Ventana, M-20040125

Ayer estuve mal, muy mal. Yo culpable muy culpable de lo inapropiado de lo inapresable ia ia ia.

Ayer.

Hoy estuvo raro. Seminublado. También el clima estaba así. Está así. El pasado es presente y lo demás es una nariz afilada como un garfio protestando graznando por un exceso injustificado de formas verbales no correspondidas con el paso del tiempo. Tiempo nublado. Nublando. Nublador de horizontes sin aguaceros en los que cabe contra la pena un ruido de rinoceronte con la cabeza amarilla. Sus ropas están siempre cortejándome.

Reaparece Mª Luisa en un pasado imperfecto, casi se podría asegurar que un futuro incierto. Y digo casi por casualidad y no de forma premeditada. Quiero conocer los más íntimos pensamientos y sentimientos de super b y no sé si tendré la fuerza suficiente para medirlos en la medida de todas las cosas. El sol sigue siendo plano y resacoso. Mª Luisa bebió ayer 2 gotas de vino tinto de una garrafa avinagrada. Hoy siente un tremendo dolor de cabeza. Cierra las persianas en el vano intento de evitar el día. Hoy.

Pasa, despacio, bajo la alfombra y se cuela junto al precioso tocador que le regaló su madre.

Ventana, M-20040123

Es difícil atalayarse en la mañana para mirar una terraza en la que no ocurre nada. Es tan duro reconocer en eso mi falta de imaginación que culpo a las lechugas de una indiferencia que solo es mía.

Esta terraza no conoce mi voyerismo, no sabe si estoy o no mirándola, tampoco sabe si escribo sobre ella o la uso como tonta excusa para escribir sobre mí mismo.

Y entonces me encuentro con que en mí no pasa nada (nuevo?) y no sé qué contar. Pero eso es otra maldita lechuga que dice muy poco de mí como escritor. ¿Soy escritor? Ahora no: no escribo.

Y buko ya me abrió los ojos una vez a ese respecto. El pintor es aquel que pinta, el escritor el que escribe y no que el escritor escribe. El escritor se hace con sus propios actos. El escritor no es en sí, sino que existe sí y solo sí escribe. No es necesario, es una mera conclusión de una forma de vida. Sus actos (en el tiempo) le hacen o me hacen pero no me hago porque las lechugas llenan de autocompasión lo que no escribo.

Esa terraza sigue en silencio gritándome que escriba, que escriba sin parar y muera bajo un montón infinito de archivos tecleados o fotografiados o creados o recreados o… que reflejen, como sea, el fruto de una acción.

Ventana, M-20040122

Me pongo pro pongo ser constructivo destructivo activo divo y no veo la forma de ir haciendo silencios tras silencios hasta llegar a 1000 cacatúas habiertas como un rayo que debe ver el fondo del mal.

Ignoro a Mª Luisa que no quiere salir a la terraza a respirar y ver de qué modo nos reímos de ella los cronistas de a pie. La piel hermosa de sus abrazos me dice tienes miedo y sé que sí tengo miedo porque no me atreví a leer la carta y eso es por algo, no crees?

La carta estaba sobre la mesa y no me atreví a convertirla en sonido. Ido. Venido. Vencido.

Un hilo de llanto dijo bajo un manto de mentiras no voy a leerla y nadie oyó aunque los ojos eran conscientes.

Las sábanas de felpa son abrigadas y el secreto de la vida está en

No sé. No tengo ni idea.

Escribo tan mal que mi culo se llena de vergüenza.

Acaba de salir. Aún no lleva maquillaje y no sabe que la miro. Recoge sus ropas y con la primera se abriga. Su pelo rubio sin vida parece apunto de morir, como ella, olvidada por mi indiferencia.

Ventana, M-20040121

Va y viene. La niebla no existe. Suena esa música de colores bajo el insistente sol. Mª Luisa ha resucitado. Ella va y viene como el día. Creación destrucción que nos lleva a una nada de la que no soy capaz de escapar.

Creo nada. Destruyo nada. Dada, nana, nadanada dananada dadaanna.

La verdad.

En el fondo del cuadro un horizonte plomo marca surcos en tu frente.

Ella va y viene.

Todo se renueva, se remoza. Un pelo en la punta del falo azul.

(Lo dejo a modo
de recuerdo
pornográfico
incrustado en un papel
humano, demasiado humano.

Suenan caléndulas calientes. Al lado, su vecina se desviste con ruiseñores en el culo. Va y viene.
Todo es devenir.
Tododana.

Hace mucho tiempo que no leo a Gunter Grass. Las obras de construcción de la catedral avanzan laboriosamente bajo la bóveda celeste. Llegarán a tocar la barriga de dios, a hacerle chantaje con unas fotos comprometedoras que le sorprendieron besando niñas menores de 6 años con la polla completamente erecta. Dios tiene unas aficiones muy extrañas pero ya sabemos que sus caminos son…

Ventana, M-20040120

Busco palabras
           p a  a
                    s
                      q
                        interrumpan
                        irrumpan
                        en mitad de la noche
y se lleven consigo mi pasividad.

Busco un atentado nihilista que haga renacer no un ave de sus cenizas sino las cenizas de un ave urbe. Destrucción, que no quede piedra sobre piedra, ladrillo intacto, que no quede tiempo siquiera inmaculado; destrucción que queme la ropa, incendie edificios, gasifique viviendas, arrase almas, derribe puertas y ventanas, que no deje muro vivo ni venda los pedazos al mejor postor.

Mª Luisa será enterrada en el cementerio de la Alumdena, justo al lado de la tumba de su abuela, en una ladera soleada en esta época del año y que crujirá un terremoto cuando encuentre lo que busco. Me haré dios. Que será líquido amarillito. Seré el más grande entre los hombres que serán, a su vez, más grandes que yo. Las comparaciones servirán para hacer versos románticos y poco más.

Mª Luisa yacerá con el culo descompuesto por gusanos de un tamaño microscópico, sus ojos devorados por ratas invisibles que atravesaron el mármol del recubrimiento lateral de su caja acolchada.

Solo quedará, quebradizo y de paja, su pelo rubio y sus huesos, incluso el de su pierna izquierda, la que se rompió jugando al tenis de pequeña. Era difícil jugar sobre el asfalto.

InAcción de ARTóN

Hace unos días los amigos de ARTóN me enviaron este pequeño cuestionario que voy a intentar responder con lo mejor que sé, con honestidad, sinceridad y desde mi más pura opinión.

Ya me hicieron reflexionar con su convocatoria de Des-Plaza-Miento que englobaban dentro del proyecto de cobrar la entrada en un encuentro autogestionado de Performance. Les respondí breve (Piero Mancini) y, después, con un largo comentario sobre el precio de una performance o de una pieza de arte contemporáneo en general. Texto que, a su vez, fue contestado por unos cuantos amigos y conocidos de quienes respeto su opinión que, en ocasiones comparto y en otras no. Vamos, lo normal.

Esta es la presentación de su propuesta que, de antemano, agradezco que me hayan enviado:

Estimados amigos, colegas, desconocidos, …

Desde hace más de tres años les comunicamos mensualmente que ARTóN sigue con la ACCIóN!!!
Este año 2012 lo iniciamos con LA INACCION!!!!

La inacción entendida como reflexión, una mirada a la actividad y al propio medio profesional. Este año vamos a ir despacito pensando y repensando, sin que ello signifique que abandonemos la acción tan sólo la manera de llevarla a cabo. Os invitamos a realizar esta actividad con nosotras agredeciendo de antemano vuestra participación.

Toda persona interesada en el ARTE y en la ACCIóN es bienvenida a nuestra INACCIóN

Nuestra primera propuesta:
Hemos formulado una serie de preguntas se puede contestar una, dos, tres, todas, ninguna y/o formular unas nuevas

Y aquí su primera pregunta de un cuestionario del que voy a intentar no dejarme nada por responder.


¿Ves necesario la existencia de encuentros informales donde la práctica sea investigada pero donde no se mueva dinero? es decir, donde la producción corre a cargo de los artistas. si es así, ¿de que manera lo gestionarías?

Es insostenible que la producción corra todo el tiempo a cargo de los artistas. La logística de un encuentro más o menos informal, más o menos formal de cualquier cosa (también del arte contemporáneo) implica la aportación de un dinero que no siempre se tiene. Desde luego, sin dinero o algún tipo de retribución alternativa, no hay forma de gestionar este tipo de encuentros. Y que lo pongan de su propio bolsillo los artistas es algo tan inconcebible como absurdo. La razón aducida hasta ahora para que los artistas hagan esto es que lo hacen por que quieren, por amor al arte. Pero esto no es una razón válida. Han elegido realizar un trabajo (porque esta es la cuestión básica: se trata de un trabajo) y deben ser remunerados por él. En caso contrario, se trata de una forma encubierta de esclavitud.

Hoy contestaría un poco agriamente: No lo gestionaría.

Pero la realidad es que me encanta gestionar este tipo de encuentros, así como participar en ellos y quiero alimentar su funcionamiento con algún tipo de retribución cuando alguien los organiza y sé que no tienen recursos suficientes para hacerlo. Sigo pensando que, como escribí en un artículo relacionado, la forma de financiación convencional no es la más adecuada. Mi propuesta sería la de abrir bancos de tiempo paralelos o formas de retribución no basadas en el pago en dinero que es una herramienta poco apta para valorar objetos contemporáneos por su condición de ser muestras de trabajo contrario a una expectativa cuantificable objetivamente, al contrario de lo que ocurre con el dinero, contante, sonante y basado, ni más ni menos que en su valor objetivable consensuado a priori.

A los artistas les (nos) hacen falta cosas, materiales y no materiales, y a los organizadores también para poder subsistir, para poder realizar estos encuentros y para poder participar en ellos. Comida, alojamiento, servicios varios (desde escribir una reseña periodística a gestionar servidores, pasando por cuidados de niños y clases de idiomas), que pueden ser aportados por los asistentes a un encuentro de arte de acción a razón de un criterio subjetivo y acordable entre las partes que, por otro lado, están muy cerca. Tanto que suelen ser los mismos. Pero de esta tendencia endogámica mejor no hablar ahora.

Piensas que con festivales anuales es suficiente para que el ARTE de ACCIóN se desarrolle.

No.

El Arte de Acción requiere un desarrollo continuado, un trabajo no solo de exhibición, sino de investigación, permanente. Vamos, como todo. Pero ¿tiene público? Veo que esta pregunta está formulada más abajo, así que la contesto luego.

Conozco colectivos que están trabajando de manera regular en obras que solo puntualmente exhiben. Esto es normal. Pero no pueden pensar en vivir de ello tal como está montado el sistema. Huyo de expresiones tan impersonales como esta de «el sistema», ese ente que parece dominarlo todo desde su lejano trono olímpico, pero en este caso se trata de subvertir el sistema antes de poder establecer un método de retribución con sentido para artistas y otros trabajadores cuya producción no es de directa aplicación. Es importante hacer ver que esta producción es necesaria antes de poder plantearse si los encuentros deben o no ser anuales, mensuales, semanales… Y eso es, en parte, responsabilidad de los organizadores de los mismos encuentros.

Creo que la regularidad y el compromiso constante y continuo de los artistas y los organizadores de encuentros de arte son los que hacen que esté aún en pie esta forma de arte llamada Performance.

Piensas que con tan solo las instituciones exhibiendo ARTE, los artistas pueden desarrollarse.

El término «institución» es tan impersonal como el de «sistema».

Si entendemos institución como aquellas dirigidas o administradas por organismos oficiales varios, como gestores de la Comunidad Autónoma, Ayuntamiento, Ministerios, etc, la repuesta es que no.

Los artistas de arte de acción (y de toda creación contemporánea en general) deberían seguir luchando contra ese intento de apresar entre cuatro paredes (más o menos móviles) un trabajo que surgió en respuesta al anquilosado, por necesidad, entorno institucional.

Obviamente, la autogestión surge como forma natural de funcionamiento de estos colectivos e individuos, con la consiguiente complicación de su sostenibilidad.

¿Que funciones piensas que tiene el ARTE? ¿añadirías alguna específica para el arte de acción?

No sé si atreverme a responder esta y las siguientes preguntas sin dar una breve (brevísima) acotación de lo que yo entiendo por ARTE.

Y aquí me quedo en blanco. No es que no me lo haya preguntado una y otra vez, es que nunca acabo de llegar a una respuesta satisfactoria. Creo que esto es un problema (personal y no solo) que hace que la definición del trabajo de ARTISTA sea tan difícil de entender.

¿Es ARTE lo que produce un ARTISTA? o ¿Es ARTISTA quien produce ARTE?

Me inclinaría por la segunda de las dos alternativas. Para mí no hay ARTISTAS, pero sí hay ARTE, aunque, al no haber ARTISTAS, lo llamaría, por distinguirlo, arte.

Y ese arte tiene la función de servir de vehículo de expresión de un individuo o colectivo que necesita, por una íntima cualidad, crear. Es una creación no ex-nihilo, por supuesto, se trata más de una transformación y aquí citaría a mi admirado Joan Brossa: «El arte es vida y, la vida, transformación». Aunque Brossa atribuía esta frase a Leopoldo Frégoli.

Así que, en el fondo, podría verse como que la única función del arte (no del ARTE) es un tanto onanista, pero por otro lado, compartir esa expresión, esa transformación, es algo que abre la mirada al mundo de manera que expande la forma en la que los humanos se relacionan con él. Este cambio en la mirada es un cambio radical, hasta el punto de que es la verdadera forma de transformar el mundo… pero, como me gusta añadir, no necesariamente a mejor.

En cuando a si el arte de acción tiene una función específica: para mí no hay una frontera entre el arte de acción, la poesía, la pintura, la música, la danza… eso son fronteras arbitrarias y un tanto decimonónicas que quedan trasnochadas desde Dadá para acá. Quizá, la única cuestión sobre la que la performance ha sido especialmente dura, al menos en sus orígenes, es en torno al punto que mencionaba unos párrafos más arriba acerca de la resistencia que debe llevarse a cabo por parte de los artistas de este género por no ser encuadrables en los muros de un museo, ni ser comercializables de manera convencional. Ya lo pusieron de manifiesto las acciones de Yves Klein, Piero Mancini, y tantos otros… que luego el mercado acabó por volver a engullir fabricando anécdotas donde había obras.

En este sentido, sigo admirando sin fin al ínclito Isidoro Valcárcel Medina: El arte es una acción personal que puede valer como ejemplo, pero nunca tener un valor ejemplar.

¿Que papel tiene el artista en la sociedad?

Tal como he expuesto en la respuesta a la pregunta anterior: no creo en la existencia del ARTISTA. Pero aquel que hace arte, lo que lleva a cabo es una labor catalizadora que puede valer como ejemplo para que otros sepan que pueden cambiar sus vidas, cambiar sus mundos, buscar respuestas, plantearse preguntas… abrir sus miradas y expandir sus mentes. Pero esto no es una función exclusiva del arte. Creo.

¿Piensas que en España la gente muestra interés por el ARTE?

Depende: la gente, en España, llama ARTE a cosas que yo no llamo ARTE (ni arte) como puede ser un músico más o menos enlatado que se permite el lujo de dar un concierto en el Teatro de la Ópera porque, pretendidamente, es un artista no elitista que ayuda al sostenimiento de una instalación como esa.

Tuve una árida discusión acerca del concierto navideño de Bisbal en navidades de este año en la que yo sostenía que jamás debería estar cantando allí porque ya tenía su lugar donde exhibirse y no en un lugar reservado (o que debería estarlo) al arte de la ópera. Aunque esto sea poco rentable, claro. Y acabamos otra vez en lo de siempre: el dinero y un sistema basado exclusivamente en ese valor como criterio objetivable de calidad.

Por no hablar del culto a ARTISTAS como pintores hiperrealistas o algún habitual de calendarios, otrora criticado Dalí, o algún cineasta más o menos pretencioso, o algún performer espectacular (¡contradicción!) como la aclamada Pina.

Ahora, se me olvida que yo soy gente. Soy poca gente, pero soy gente. Y sí, me gusta algún arte. De alguna persona que lo hace. No todo el arte ni todas las personas. Y no es una cuestión de género o forma. Me gusta o no me gusta. Siempre me interesa, eso sí, su función.

¿Como piensas que va a afectar la privatización del ARTE?

privatizar. (Del lat. priv?tus y el suf. verbal -izar). 1. tr. Transferir una empresa o actividad pública al sector privado.

privado, da. (Del part. de privar; lat. priv?tus). 1. adj. Que se ejecuta a vista de pocos, familiar y domésticamente, sin formalidad ni ceremonia alguna. 2. adj. Particular y personal de cada individuo. 3. adj. Que no es de propiedad pública o estatal, sino que pertenece a particulares. Clínica privada 4. adj. Can. Muy contento, lleno de gozo. ESTAR privado 5. m. Persona que tiene privanza. 6. f. retrete (? aposento). 7. f. Plasta grande de suciedad o excremento echada en el suelo o en la calle.

Pero si, según la RAE, siempre ha sido privado.

Y eso que no he querido tirar por otras acepciones también interesantes de la definición de público.

Quizá es momento de reflexionar sobre este hecho: ¿puede ser público algo que no interesa a un gran público? Es decir, que se ejecutase con publicidad, a la vista de muchos y no pocos y que perteneciese a otros que no fuesen particulares.


Advierten, para terminar sobre la publicidad de los textos escritos:

De momento, publicaremos las opiniones en nuestra página web os informaremos de los siguientes pasos o mejor pasitos que daremos cuando nos hagáis lo envíos, por favor especificar si la publicación queréis que sea o no anónima.

Por supuesto, puede ser publicada en cualquier medio, de cualquier manera, reproducida total y parcialmente, citada sin mencionar al autor o haciéndolo que, en esta ocasión, ha sido Giusseppe Domínguez, en Madrid, a 8 de febrero de 2012.

Con cinco últimas palabras son 2012.

pene

Teniendo en cuenta lo que dicen en este divertido artículo de El País, he decidido no tener pene. Prefiero miembro sobresaliente. Pero ahora veremos qué hacemos a partir de aquí realizando un divertido juego de Literatura Definicional aprendida de los amigos de OuLIPO.

Pene.

Miembro sobresaliente.

Pene de calificación superior a la de notable.

Miembro sobresaliente de puntuación obtenida en un examen o en cualquier tipo de prueba que está más alta y en lugar preeminente respecto de otra a la de las personas principales en una localidad o en una colectividad.

Individuo que forma parte de un conjunto, comunidad o cuerpo moral destinada a suplir la falta o ausencia de otra del conjunto de los signos que sirven para puntuar tenida, conservada y mantenida en una prueba que se hace de la idoneidad de una persona para el ejercicio y profesión de una facultad, oficio o ministerio, o para comprobar o demostrar el aprovechamiento en los estudios o en cualquier ejemplo característico de una especie, de un género, etc, de justificación de la verdad de los hechos controvertidos en un juicio, hecha por los medios que autoriza y reconoce por eficaces la ley que está más levantado, elevado sobre la tierra, y en espacio ocupado o que puede ser ocupado por un cuerpo cualquiera sublime, superior, honorífico y que está más elevado respecto de otra a la de los hombres o mujeres cuyo nombre se ignora o se omite que tienen el primer lugar en estimación o importancia y se anteponen y prefieren a otras en cada una de las plazas o asientos de los locales destinados a espectáculos públicos o en un conjunto de personas reunidas o concertadas para un fin.

Si hubiese continuado la recursividad encontrada en que miembro está definido como pene y pene como miembro… habría podido dar una muy divertida sugerencia:

pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro pene miembro destinado a suplir la falta o ausencia de otro.

De la censura, hablaremos otro día.

Contexto

Estaba en el metro volviendo de dar una clase en Aluche cuando me encuentro con un niño jugando con un avioncito de estos que son como maquetas de los reales y pienso en lo importante del contexto.

Ver una imagen como esta sin saber que es una compañía que ha quebrado es muy distinto a ver una imagen como esta sabiendo que ha quebrado. La imagen no cambia, lo que cambia es el contexto. Es una obviedad, pero a veces lo olvidamos y no sacamos el suficiente juego a estas posibilidades que nos brinda la situación.

Podemos jugar a imaginar composiciones objetuales con piezas que, en particular, resulten llamativas por el contexto en el que las utilicemos, ya sea algo como un avión de una compañía que ha quebrado o, por el contrario, imaginar contextos en los que las imágenes cotidianas que manejamos serían chocantes: por ejemplo, un bolígrafo azul bic… con el que se había matado a un hombre. ¿Seguiremos viendo tan solo el bolígrafo? ¿No veremos lo aludido por contexto?

Insisto en que son obviedades, son herramientas semióticas básicas en todo hacedor de poemas visuales, pero ¿por qué no extendemos este juego a otros ámbitos no poéticos aparentemente? Sería como crear una suprarrealidad (el surrealismo tiene aquí su aparición) mucho más interesante que la última temporada de Fringe.

Voy a jugar un rato…

Querido amigo,

no sé quién eres.

Quiero decir, no sé cuándo estás ni cuándo no estás ni sé de ti tus formas. A veces me siento solo y otras veces me invades. ¿No podríamos ser una pareja enamorada? ¿Por qué te empeñas en no definirte y ser un poco como si nada te afectase? Todo me afecta ¿y a ti?

Te veo como inmóvil, como inmutable y al mismo tiempo creo que cambias sin cesar, sin parar un segundo. No te estás quieto.

¿Te acuerdas de ese viaje que hicimos? ¡Ah! Ahí sí te vi claramente. Tuve la sensación, por primera vez en mi vida, o quizá por segunda vez, de que te abrazaba, te abrazaba y te gustaba y querías que te mordiese y te mordí, la nariz, nada más.

Luego te fuiste (o dejaste de hablarme) y me quedé solo.

Ahora que lo pienso, igual fui yo quien dejé de escucharte y nunca más te presté atención y pasa el tiempo y no sé, de verdad que no sé quién o cómo eres ahora.

Te echo de menos.
Por favor, contéstame.

Un beso,
Giusseppe

Esto no es una broma