Tomates
rojos sobre rojo
sangran al paso de mi cuchillo
que refleja la calle.
Tomates
cuatro en fila de a dos
cortadas en cuatro
con lunas a 45 grados
siempre
aproximadamente.
La sangre es ficción.
La geometría es ficción.
El cuchillo es ficción.
El color es ficción.
El brillo de la ventana
sobre los tomates
es real
como la vida misma.