Insultos indiscriminados

Ayer, una persona de cuyo nombre no quiero acordarme, en una red social que no era conocida por ser la más hostil, me escribió un mensaje privado preguntándome que si yo no contestaba a desconocidos.

Le pregunté (porque en realidad (en «la» realidad) no le conozco) que si éramos desconocidos y me dijo que sí, pero que eso podía cambiar, que me había propuesto (no sé cómo ni por qué cauce) que acudiera a una reunión que organizaba para visitar algunos puntos clave de Madrid, supongo que hablando por el camino.

La cuestión es que me dio por mirar su perfil para ver de qué o cómo nos conocíamos y encontré un sinfín de mensajes en los que insultaba «sin querer» a toda persona que no opinase como él, cayendo, en multitud de ocasiones en despersonalización o deshumanización como se supone que hace un régimen totalitario o uno que aspire a crear las condiciones para que este régimen se dé.

Alguna vez llamaba «borregos» a quienes, al contrario que él, creyeron (yo me incluyo, visto lo que vi alrededor) que el COVID o la COVID había sido una pandemia global. Es decir, quería invitarme a mí, borrego según sus palabras, a charlar (no balar) con él. Harto estúpido el tema, pero qué le vamos a hacer.

En otra ocasión, «neandertales» o protohumanos a quienes decidían votar en las elecciones no suponiendo (al contrario de lo que él «sabe con certeza») que todos los partidos sean iguales o sean movidos por intereses tenebrosos fruto de la confabulación sionista (sic). Así que también aquí desea citarse con seres, según sus propias palabras, infrahumanos, para charlar con ellos.

Evidentemente, esta persona y yo tenemos poco en común, allende algún punto en el que podamos estar de acuerdo: el fuego era también usado por los neandertales. Pero no quiero, en ningún momento, quedar con él para que me «ilumine» y consiga, así, «ver la luz» que ahora mismo me es negada por mi propio aborregamiento.

¡Qué desesperación esta la de la crítica tan salvaje y ad-hominen!

Personalmente, no quiero saber nada de Milei, ni de Ayuso, sino de sus políticas, porque sí, sí hay diferencias entre las distintas propuestas políticas. Y lo que está haciendo Ayuso en Madrid no es fruto de la demencia ni de la maldad: no nos engañemos, es una voluntad intencionada de acabar con los servicios públicos. Y se está votando eso. Así que asumamos que el problema no es Ayuso, como no lo era Esperanza Aguirre, el problema es que se vote esa inmediatez irreflexiva de conseguir liquidez sin pensar en el futuro, en un futuro en el que la infraestructura que hemos fabricado a lo largo de medio siglo de democracia social se desmonte sin más alternativa que una falsa meritocracia neoliberal que se fundamenta en una ilusoria igualdad de oportunidades para hacer dinero con el que pagar los derechos.

Este párrafo sobre IDA y Milei y la socialdemocracia va en relación a las muchas veces en mi entorno social (algo rojillo) en el que se critica a esas personas perdiendo el foco en ilusionar y convencer a quienes han de desear un modelo distinto del que estos dirigentes con tintes autoritarios desean implantar y «nos venden».

Entérate de todo en 10 segundos

Demencial la propuesta:

En resumen, ten un conocimiento tan superficial como sea posible pero ten la sensación de que lo sabes todo, de que estás enterado de todo, de que estás al día de toda la actualidad, así, sin más ni más, en cinco minutos.

¿Para qué dedicarle más tiempo? ¿Para qué profundizar? ¿Para qué los reportajes, los documentales de varias horas monográficos? ¿Para qué wikipedia?

El País Exprés patrocinado por Longines te garantiza tu omnisciencia en décimas de segundo, sin sufrimiento, sin esfuerzo, sin tener, ni siquiera, que leer.

«La EvAU es el problema». Dicen algunas voces.

En el tiempo que he podido tardar en leer ese anuncio sobre el express… me ha dado tiempo a leer las dos bandas verticales laterales que me invitan a comprarme un Audi A3 Sportback… y seguir con la velocidad y la superficialidad: ¿Qué más da si contamina? ¿Qué más da de dónde vengan y a qué coste sus componentes? ¿Qué más dan las condiciones laborales de sus trabajadores?

Saber algo de esto requeriría mucho más que minutos… y yo no los tengo porque tengo que ir a comprarme el coche y leer el artículo sobre el fichaje de ese señor y una ley de protección de menores. Todo en una especie de gazpacho periodístico pantagruélico.

Y así seguimos.

A este mundo le sobran…

Una amiga publica esta imagen en una red social y no quiero contradecirla ni, mucho menos, enmendarle la plana (¡qué expresión!), pero me resulta bastante gracioso que un texto que dice que «a este mundo le sobran opiniones y le faltan abrazos« se quede tan pancho ante tal paradoja: esa afirmación es una opinión. Opinión con la que puedo estar completamente de acuerdo, aunque sobre mis opiniones ya he escrito en otro sitio… más y mejor.

Ni que decir tiene que también me resultó algo molesto (quizá sobre ese «también») el punto tras «se equivoque», y las mayúsculas sin otro sentido que el de comenzar la línea, como si lo hubiese escrito alguien que no sabe evitar que se autocorrija el editor.

Cuando alguien se equivoque, abramos más los brazos que la boca: a este mundo le sobran opiniones y le faltan abrazos.

Pero me gusta la bicicleta y la pared de tres tonos de rosa, amén de la tipografía, que podría calificar de «femenina», si es que eso tiene algo de sentido.

Pensar es caminar

(Fotografía de Miguel Cereceda)

En esta semana tan performática (dos sábados seguidos realizando acciones en eventos de alto voltaje) he tenido el honor de estar invitado a participar en la décimocuarta revista caminada de la cuenta oficial de Miguel Nava y Rafa Lamata.

En esta ocasión, presenté la acción Pensar es caminar:

Acción pensada para realizarse en el marco de la REVISTA CAMINADA CON MOTIVO DE LA EXPOSICIÓN “CAMINANTE NO HAY CAMINO”. Sábado 27 de Enero de 2024 convocada por Miguel Nava, Rafael Lamata y Miguel Cereceda, comenzando en los Arcos de Moncloa y terminando en la Cafebrería (un café librería) en la Calle del Buen Suceso que alberga la exposición en cuestión.

Me fue asignada la Séptima Página en la Escalinata que baja – Calle del Pintor Rosales.

El comisario de la exposición, Miguel Cereceda, publicó un maravilloso artículo resumiendo a modo de documentación, como debería ser, la jornada en su página web arteycosas.es.

En ella mencionaba a mi estimado Hilario Álvarez quien a lo largo de varios años había realizado una especie de lo que conoceríamos ahora como «spin-off» de revistas caminadas de aquellas iniciadas por Miguen Nava y Rafa Lamata en 1996.

Cereceda dice de mí lo siguiente en su crónica:

Giuseppe Domínguez le estuvo dando vueltas a la pregunta heideggeriana “¿Qué significa pensar?”, en su relación con el caminar. Domínguez insistió en que pensar es caminar y caminar es también pensar. Pero, mirando en el diccionario, le recordó al filósofo alemán que pensar es también alimentar al ganado con pienso. Y, en ese sentido, nos dio un poco de pienso a cada uno. Animales pensantes como somos, lo comimos de buen grado.

Y he de reconocer que me hace ilusión que mencione a Heidegger en su texto relacionándolo con mi pequeña reflexión (casi juego de palabras) sobre caminar y pensar.

Cuando el lenguaje inclusivo se vuelve ridículo

Hace tiempo que no discuto mucho sobre la diferencia entre género gramatical y género como identidad o expresión. Son discusiones muchas veces infructuosas y la mayoría de ellas algo hostiles. Así que no pasa nada por callarme y escribir lo que quiera, aquí, para mí mismo, como este pequeño divertimento realizado con un comando de linux (de unix, en puridad) con el que he sustituido todas las vocales a, o, á y ó por x, parodiando lo que una amiga había publicado en una red social.

Las familias haciendo malabares para garantizar que lxs pibxs tengan lo que necesitan. Lxs docentes hacen guardia también, por la escuela y por lxs chicxs. Lxs pibxs sostienen. Que esperan?! Agotarnxs para que levantemos y mantenerse en la postura intransigente de no reconocer que la comida que dan no alcanza?

Obviamente, no iba a escribirle un comentario que recalcase que se había pasado un poquito con este «agotarnxs«, pues no habría sido sino un «mansplaining» en toda regla, amén de un comentario altamente superficial que podía ahorrarme sin problemas, así que decidí reescribir el inicio de la Metamorfosis de Kafka para publicarlo en mi diario:

sed 's/[oaáó]/x/g' metam.txt > metxm.txt

Unx mxñxnx, trxs un sueñx intrxnquilx, Gregxrix Sxmsx se despertx cxnvertidx en un mxnstruxsx insectx. Estxbx echxdx de espxldxs sxbre un durx cxpxrxzxn y, xl xlzxr lx cxbezx, vix su vientre cxnvexx y xscurx, surcxdx pxr curvxdxs cxllxsidxdes, sxbre el que cxsi nx se xguxntxbx lx cxlchx, que estxbx x puntx de escurrirse hxstx el suelx. Numerxsxs pxtxs, penxsxmente delgxdxs en cxmpxrxcixn cxn el grxsxr nxrmxl de sus piernxs, se xgitxbxn sin cxnciertx. – ¿Qué me hx xcurridx?

Nx estxbx sxñxndx. Su hxbitxcixn, unx hxbitxcixn nxrmxl, xunque muy pequeñx, teníx el xspectx hxbituxl. Sxbre lx mesx hxbíx despxrrxmxdx un muestrxrix de pxñxs – Sxmsx erx vixjxnte de cxmercix-, y de lx pxred cxlgxbx unx estxmpx recientemente recxrtxdx de unx revistx ilustrxdx y puestx en un mxrcx dxrxdx. Lx estxmpx mxstrxbx x unx mujer txcxdx cxn un gxrrx de pieles, envueltx en unx estxlx txmbién de pieles, y que, muy erguidx, esgrimíx un xmplix mxnguitx, xsimismx de piel, que xcultxbx txdx su xntebrxzx.

Gregxrix mirx hxcix lx ventxnx; estxbx nublxdx, y sxbre el cinc del xlféizxr repiquetexbxn lxs gxtxs de lluvix, lx que le hizx sentir unx grxn melxncxlíx. «Buenx -pensx-; ¿y si siguiese durmiendx un rxtx y me xlvidxse de txdxs estxs lxcurxs? » Perx nx erx pxsible, pues Gregxrix teníx lx cxstumbre de dxrmir sxbre el lxdx derechx, y su xctuxl estxdx nx le permitíx xdxptxr txl pxsturx. Pxr mxs que se esfxrzxrx vxlvíx x quedxr de espxldxs. Intentx en vxnx estx xperxcixn numerxsxs veces; cerrx lxs xjxs pxrx nx tener que ver xquellx cxnfusx xgitxcixn de pxtxs, que nx cesx hxstx que nxtx en el cxstxdx un dxlxr leve y punzxnte, un dxlxr jxmxs sentidx hxstx entxnces. – ¡Qué cxnsxdx es lx prxfesixn que he elegidx! -se dijx-. Siempre de vixje. Lxs prexcupxcixnes sxn muchx mxyxres cuxndx se trxbxjx

Sobre la alergia y lo mal que pinta mi futuro en Madrid

He estado leyendo este artículo sobre la evolución de las alergias y el nivel de polen provacado, entre otras cosas por el cambio climático, mientras espero a que vengan a instalarme la fibra óptica en mi estudio y me me asustado porque esta gráfica tiene una tendencia muy, pero que muy preocupante:

Pero si el polen es preocupante, hay algo que me preocupa aún más y es la estupidez humana. En el artículo sólo había un comentario y era el siguiente:

Emilia dice (22/05/2022 a las 12:14):

Llevo 30 años con alergia a las gramineas, olivo y arizonicas, llevo puestas 3 vacunas en distintos periodos en estos años, he tomado toooodos los antihistaminicos que hay en la farmacia, homeopatía, hiervas,acupuntura, purificadores de aire en casa, mascarillas con filtro HEPA, nada, nada, Nada ha conseguido aliviarme 5 minutos los síntomas tan desagradables que me produce la alergia y no me dejan vivir durante dos meses de mi vida. Lo único demostrable para mí es que los laboratorios en farmacia para aliviar los síntomas de la alergia no valen PARA NADA. Nos están hinchando a farmacos que no solucionan el problema. Si funcionaran no tendríamos el problema toooodos los años las personas alérgicas.

Es decir, que después de probar homeopatía, hiervas, acupuntura… parece ser que las farmacéuticas tienen la culpa porque nos están hinchando a fármacos.

Es decir, que no se responsabiliza de pedirlos, pues no son obligatorios, ni culpabiliza en absoluto a esos presuntos remedios que ha utilizado sin control alguno, sin hincharse con ellos, supongo.

De los alérgenos puedo escapar, pero de este nivel de estupidez mucho me temo que es imposible alejarse.

nivel de inteligencia perturbada

El otro día me encontré con una de estas imágenes famosas de «fondo/forma», que tan de moda estuvieron hace unas décadas. Incluso llegué a verlas usadas en mis clases de Química Cuántica para explicar la dualidad onda-corpúsculo.

Esta vez era una imagen llamada test-viral-paloma (lo cual indica qué pretenden que se vea antes, aunque no se hayan dado cuenta de que es una indicación explítica).

El artículo en el que estaba anunciaba lo siguiente:

¿Cuál es tu nivel de inteligencia? Mira y responde con la verdad en este test de personalidad.

Una de dos opciones puedes percibir en el primer vistazo. Solo responde honestamente qué figura viste para que el test de personalidad de una respuesta certera.

El problema es que yo siempre veo más de una respuesta a la vez. Quizá sea un problema derivado de mi falta de visión, pues tiendo a desenfocar miopemente hasta que poco a poco voy centrándome en algún foco concreto.

Pero lo que puedo asegurar es que, igual que me ocurre con los «problemas de las 7 diferencias», siempre encuentro muchas más respuestas acertadas, haciéndome dudar de las presumiblemente respuestas acertadas.

Y es que la duda… ay, siempre la duda.

Esto no es una broma