Nosotros, tras

En el diccionario de la RAE, el que también se denomina DLE, resulta que están haciendo algunos cambios que creen que resultan más «inclusivos» o que dejan de privilegiar en exclusiva al género masculino gramatical, pero los que están haciendo apenas se notan, salvo en problemáticas como la que me está haciendo repasar errores que no son tales, sino entradas que no se encuentran porque se han decidido migrar a sus correspondientes «femeninas».

Así, por ejemplo, «nosotros» no se encuentra en la URL del diccionario de la RAE sino como una de las formas de «nosotras», que sí se encuentra.

https://dle.rae.es/nosotras?m=form

Pero lo absurdo es que, queriendo haber sido más precisos, no hagan de una vez el cambio que desde el punto de vista de diccionario sí que correspondería hacer, es decir, que la definición sea la de la palabra «nosotras, tros» y no «nosotros, tras», amén de ubicarla en su posición correspondiente acorde a esa modificación.

Por otro lado, no alcanzo a entender porqué el criterio de AS/OS no se impone a lo largo de todo el DLE y así, abitrariamente, podemos encontrar que otras palabras privilegian la forma masculina también en la construcción de la URL.

Por ejemplo, «nubio, bia», está en el género gramatical masculino en la URL sin ningún atisbo de irse a cambiar: https://dle.rae.es/nubio
mientras «nubia» es una forma de «nubio»…

O incluso «nuestro», que aún está más cerca de ese «nosotros», no ha de cambiar su URL https://dle.rae.es/nuestro a https://dle.rae.es/nuestra por ninguna razón, parece ser.

Postureo, postureo… y poco más.

Cero enjundia.

El ingenio español ha desaparecido

Ponerle de nombre «Ingenio» a un satélite es poco ingenioso o poco previsor, pues es algo previsible (siempre hay que pensar en los errores como parte del desarrollo tecnológico) que pueda extraviarse o explotar… y genera titulares que, si a alguien le importase, cosa que tampoco parezca ser el caso, daría lugar a millares de «memes» posibles o bromas más o menos malintencionadas.

Pero es que con ese nombre el chiste está escrito, casi, sin error… el Ingenio Español se va de España, emigra, pero en en este caso para no volver jamás.

Gracioso, triste… pero demasiado real. ¡ay, querida amiga!

Errores

Yo al periodismo ya le pido poco en término de revisión de errores y comprendo (cada día soy más comprensivo, casi compresivo) sus habituales deslices por la premura con la que generan las noticias cada menos de 2 horas (son llamados diarios, pero alguna vez habrá que rebautizarlos como horarios).

A veces me arrancan, como en este caso, una sonrisa por pensar que si hace exactamente 48 años era el 7 de noviembre de 1948, estamos ahora mismo a 1996, lo que tiene su punto nostálgico, una especie de deseo «vintage» periodístico.

Ya pedir que no haya errores ortográficos o tipográficos parece un ansia por quimeras inasibles.

Avellanas

Avellanas llanas
avellaneda da
avejarruco co
menta la actualidad.

Y seguimos
en un silencio atroz
de autocensura
mordiéndonos los labios por no morder vecindarios
que eligen lo que eligen
y matan a quienes matan
impunemente
indumentario
imperial
insulto.

Y seguimos
perdiendo la palabra
por otra palabra
dejando que se cuelen los juegos
en la seriedad de la sala
obviando
que la vida son dos días
y tres llueve.

Recuerdos
de Euskadi
maitea.

Error de tres órdenes de magnitud

Ya ni es noticia que un periódico cometa un error como este, de tres órdenes de magnitud: de 10 elevado a 3, de mil sobre uno… da igual. Todo da igual con tal de hacerlo rápido. Rápido, rápido, furiosamente rápido… a mil millones de kilómetros por hora, a 2 metros por segundo, a cien billones de trillones de años luz… qué más da. Ya nada importa, un viernes por la noche, mientras EEUU decide su futuro y con ello el de la Tierra, así, en general, sin importar si alguien ha cometido un error como ese.

247.000 millones de dólares, frente a los modestos 383 millones de dólares de su contrincante, no parece diferencia baladí…

Da igual.
Y a mí…

Cierto desconcierto

abierto, ta/ acierto/ aliabierto, ta/ boquiabierto, ta/ cierto, ta/ concierto/ corniabierto, ta/ cubierto/ desacierto/ desconcierto/ descubierto, ta/ desierto, ta/ despierto, ta/ dispierto, ta/ encubierto, ta/ entreabierto/ incierto, ta/ macroconcierto/ maniabierto, ta/ patiabierto, ta/ perniabierto, ta/ piernabierto, ta/ reabierto, ta/ recubierto, ta/ redescubierto, ta/ semiabierto, ta

El otro día en un taller de poesía alguien usó la palabra «descubierto» y me quedé con ganas de pasarle las palabras en el DLE que terminasen en «bierto», pero eran realmente pocas, así que me decidí por una búsqueda de aquellas que terminan en «ierto» que son unas pocas más: 26.

Ahí están.

Dobles negaciones

Ayer encontré un texto que me hizo mucha gracia, aunque no sé si esa era la intención del mismo:

Frase positiva de hoy: hoy me pongo firme y decreto que Yo no acepto nada negativo ni para mi ni para nadie.

Y es que las dobles negaciones me parecen afirmaciones, como debe ser de acuerdo a la lógica, que no de acuerdo a nuestro absurdo (sin acritud) idioma que es capaz de expresiones como «No sé nada», así que en esa frase «positiva» del día me encuentro un, por orden: «no», «nada», «negativo», «ni», «ni», «nadie»… un total de 6 negaciones (no una sobre otra, pero casi) que dan lugar a una frase «positiva» (¿afirmativa?).

Es una pequeña tontería, pero me ha hecho mucha gracia y como no quería comentarlo en la red social en la que lo he encontrado (la gente está muy sensible), he traído lo que le diría a este diario personal:

¿Qué tal si la frase positiva fuese «Yo solo acepto cosas positivas para mí y para cualquiera«? Creo que significaría lo mismo, siendo, definitivamente, una frase «positiva».

Esto no es una broma