¿Dejas de ser un hombre?

maltrato a mujeres

Si dejas de ser un hombre, pierdes los derechos que, como tal, posees, así que por qué no justificar actos contra ese ser in-humano que no se defenderían para humanos. Por ejemplo (y no digo que no haya que pensárselo) podría proponerse la castración o, incluso, la eliminación de ese ser in-mundo, ese ser ya desposeído por la premisa de una humanidad que le garantice unos derechos. Es más, cualquier juicio a ese ser no-humano carece de sentido, por ejemplo, a nadie le parecería una noticia seria llevar a juicio a un chimpancé por agresión.

No quiere decir que no esté de acuerdo con lo que se quiere decir «de fondo«, pero quizá me da por pensar que hay que asumir que el ser humano realiza actos buenos, malos, regulares… y se trata de juzgar esos actos, ponerse de acuerdo sobre esas normativas y aplicarlas.

Desde mi punto de vista, mucho más matizado, ese que maltrata a una mujer (o a cualquiera, ya de paso) es un ser humano condenable por realizar un acto detestable que pone en peligro la sociedad y los valores sobre los que se sustenta (por consenso).

No quiero dejar de pensar que es humano, como yo, porque entonces me puede dar por pensar que yo nunca lo haría, puesto que yo, como inherente a humanos, nunca agredo. Eso no es así: soy susceptible de ser agresivo, violento y otras cosas que recordar no quiero.

Y lo que sí quiero es que si alguna vez cometo uno de estos actos que detesto (odio la violencia física en todas y cada una de sus formas) sea considerado un humano que erró, que cometió un delito, que… hizo algo humano pero humanamente (por consenso) condenable.

Del maltrato psicológico no entro a detallar, pero es igualmente condenable… pero mucho, mucho más humano. Por aquello de la psiquis, vaya.

Me han leído el texto ¿y qué?

Me encuentro un artículo en tecnología sobre el hecho de que Whatsapp introduce el icono que indica que un mensaje ha sido «leído».

Dicen en la web de la app lo siguiente:

doble incono wasap

Los ticks o palomitas son importantes porque indican el estado de envío y recepción de un mensaje. Significan lo siguiente:

  • 1 tick negro: el mensaje fue entregado al servidor.
  • 2 tick negro: el mensaje fue entregado al dispositivo del destinatario.
  • 2 tick azules: el destinatario leyó tu mensaje.

En un chat de grupo, verás los dos ticks cuando todos los participantes reciben tu mensaje. Verás los dos ticks azules cuando todos los participantes hayan leído tu mensaje.

Como otra pregunta: ¿de qué color será el tick o doble tick que indique que el mensaje ha sido entendido?

¿Hasta cuando vamos a seguir preocupándonos por tonterías? ¿Es intencionada esta oleada de informaciones terroríficas? ¿cuál podría ser esa intención: generar miedo?

¿Es un asunto de privacidad? No tanto.

Es más bien un asunto de sentido común y respeto: hemos de aprender a saber que otros que leen nuestros mensajes pueden estar en ese momento en una ocupación o en un estado en el que no les apetezca o no puedan responder o no quieran… ¿qué más da? Es su libertad la que tengo que aprender a respetar. Y asumir que respetan la mía. Obligar, más bien, incluso, a que la respeten.

¿Cómo hacerme respetar?

Además de tomar el barato y simple cursillo para aprender a decir no

Una de las opciones para es teniendo un par de tarjetas de teléfono si se usa una de manera extensiva para las relaciones laborales que pueden tener un determinado tipo de exigencias y otra destinada a uso personal, para amigos y familiares que tienen que aprender a asumir que cuando no me da la gana estar conectado, aunque tenga un teléfono encendido, estoy en mi más absoluto derecho de hacerlo. Y en el ámbito laboral también deben hacerlo… o yo debo no dejar que lo hagan: mi tiempo de trabajo se paga.

Y cuando no quiero estar disponible… apago el teléfono que quiera y punto. Así era la vida hace unos poquitos años… y no pasaba nada. De verdad.

En otro articulito de tecnología nos hablan de los alarmantes casos el los que se ha podido vulnerar la privacidad de la información almacenada en la nube… y dan alternativas ajenas… cuando lo único que garantizaría completamente la privacidad es el no compartirlas. Pero si se ha de hacer, la mejor opción con enorme diferencia es el cifrado de clave pública desde punta a punta con herramientas propias (obviamente, más seguras aún si son de código abierto).

Cifra y encripta tus archivos en local, almacénalos (si quieres también un servidor que encripte, aunque esta redundancia no vaya a ser muy útil) y envía por canales seguros… usa redes tipo TOR… pero nada, absolutamente nada, te puede garantizar que al otro lado, en el lugar en el que vayan a ser compartidos, la información, al desvelarse, no esté siendo observada de manera indeseada.

Esto me recuerda a las pretenciosas web que intentan evitar que copie material pero que me dejan verlo, deshabilitando las funciones del botón derecho del ratón con alguna que otra tontería como una funcioncita javascript que se carga antes que la página.

¡Qué sandez! Si me dejan verla, puedo copiarla. Incluso si me pongo a ello, a mano alzada. JAJAJAJA… pero es que es mucho más sencillo: puedo, entre otras cosas, descargarme la página y reeditarla, quitar esas tonterías de función y resuelto. Pero es incluso más fácil usando (otra vez) un navegador que no deja que le hagan este tipo de prevenciones/manipulaciones como TOR.

Espacios reservados solo para mujeres

patiomartinherosplano

El otro día escribí sobre este tema y ya no quiero darle muchas más vueltas, pero pensé en realizar una instalación en un amable lugar llamado El Patio de Martín de los Heros que dejase claro que estas propuestas tienen algo de ghetto, porque a mí no me parecen espacios «especiales» sino «espaciales» y reservados me recuerda a las reservas indias, más que a otra cosa.

Es decir, estas cajitas rojas tienen todo el aspecto de ser cárceles.

Si se va privilegiando la presencia en ellas de la mujer, ¿no quedará el resto algo más excesivamente poblado (y empoderado) de hombres? (Cuestiones básicas de ubicuidad).

Hummm… sigue pareciéndome una pésima estrategia.

La privacidad y los derechos humanos

De nuevo, otro texto formidable de Ignacio Agulló, para ISOC-ES.

El noticiero The Intercept publica el informe A/69/397, enviado por el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas a todos los miembros. Este informe, relacionado con el punto 68a del orden del día de la próxima asamblea anual, está elaborado por el Informador Especial (Special Rapporteur) de la protección y promoción de los derechos humanos durante la lucha contra el terrorismo, Ben Emmerson.

Ya el título da penita. Es una cruda realidad que derechos humanos como la privacidad están siendo pisoteados, y este abuso se justifica debido a la lucha contra el terrorismo. Es duro para mí tener que escribir este párrafo que estáis leyendo. Es una mierda, la verdad.

Cuando se aprueba la Declaración Universal de los Derechos Humanos, se hace incondicionalmente. Son los Derechos Humanos, no los Derechos Humanos Excepto Cuando Se Lucha Contra El Terrorismo. ¿Me explico? Sin embargo, desde el 11-9-2001 entramos en una fase de la historia en la que muchos estados violan sistemáticamente los derechos humanos justificándose en la lucha contra el terrorismo. En la práctica, algunos Derechos Humanos se han convertido en una cosa del pasado que ya no existe en el presente.

El informe de Ben Emmerson analiza esta violación de la Declaración de los Derechos Humanos en general, y del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos en particular. Se menciona expresamente a Estados Unidos como uno de los principales violadores, en especial la estadounidense Agencia Nacional de Seguridad (National Security Agency, NSA) y a sus programas PRISM y Quantum.

«The hard truth is that the use of mass surveillance technology effectively does away with the right to privacy of communications on the Internet altogether.” La cruda verdad es que el uso de tecnología de vigilancia masiva en efecto suprime de raíz el derecho a la privacidad de las comunicaciones en la Interred (Internet).

UN Report Finds Mass Surveillance Violates International Treaties and Privacy Rights – The Intercept
https://firstlook.org/theintercept/2014/10/15/un-investigator-report-condemns-mass-surveillance/

¿Por qué hoy no es posible la revolución?

Aunque el artículo lo encabeza un interrogante, la verdad es que se trata más de una respuesta, acertada y acerada. Dura como la realidad. Tremenda y contundente. De corte pesimista, para quien denomina así al realismo más apabullante.

Acabo de leer el artículo de Byung-Chul Han en el periódico «El País» titulado así: ¿Por qué hoy no es posible la revolución? y me he quedado casi diría que deprimido, pero quizá no por lo errado del texto, sino por lo acertado.

Es un filósofo que, como tantos otros contemporáneos, se están dando cuenta de que un nuevo tiempo estamos viviendo y algunos se atreven a ver más allá de lo evidente, y más allá de las visiones (más o menos acertadas en su momento) de otros filósofos o pensadores que han demostrado haberse quedado, al menos en parte, obsoletas.

En el fondo, el artículo no dice muchas cosas que la mayoría, la doxa, no tenga más o menos en su mente, pero las dice muy bien, muy limpiamente, muy directas y desprovistas de efectismo, incluso aunque por ello resulte más molesto, menos condescendiente. No se casa con nadie, ataca por igual neoliberalismo como comunismo decimonónico. Y nos responsabiliza sin culpabilizar, como viene siendo habitual.

Aunque habría que ver si «El comunismo como mercancía» no es algo que ya tiene sus años, desde aquellas atractivas caritas de el Ché en camisetas para consumo de los de este lado del muro, sin ir más lejos.

No obstante, me interesa más el pensamiento en torno a la forma que tiene actualmente el poder de mantenerse, basado en la seducción, como afirma, en la cautivación, haciéndonos cautivos… de nosotros mismos.

Y así somos prisioneros y guardianes, así somos parte del sistema, como esos judíos que ayudaron en los campos de concentración/exterminio, pero con la salvedad de que los exterminados ya no existen, o lo somos todos.

¿Hay salida?

No lo deja claro. Pero sí queda claro que las salidas propuestas por visiones algo anquilosadas ya no sirven. Hablar de proletarios, de lucha de clases… no funcionará. Pero un cambio es necesario y seguramente posible. Aunque a mí no se me ocurra cómo.

Intentar cambios en direcciones inadecuadas o ineficaces tan solo consolida el sistema de poder basado en el atractivo de la acción, aunque, carente de reflexión y sin horizonte, conduce a la nadería, al desperdicio energético en el mejor de los casos, a la apatía y a la frustración… haciéndonos caer, más profundamente, en los brazos del sistema del que, en el fondo, nunca habremos salido.

Ups… creo que voy a estar varios días (solo varios días) sin poder dejar de pensar en esto.

Pero… ¿y luego?

Quizá la clave pase por aquí, por el afrontar una acción que pueda perpetuarse, que pueda mantenerse en el tiempo, que pueda mostrar la coherencia subyacente, que no se desvanezca con el paso de unos años o un cambio de circunstancia. Aunque sean acciones pequeñas, cotidianas, de actitud y conciencia.



Un «amigo» homófobo

El otro día le planté a Carmen en su muro de FaceBook esta noticia que me había parecido significativa para el mundo del tango, con un comentario que hablaba de energúmenos que habían asesinado a una mujer por ser lesbiana. Al menos, eso era lo que mencionaba la noticia de Amnistía Internacional donde la leí.

Ten cuidado con las fotos que utilizas, que hay mucho energúmeno en el mundo: Ekaterina era abiertamente lesbiana y daba (abiertamente) clases de tango a parejas del mismo sexo. — me siento cabreado.

Un momento para llorar y un momento para bailar

Ekaterina Khomenko, de 29 años, estaba degollada cuando un trabajador del servicio de limpieza la encontró en un coche con el motor aún en marcha en San Petersburgo a principios de ese mes. […] las autoridades no descartan la posibilidad de que fuera agredida por su orientación sexual: Ekaterina era abiertamente lesbiana y daba clases de tango a parejas del mismo sexo.

ES.AMNESTY.ORG|DE AMNISTÍA INTERNACIONAL SECCIÓN ESPAÑOLA

Acabó generando un amargo debate, dentro de los mínimos del respeto, muy mínimos… con un amigo de mi pareja, de procedencia rusa y argentina. He querido publicar aquí la conversación, sin su permiso, aunque está en una web pública que es FaceBook… así que no lo considero necesario, puesto que no he modificado ni una palabra de las suyas ni de las mías. Salvo alguna corrección ortográfica menor.


Este amigo, de quien prefiero mantener únicamente sus iniciales, dice:

SSR: Estoy completamente en desacuerdo con la noticia, su manipulación y la campaña de desprestigio contra Rusia de la prensa occidental. Se pretende disfrazar la heterofobia occidental (más bien sodomiafilia), con la supuesta homofobia oficial del gobierno ruso. Moscú está poblado de discotecas para lesbianas y maricones. El otro día, y yo casi no daba crédito, en plena escalera del metro de Moscú, vi a una tierna pareja de gordos barbados dándose un beso tan apasionado que entre heteros y en Madrid, también hubiese hecho mella. Que el pueblo ruso, soberano haya votado en un 95% (sus representantes) a favor de una ley que prohibe la publicidad homosexual en los colegios y sus aledaños es un tema a respetar. Nosotros asumimos el fenómeno homosexual, pero dista mucho de hacer virtud de ello. Tolerancia: si, enaltecimiento: no. Si para Europa, Conchita Wurst es su arquetipo de evolución, para los rusos es degeneración y un signo más de la inminente caída del imperio Yanqui-Europeo. Pero, por favor, no dar crédito a estas mentiras con delirio persecutorio.

Y yo contesto:

Giusseppe Domínguez: No tengo nada en contra de los «rusos», sí en contra de la homofobia. Igual que de otras formas de intolerancia para con los otros. Ni tolerancia ni enaltecimiento: condena de quienes condenan.

SSR: ¿Qué pasa si la no tolerancia es votada democráticamente? O por el contrario: si somos adultos, ambos consentimos, y nos amamos profundamente…, yo quiero legalizar la zoofilia y casarme con mi mascota, ¿por qué no? mi perra lo desea!!

Ahhh… lo que no me queda claro es si vamos a pedir que nos concedan el derecho de adoptar… básicamente porque no sabemos si serán cachorros o bebes ¿?

Giusseppe Domínguez: Tu perra no tiene voluntad humana para oponerse a tus deseos. No estamos hablando de violación, sino de relaciones entre adultos consentidas.

Y no, no cualquier cosa que acepte la «democracia» me parecerá correcta. Pero este es un tema que excede la conversación en el muro de una amiga.

De todos modos, no entiendo por qué te das por aludido. Si tienes algún problema de intolerancia a las relaciones homosexuales, pues no las practiques… no hay problema por mi parte. Si te diste por aludido por la generalización a los «rusos», sí, no me parece pertinente, pero ni siquiera en el artículo se pretende decir que todos los rusos sean unos asesinos, sino que ha habido un asesinato en una ciudad rusa por motivos de odio homófobo. Es esto lo que me cabrea.

Por cierto, ambos sabemos que Hitler fue votado democráticamente, pero eso espero que no te parezca suficiente para justificar el holocausto.

No deseo seguir esta conversación en el muro de una amiga… insisto. Si quieres seguir, email a jmdomin@giusseppe.net

SSR: Mi perra tiene voluntad perruna, y si no le gustara, mordería…

Y me doy por aludido por los rusos y por la mediocre corrección política de los lugares comunes admitidos y coreados por toda clase de acólitos lobotomizados.

Giusseppe Domínguez: ok.


No he querido seguir hablando porque me parece absurdo, quizá la pregunta que le debería haber hecho es si él habría hecho lo mismo que hicieron a Ekaterina Khomenko por el motivo que parece que se baraja en la investigación. Es más, si simplemente considera que esa persona no tiene exactamente los mismos derechos que él de amar a quien desea (que a su vez, humano y adulto, pueda corresponderle).

Si la respuesta a esta pregunta hubiera sido «No considero que deba tener los mismos derechos», no habría habido necesidad de continuar la conversación, pero en el fondo, el tono de SSR me hace pensar que él piensa así, y por ello acabé con un sencillo OK.

En ningún momento mencioné a los rusos, ni me preocupó la nacionalidad de ninguno de los intervinientes ni en el suceso ni en el debate. Supongo que él estará sensible (de procedencia rusa) por el tratamiento tendencioso que se está dando al conflicto con Ucrania… pero ni quise entrar ahí. Ese no era el tema en absoluto.

Ahora me barajo entre eliminarlo de mis amigos de FaceBook como hace tiempo hice borrándolo de mis amigos tridimensionales, en carne y hueso, por comportamientos que me parecieron condenables, como agresión (para mí nunca está justificada la agresión física) a su pareja.

Pero quiero seguir siendo «tolerante»… aunque… no sé, no sé…

La dimisión de Gallardón

GallardónEs una noticia impactante, sí, que este señor, que ha ocupado tantos y variados cargos públicos, incluso algunos con pretensión de ser pseudoprogresista de derechas (si es que eso se sostiene), dimite hoy por discrepancias con el presidente Mariano Rajoy. Dicen que relacionado con la oposición del partido a seguir adelante con su retrógrada propuesta de ley del aborto.

No he podido evitar leer el periódico al respecto, saltándome una de mis costumbres, encontrándome la nueva en los salpicaderos de las redes sociales.

Ahora viene la descalificación generalizada y banal, el alarido de alegría… pero es tan simplón que me decepciona hasta mencionarlo.

Sin embargo, leyendo unas cuantas frases del artículo me he encontrado con las siguientes:

Gallardón es el primer ministro que abandona por voluntad propia el gabinete de Mariano Rajoy. Su paso por el Ministerio de Justicia apenas ha dejado leyes importantes. Todas las que anunció para «revolucionar y modernizar» la administración de Justicia, como la reforma del Código Penal; la Ley del Poder Judicial o la Ley de Enjuiciamiento Criminal, están empantanadas en el Congreso o no han logrado salir de su departamento pese a que fueron anunciadas hace mucho tiempo.

Y me ha dado por ponerme paranoico y conspiratorio atribuyéndoles una ingente habilidad estratégica:

¿Y si Gallardón (con todas sus propuestas) no ha sido más que una cortina de humo para que se hablase de él, para que el tema pareciese girar en torno a esto, en lugar de hablarse de las leyes que sí que han salido adelante, alrededor de las reformas laborales, fiscales, etc?

Hasta tendría sentido que no hubiesen salido adelante tantas propuestas que chocaban con tanta oposición, interna, e incluso externa, en el marco de la UE, donde podrían haber sido rechazadas o, cuando menos, condenadas, por no hablar de órganos de justicia internacionales varios (ONU/Haya…).

Ya sé que es solo una aventurada teoría, pero creo que respetaría al PP de haber sido capaz de generar una estrategia de distracción tan elaborada, tan bien sostenida, como para sacrificar (dudo mucho que haya habido un gran sacrificio) a uno de sus mayores alfiles en algunos momentos de su pasado.

Otra vez particionando una baratija

gparted-evolnx

Parece mentira (en su día dije inverosímil) que aún siga vivo este viejuno ordenador portátil, pero así es, demostrando que cierta austeridad es posible.

Después de la extinción del soporte de Windows XP, ese ordenador debía ser formateado para olvidarnos de instalar ningún sistema de los de Richmond.

Estoy haciendo pruebas de instalación de diversas distribuciones linux, teniendo en cuenta que sean usables por usuarios sin conocimientos informáticos, es decir, que tengan un sencillo gestor de ventanas, aplicaciones de ofimática, clientes web, etc.

Actualmente, tiene repartido el disco en una partición primaria (/dev/sda1) /boot, con 2 Gb de espacio, que inicialmente estaba pensada para albergar los distintos archivos de imágenes de arranque de las distintas particiones, pero esto da bastantes problemas y es innecesario, así que tan solo contiene el arranque del sistema operativo principal.

El resto del disco, hasta los 80 Gb, está formado por una partición extendida (/dev/sda2) en la que reservé una minúscula partición de swap (/dev/sda5) al final del mismo, para ser usada por todas las distribuciones instaladas.

La partición /dev/sda6, de 7,5 Gb contiene el directorio / de un Lubuntu 14.04, que ha resultado ser capaz de funcionar perfectamente bajo estas minúsculas características:

Compaq Evo Notebook N610c
Mobile Intel® Pentium® 4-M Processors at 1.6-GHz
ATI Mobility Radeon 7500 Graphics Controller with 32 MB of DDR video RAM.
14.1-inch SXGA+ display
512 MB DDR RAM (266 MHz)
80-GB HD.

Fue tremendamente sencillo de instalar mediante una versión LiveCD en un pendrive. Me ayudó a realizar el particionado inicial y depositó el GRUB2 en /dev/sda. Aún no tengo claro si merece la pena instalar el Grub en el MBR.

La partición /dev/sda7, de 7,5 Gb contiene el directorio / de un Debian 7, que me costó mucho más instalar. Tras varios intentos fallidos, lo logré desde un disco ISO de CD. El propósito de este Debian era probar un sistema que casi nunca he instalado y que parece que se acomoda bien a cualquier plataforma, haciendo que su instalación, personalizada, sea ajustada por esencia. Esto mismo es lo que la convierte en más trabajosa, pero a la larga puede merecer la pena. Al fin y al cabo, Lubuntu está basado en Debian, pero con más cositas.

Al Debian en cuestión le instalé para probarla la interfaz gráfica o gestor Enlightenment, lo que tampoco resultó nada sencillo. Acabé teniendo que recurrir a un repositorio sin firmar y que muy posiblemente no actualice las versiones como procede.

En cualquier caso, venía con otro par de entornos de escritorio, del que, cada vez más, me entusiasma la sencillez y eficacia de LXDE.

Otro problema con el que me suelo encontrar cuando trasteo con distribuciones de linux es que todas acostumbran a instalar (reinstalar) el gestor de arranque, cada vez más el GRUB2, y si no se puede evitar, pierdes la configuración que deseas tener con uno de ellos como sistema operativo principal (en el que, siempre, instalo un Grub-customizer). Trasteando, me encontré con una solución (es lo que tiene cuando se encuentran muchos problemas) para restaurar grub desde la partición preferida. Aún no la he usado, porque desde hace tiempo busco la manera de no instalar el Grub al probar una nueva distribución y luego agregar la entrada correspondiente vía el grub-customizer.

Por si fuera poco, algunas distribuciones no se llevan muy bien con el detector automático de esta herramienta, como me pasa en la partición /dev/sda8, donde tengo instalado un bonito y simple Tiny Core Linux, con menos de 2 Gb de disco dedicados y pensado, casi, para ejecutarse directamente desde PenDrive.

En este caso, tuve que añadir a mano en el archivo /etc/grub.d/40_custom la ubicación de los archivos que necesita el sistema en cuestión para arrancar.

Tengo otra partición más que sobredimensionada (4 Gb), para instalar un Puppy Linux en /dev/sda9/.

Pero mientras escribo estas líneas estoy descargando un interesante proyecto de distribución: Emmabuntüs que se relaciona con esta misma idea de austeridad positiva, la que ayuda a integrar y no desintegrar, como vienen haciendo desde la Fundación Emmaüs desde hace décadas. Como tantas otras ONGs, me da miedo encontrarme con que esta también es de inspiración cristiana (su fundador lo era) y acaba por ser otra más de las incontables neo-proselitistas sectas más o menos blandas camufladas de bienintencionadas organizaciones laicas.

De momento, parece que la distribución es bien querida, basada en Xubuntu 14.04.1 y el primero de septiembre 2014 Emmabuntüs 3 celebró el Festival de la Humanidad. Aunque solo sea por eso, es posible que merezca la pena echarle un vistazo.

Aún me quedan más de 50 Gb de espacio sin asignar. Si el PC fuese a ser terminado así, sería un espacio precioso para crear una partición /home para que las distintas distribuciones la compartiesen de modo que pudiesen escribir los datos de usuario en ella y no se perdiesen nunca. Pero hacer esto requiere un poco de paciencia y enlaces simbólicos para no mezclar datos de configuración de las distintas aplicaciones o gestores de escritorio.

Esto lo explicaré en otro momento. Así lo tengo en mi PC actual, mucho más solemnemente particionado (Windows 7, Linux Mint-Cinnamon 16, Kubuntu 14.04 y home en mi SSD y datos de archivos en un disco externo)

gparted-pctacens

Ante el maltrato

maltrato-vuela
A la primera señal de maltrato, vuela.

Mi primera pregunta es ¿qué se considera una primera señal de maltrato?

Para mí, que una persona sea machista, por ejemplo, es claramente una señal de maltrato.

Para mí, que una persona sea celosa, es claramente una señal de maltrato.

Que una persona sea prepotente, es claramente una señal de maltrato.

Pero sigue desplazando la pregunta:

¿cuándo una persona es machista?
¿cuándo una persona es celosa?
¿cuándo una persona es prepotente, racista, violento, de ideas violentas o que las justifica…?

Machista (o sexista, sin venir a cuento) es alguien desde el momento que considera que hay roles que deben ir, necesariamente, asignados a géneros. Eso es lo mínimo. Si además, por ello, existe una gradación (mejores vs peores), ya ni hablamos. No me es necesario que me diga que la mujer no vale una mierda, basta con que me diga que hay bebidas «de hombres», como escuché, medio en serio medio en broma, el otro día en una cena. Está claro que quien dice esto no conoce a mis amigas.

Machista es el que considera que la tradición o la naturaleza debe dictar nuestra moral. Que el hombre, frente a la mujer haya sido considerado el sexo fuerte durante periodos históricos en los que la fuerza bruta era necesaria para adquirir el sustento, no significa que ahora, en el siglo XXI (ya estamos en el 21, aclaro para quienes aún no lo saben), sea una razón justificativa de discriminaciones o segregaciones.

Celosa es cuando lo reconoce. Sí, hay gente capaz de, sin pudor, reconocerse celosa. Y yo me pregunto: ¿cómo alguien no es capaz de ver ahí una forma indigna e insana de amar? Hablo, no tanto de inseguridades ante la pérdida de la exclusividad sexual, que es otra cuestión que siempre me ha resultado inquietante, sino de la idea de posesión que va asociada a los celos: ¡no me gusta que miren a mi mujer!

Este mi es tan tremendo como incontestable. Quien lo pronuncia ya está, desde mi punto de vista, maltratando, y no es una señal, es mucho más que eso. No puede haber celos sin maltrato. O, dicho más suavemente, son, claramente, la antesala del maltrato.

No hablo de un mi que establece una connotación sobre la relación: mujer con la cual tengo una de mis más importantes relaciones. Sino de aquel mi que dice que es mía y solo mía, que quien desee tener algún trato mínimamente afectivo con ella, táctil, o similar, ha de pedirme permiso, como alguna vez alguno ha osado hacer en una milonga antes de bailar con Carmen. Yo me he reído y he contestado: pregúntale a ella, es un ser independiente.

Pero quizá una palabra que no he había llamado tanto la atención fue la de VUELA, que está bien marcada en una mayúscula desgastada, no había reparado en que no hace frente, en que se trata de una huida que deja tras sí impunidad para con el maltratador (el «ser» maltratador, no el hombre necesariamente).

Podría haber sido sustituida por cualquiera de una serie como LUCHA, MÁTALO, DENUNCIA… y esta denuncia puede ser no solo mediante los canales telefónicos correspondientes, sino empezando por el entorno, hasta que éste no lo tolere, le excluya, le condene al ostracismo o al exilio, que le suponga, a ese y a otros, una reeducación al más puro estilo de la Revolución Cultural China (o casi).

No soporto entornos que justifican o incluso alaban ciertas de estas actitudes pre-maltratadoras como algo «normal», humano, natural… sin cuestionar su moralidad, sin haberse hecho una idea de qué modelo de sociedad se desea tener. Pero quizá este es el verdadero trasfondo del problema. Falta de conciencia social.

¿Cómo y por dónde empezar a conseguirla?

De momento, seguiré escribiendo sobre estos temas a modo de denuncia callada, sosegada, que pueda servir de reflexión para otras personas. Espero.

Newsroom

Newsroom imgHoy he encontrado un artículo que mi amigo Juan Carlos Etxeberría ha escrito sobre esta obra maestra de las series de televisión contemporáneas y no he podido evitar (ni querido) responderle a su comentario con unas palabras de las que quiero dejar constancia en este diario.

Tenía claro que tarde o temprano tendrías que escribir sobre esta serie. Te recomiendo, tras el final de la tercera, que no olvides a su creador (Aaron Sorkin) y sus obras: El ala oeste de la casa blanca, Studio 60. Por supuesto que es ideologizante. Es parte de su encanto, no un motivo de rechazo: es prodemócrata, pero sin ser excesivamente cruel con un republicanismo al que intentar conducir a senderos menos espeluznantes que los que puede llegar a seguir.

Y, tras Sorkin, lánzate a las series de David Simon (también cargadas de “mensaje” social-político, sin por ello desmerecer) que son de tan alta calidad que dejan a cualquiera de las demás series de televisión en una especie de segundo nivel. No es que sean “series” buenas, es que son “otra cosa.

Recomendable: The Corner, The Wire, Tremé e, incluso, la bélica The Kill Generation.

Con respecto a la secuencia impactante con la que la serie arranca, no pude evitar contestarme a esa pregunta tan interesante: ¿Por qué es Madrid (elije la que te corresponda, ya sea país, ciudad…) la mejor ciudad del mundo?

De lo más interesante, desde mi perspectiva, es que Mr Sorkin no solo se limita a hacer una serie buena para un sector profesional, sino para cualquiera que quiera verla, es entretenida, inteligente, profunda, compleja… lo necesario cada vez más en este mundo del siglo XXI del que tontería simplista es decir que es un cambalache, problemático y febril.

Querido amigo, como de costumbre, gracias por tus palabras y por un texto tan interesante.

Candadian THE NEWSROOMHoy he descubierto que es un remake de la serie homónima canadiense del 1996, que no conozco. Pero no creo que sea importante para lo que Sorkin logra con ésta, amén de diferente actualidad político-social en la que ubica la misma.

Esto no es una broma