica
y romana
pero nada más lejos de la realidad.

Nadie supuso que cuando pienso en
Francisco I
el primero en el que pienso
es el franco rey francés
que le plantó cara a un tal Carlos
quinto o primero
según se mire.

Pero
si tuviese que elegir a uno
como el número uno
de los franciscos
que conozco
y re
conozco
como rey del reino en el que habito
sería
mi padre.

Hay que ver qué cantidad de comentarios
suscitó una entrada semejante
y los pocos que genera
una entrada larga y de descripción detallada
de algún problema sin solución
o el enunciado
del principio de máxima multiplicidad de Hund
por poner un ejemplo.

¿Por qué?

Qué maravillosa generosidad: PRVSSOLOGIA KLOSSIANA: LINGVA BORVSSICA VETUS, II

Todo el mundo puede usar esto para la investigación lingüística y en sitios web propios o en obras impresas. Tan solo, los Drs. L. Palmaitis y P.Holzwescher esperan que se mencione su nombre, y desean que cualquier persona pueda utilizar esta presentación gratuitamente en el futuro.

Yo estoy encontrando en ella un rico texto en Antiguo Prusiano y me ha encantado mencionarles en el trabajo que estoy realizando.

Sin su trabajo no sería posible el mío, pero sin el de los anteriores como la Chronicon_terrae_Prussiae de Peter von Dusburg, tampoco habría sido posible el suyo.

OLD PRUSSIAN ELBING VOCABULARY

Aunque no existe en la actualidad…

Comenzar así a contar la historia de un país, de un territorio es cautivador.

El comienzo es de la historia de Prusia en la wikipedia, de la que dejo un pedacito para quien tenga pereza de navegar…

Aunque no existe en la actualidad, Prusia ocupa un lugar destacado en la historia europea ya que ha jugado un rol primordial en los acontecimientos mas importantes del continente, específicamente el periodo comprendido entre el siglo XVIII y la Primera Guerra Mundial. En el curso de su historia, Prusia se ha establecido como diversos estados:

  • La Prusia Teuronica (1224–1525): la tierra de los prusios bálticos conquistada por los Teutones durante las Cruzadas Balticas y gradualmente cristianizada y germanizada por parte de la Orden de Livonios.
  • Prusia Real: El territorio establecido tras la victoria Polaca sobre la Orden Teutónica en la Guerra de los Trece Años y que perteneció a la República de las Dos Naciones de 1466 a 1772.
  • El Ducado de Prusia (1525–1701): Un territorio formado por la secularización del Estado monástico de los Caballeros Teutones, primero bajo soberanía de Polonia y posteriormente gobernado por margraves de los Hohenzollern y electores de Brandeburgo;
  • Brandeburgo-Prusia (1618–1701): Una unión entre los gobiernos Hohenzollern del Ducado de Prusia y del Margraviato de Brandeburgo;
  • El Reino de Prusia (1701–1918): Formado por la elevación de la unión de Brandeburgo-Prusia a reino, y que pasó a convertirse en el principal estado del Imperio Alemán (1871–1918);
  • La Provincia de Prusia (1829–1878): Una provincia del Reino de Prusia, creada a partir de la fusión de las provincias de Prusia Oriental y Prusia Occidental;
  • El Estado Libre de Prusia (1918–1947): Estado de la República de Weimar formado tras la pérdida de poder de la monarquía Hohenzollern al final de la Primera Guerra Mundial. Prusia como estado quedó abolido de facto por el Gobierno Nacionalsocialista en 1934 y de iure por el Consejo Aliado de Control, en 1947, al finalizar la Segunda Guerra Mundial.
Esto no es una broma