Riqueza

riqueza

Uno de esos maravillosos poemas textuales de Joan Brossa.

No puedo sino compartir completamente el sentido del mismo. Me encanta su enseñanza constante. El día de mi cumpleaños, el miércoles 3 de junio, «me regalé» dedicarle la clase del Taller de Poesía y Escritura Creativa a este ínclito poeta.

Anécdota de la tarde: sentado en una terraza terminando de preparar la sesión, se acerca un hombre a mi mesa (situación ante la cual se tiende, en Madrid, a adoptar una posición defensiva) y me dice que si me importa ser molestado. Le confirmo que no, que no me importa, pero sigo expectante y me cuenta que es por Brossa. Se abren mis ojos sorprendidos y me cuenta que es un apasionado de ese autor y que le parecía extraño que alguien estuviese leyéndolo, así, como si nada, amén de que hace notar que había notado mi detallado estudio del libro, con anotaciones, páginas marcadas… a lo cual procedo a informarle de que soy coordinador de talleres de poesía y que, por ser el día de mi cumpleaños, el miércoles 3 de junio, me voy a regalar dedicarle la clase del Taller de Poesía y Escritura Creativa a este ínclito poeta.

Por la noche, tomando algo con mis alumnos, les conté la anécdota de la tarde cuando, sentado en una terraza, terminando de preparar la sesión…

Hoy escribo sobre esa noche en la que, habiéndole dedicado la clase a ese poeta, me había encontrado en la situación de hablar sobre una anécdota que involucraba a un hombre que se me había acercado mientras preparaba la sesión…

Poema por sustracción

Como esculpir en el mármol, me gusta proponer este ejercicio de «no-escritura» hasta encontrar un poema en cualquier página de libro.

Elegí este que era un ejemplar encontrado en un contenedor (lo que me libera de la sensación de destrozar libros) sobre la historia de la pintura contemporánea española y el otro día les propuse a unos alumnos del taller de escritura que hiciesen el ejercicio.

El resultado que yo obtuve (participando como uno más, de cuando en cuando) fue el siguiente:

la vuelta a la línea
su boda con la rusa

creyeron ser una especie
llamada dispersión

todo eso afecta a sus mujeres
de belleza y armonía excepcionales

modelo sobre ellas
variaciones arbitrarias
cultivo el motivo de los toros
cercano a los 90 en mano

homenaje de la tierra

poema-extraído

Recital de Poesía en Menosdiez // La Noche de los Libros 2015

La-Noche-de-los-Libros5

El programa para la participación de los Talleres de Poesía y Escritura Creativa de Asociación Cultural Clave 53 en el Día Internacional del Libro será, aproximadamente, lo siguiente:

19:30 Ernesto Pentón Cuza / Juan Carlos Ortega. Lectura de Poemas de sus últimos libros.

20:00 Diana CB (Diana Córdoba) / Raquel Figueiras, Lectura de narrativa. Lectura de Poesía de Raquel (que está exponiendo en la sala)

20:30 Carmen Garrido y Daniel Dimeco. Poesía y Narrativa. Lectura de poemas/fragmento de novela de sus libros/último libro.

21:00 Monica Saad LHoeste / Vera Moreno. Lectura de poemas de sus libros/último libro.

21:20/21:30: Apoteosis final haciendo una lectura de 1 poema/poeta en rápida sucesión ininterrumpida (salvo aplausos de rigor) de los poetas actualmente en los talleres.

Evento amenizado en todo momento por música en directo de Mercedes Molina, Julio Albertos y Luz María Gómez.

Jueves 23 de Abril a las 19:30 horas en La Trastienda de Menosdiez

Tormento escalado

Título extraído de un verso de un poema de Eva Obregón Blasco

 

Tormento escalado

es cuando tus labios caminan demasiado despacio por mi piel
es despertar al alba sin necesidad y con sueño
es el agua de la ducha quedándose cada vez más fría
es tu padre gritando cada vez más alto
es una avellana que cayó por la ladera de una montaña nevada y no consiguió arrastrar nieve consigo
es la película inconclusa cuyo título no recuerdo.

Tormento escalado

es acariciarte sin que dejes de pensar en el último mensaje recibido por whatsapp
es un grito en la niebla
es la noche
es esa noche
es un olvido provocado por el goteo del alzheimer
es el principio de un todo sin música
y sin poesía.

Slogans Poéticos

Usando la aplicación que desarrollé para enviar adagios poéticos, que está basada en la que hice para La Consulta, a partir de hoy voy a enviar emails a mis alumnos con Slogans Poéticos para alegrarles los días.

Es tan bello recibir un poema, breve, que ilumine la cara por un día…

Los que escribieron el día que les ofrecí hacerlo son los siguientes (que se podrían incrementar para continuar el juego durante más tiempo):

Esconde la voz tras las palabras
Cuando los 3 versos caen en impar la poesía vuelve a ganar
Aquí el mar es mas dulce ¡Báñate!
No hay futuro sin la letra f
No olvides sonreír con todo tu riñón izquierdo
Si corre la sangre haz una buena morcilla
¿Alguna vez tuviste 18 años? Pues hay gente que sí
¿Cansado de vivir? Quizás deberías pensar en morir
Navidad, navidad, dulce navidad es la poesía
Con un marcapasos tu vida tendrá ritmo
No dejemos que el silencio sea la dictadura de la circunstancia
Hoy, mañana, tal vez, quizás ¿quién inventó esas palabras?
No dejes de escribir con el hálito y el hábito
Saca el guisqui, cheli
Familia, animales y coche. No sigas
Apaga el móvil y dame un beso.
En el devenir de la noche, ha despertado un sinsentido
¿Tienes picazón? ¡Ráscate con un poema!
Con la antesala de la duda, tus ojos me ayudan a ver
En mitad de esta página hay un silencio
Cierra la boca pero sin morder
Tus oscuras golondrinas han decidido emigrar a tierras de luz
Me gustan los niños, pero de lejos
Casi nada, un poema en flor
Me duele la espalda de tanto escribirte poemas
Días de locos para días cuerdos
Horizontes opacos ocultan un porvenir transparente
Sonríe
Un ejemplar de esperanza vuela bajo tu escalera
Nos queremos, eso es lo que creemos
Cuando tus labios me miran, no sonríes
Cuando Giu tiene ideas fantásticas, la mente se me abotarga
A manos llenas, ojos sin lágrimas
Espera y verás, pero no esperes y serás ciego
Donde mis ojos te llevan al final de las palabras
Escribir no cansa, cansa ordenar las palabras
Llévate un poeta a casa y verás qué romántico
Cuando la luna levante el vuelo, descubriré tu velo
Por si acaso, no te tires pedos en público
Sueña, es gratis
La dulce realidad es irreal
Nada que decir, nada que callar
Si te estremezco, avisa
Un escabel, sin cascabel, para Isabel, Abel, abel
Siempre que llueva, usa bragas impermeables
Construye un poema con letras romas
Si dos y dos son cuatro, Dios y Dios…
Está la aguja desnuda, como tú
Canta si tu corazón llora
Pon un sueño en tu vida
Llueve, nieva, días de mal tiempo para corazones tristes
Aterriza en los abrazos de la primavera
La sonrisa de la mermelada es demasiado empalagosa, como este estúpido verso-poema
Tócate los pies y deja de joder
Universo
La más grata catarata acaba alzada a la mañana
Como a ti mismo, ama la vida
Por las calles de tu voz amanece el silencio
Amanece que no es poco
Trabaja porque no te queda más remedio
Hoy es mañana, mañana quien sabe lo que será
Si no tienes nada, siempre puedes tener un poema
Si no quieres un beso, no te laves los dientes
Tus ojos comerán mis ojos
Cómete un panettone de versos
Cuando el sol sale los pájaros se callan
Cuando las palabras hieren, mejor callarse
De parte de tu mente,¡ imbécil!
Si te sientes muerto, quizás ya lo estas
El día de mañana será hoy
El infierno existe en cada uno de nosotros, sonríe
Sáltate las mañanas que tengas sueño
Si sientes soledad lee un libro

Prólogo de Poemas Comunes, de Ernesto Pentón

Mi querido Ernesto Pentón publica otro libro de poemas (disponible en Amazon) y me invitó a escribir su prólogo.

Este es el resultado:

Poemas Comunes

Ernesto Pentón Cuza

Prólogo de Giusseppe Domínguez


Portada poemas comunes

Para mirar con cordura
habría que dejar caer la cabeza por la ventana.
Ernesto Pentón

 

Colección de colecciones, estos Poemas Comunes son comunes y no comunes, son maravilla de lo mínimo (oriental como jardín japonés) mezclado e imbuido de experimentación poética, juguetón y divertido, con humor ligero e irreverente pero sin exabruptos, humor cortés, que no rehuye la cultura popular, hasta atreverse a guiñarle un ojo a Peter Jackson con cierta iconoclastia que rompe toda imagen especialmente aquellas del lugar común, más allá del título del libro, da de lado estereotipos como lo puede hacer quien atisba con profundidad, más allá de toda superficie (que rompe) con su mirada cuerda de poeta que deja caer su cabeza por la ventana.

Poemas de enumeraciones de qué son las palabras para un poeta, poeta de árboles, poetárbol, que diría Eduardo Scala, poeta con raíces que da sombra, refugio y que es semilla en acto, semilla potente y realizada. Como la infraordinaria descripción al modo de George Perec, llama tras la que queda una tristeza lírica, pinceladas de Cindy Sherman y Charles Bukowski, de ese realismo sucio con la influencia de una triste muñeca abandonada. Desde la visión más realista posible acostumbra a proponernos saltos a la metáfora, para que no nos olvidemos: podemos ver más de lo que vemos si miramos de otra forma. Reclama, una y otra vez, la poesía, hasta que los ojos se nos llenen de sauces.

La serie Abrazos es un regalo de esos que le gusta hacer, en los que se muestra más desnudo que nunca, dedicándole poemas a los amigos, a su querido Elías y a la esperanza que es una Esperanza con mayúscula presente en sus poemas y en su vida. Quiebros amables que reconducen al terreno de la omnipresente ternura en la poesía Pentoniana. Es una poesía de amor dulce, expuesto, sin miedo a ser cursi pues es simple y llanamente sincero; y en la sinceridad, la cursilería no trasciende.

Tras tres epígrafes de mi autoría, comienzo a tener cierto pudor ante la sensación de ser tratado de gurú o parecido, pero luego me pongo a pensar que quizá se trata de todo lo contrario, que por fin se atreve a tirarme de las barbas y agarrar mis versos o frases como si yo no estuviese… ¡y es que no estoy! Al fin y al cabo, el yo poeta no es el yo “prologador” y mucho menos aún el yo coordinador de talleres de escritura, ni el yo amigo y colaborador de este querido y admirado poeta.

Poeta social del que vive la poesía, hermanándose con poesía existencial o intimista, relacionando la frase “la tierra es para quien la trabaja”, con su poesía trabajada y, por supuesto, vivida. Como en otros libros, su reivindicación social sucede desde la concordia (Del lat. cor, cordis, corazón, esfuerzo, ánimo), de corazón limpio, poesía trufada de filosofía, de trascendencia muy a pesar de la aparente (solo aparente) literalidad. He ahí su referencia a la unicidad de Parménides: el uno pero el uno cotidiano, un vaso, perro, rana… y poema, también un poema que se lleva el viento. ¿A dónde? ¿A dónde?

Frente a sumarse a la critica de lavar el orbe o lavar al otro, Ernesto nos invita a lavarse a uno mismo, escuchar(se) para llevar a cabo una profunda autotransformación que cambie el mundo, llamada que hace pidiendo además que no sumemos ruido, pues Ernesto es un verdadero Príncipe del Silencio.

Silencio generador entendido como hueco, como hueco entre palabras y como espacio en las páginas, es un silencio que permite esculpir poemas en la nada. Ganas de hacer volar la poesía sobre la hoja infinita, y es que Ernesto Pentón la ve así, ilimitada, y por ello sabemos que a ese hueco le queda mucho por revelarnos.

En el poema sobre atracción simétrica, vuelve a hablarnos de los temas perpetuos de la poesía patética, de amor y muerte, una vez más escamoteando el lugar común, sin abandonar el fundamento, maduro y fuerte como para enfrentar el reto de atreverse en aquellos lares donde otros poetas ya anduvieron.

El poeta y su discurso se salen del tiempo, y no en tanto al hecho de que la poesía sea intemporal, o pretendidamente eterna, sino porque el hecho poético, ese hecho mistérico, ocurre en una singularidad espacio-temporal, la gravedad de la poesía elimina la física, clásica, cuántica y relativista, y la recrea en un Big Bang del que salen libros como este. Es un tiempo de poeta como niño frente a una pecera.

En cuanto al envejecimiento, nos habla de quien vive en un tiempo sin pasado y carece de futuro, el tiempo del poeta frente al tiempo del no-poeta, el tiempo prosaico de la presentación, nudo y desenlace, siendo la muerte la última parada, teniendo 43 años e infinitos y ninguno pues esa es la edad del poeta.

La poesía niega esa estructura en un intento de acabar con la realidad de la muerte, siempre es lucha contra el tiempo, contra ese tiempo que momifica, pero Ernesto, lucha esta guerra hasta momificado, pero siendo, porque también puede serlo, la momia de un piojo.

Giusseppe Domínguez
Madrid, febrero de 2015

Yo soy nunca más

tu nunca más
el mío
el nuestro
el vuestro
pero nunca el nunca suyo
por ambigüedad
y maleficencia
por insondable olvido
adverbial
proverbial
de lo insondable
porque no me da la gana
porque quiero
cambiar el más por menos
y ser su nunca menos
por siempre (y jamás)

(Inspirado por El Cuervo, de E.A.Poe, durante un ejercicio propuesto en el Taller de Poesía y Escritura Creativa de los martes)

Esto no es una broma