creaestructura.sh

El martes pasé gran parte de la mañana escribiendo un código para crear la estructura de carpetas que utilizo año a año (es decir, una vez al año) para guardar ordenadamente mis facturas.

Los años anteriores lo que hacía era copiar un año pasado (es decir, usar un método recurrente) y borrar todos los archivos en la carpeta creada, con un simple comando linux (find . -type f -exec rm -f {} \;) y otro para el cambio de nombres…

Pero me estaba pareciendo una forma muy poco automatizada, así que gasté más de 2 horas (estaba muy atontado porque había dormido mal) en este código simplón y que me gustaría mejorar para que hiciese más y mejor uso de los bucles, creando los trimestres y los meses de los mismos con un simple bucle dentro de un bucle.

No voy a mejorarlo, aun a sabiendas de que esta forma de hacerlo es pedestre, algo torpe, muy muy poco elegante:

# CREA ESTRUCTURA DE CARPETAS DE FACTURACIÓN
#!/bin/bash

ANNO=2024

# Creamos el año
mkdir $ANNO
cd $ANNO

# Creamos Trimestres
TRIMESTRE="$ANNO - 01 Enero-Marzo"
mkdir "$TRIMESTRE"
cd "$TRIMESTRE"
mkdir "$ANNO - 01 ENERO"
mkdir "$ANNO - 02 FEBRERO"
mkdir "$ANNO - 03 MARZO"
cd ..

TRIMESTRE="$ANNO - 02 Abril-Junio"
mkdir "$TRIMESTRE"
cd "$TRIMESTRE"
mkdir "$ANNO - 04 ABRIL"
mkdir "$ANNO - 05 MAYO"
mkdir "$ANNO - 06 JUNIO"
cd ..

TRIMESTRE="$ANNO - 03 Julio-Septiembre"
mkdir "$TRIMESTRE"
cd "$TRIMESTRE"
mkdir "$ANNO - 07 JULIO"
mkdir "$ANNO - 08 AGOSTO"
mkdir "$ANNO - 09 SEPTIEMBRE"
cd ..

TRIMESTRE="$ANNO - 04 Octubre-Diciembre"
mkdir "$TRIMESTRE"
cd "$TRIMESTRE"
mkdir "$ANNO - 10 OCTUBRE"
mkdir "$ANNO - 11 NOVIEMBRE"
mkdir "$ANNO - 12 DICIEMBRE"
cd ..

# Rellenamos los Meses
for MES in */*/
do
  cd "$MES"
  mkdir COMPRAS FACTURACION PROVEEDORES
  cd ../..
done

 

Corazón

Ya sé que un corazón rojo sobre fondo rosa puede ser el epítome de la cursilería «barbie», pero también sé que este corazón está ajado, está roto, está desgarrado por un innumerable número de veces que ha sido estrujado para arrebatar una mejoría muscular a mi hombro izquierdo.

El corazón está a la izquierda.

Este corazón rojo es más duro de lo que parece y resiste mis embates y mis envites con un órdago de valentía, de coraje, de corazón (sin obvia referencia a Benedetti).

¿Revolucionario?

Veo un anuncio en Instagram (que obviamente conoce mis datos de edad, etc…) que se promociona de la siguiente manera:

SE BUSCAN: ¡300 personas, mayores de 50, para probar un audífono REVOLUCIONARIO y casi INVISIBLE en casa!

Y mi primera reacción ha sido pensar que el hecho de que sea invisible no lo convierte en muy «revolucionario». Lo verdaderamente REVOLUCIONARIO habría sido un audífono casi INAUDIBLE.

Pero es que la poesía…

Mal empezamos

He tardado en darme cuenta
de que era un error tipográfico
esa «la poder»
y no una expresión poética
con la libertad a la que suele estar acostumbrado
mi criterio
que en lo único que ha reparado
es en la minúscula de esa ele
que quedaba muy desajustada
formalmente
con la de La experiencia.

Mi experiencia ha sido nefasta
y he decidido no seguir leyendo
aunque quizá estoy perdiendo la posibilidad
de una misión guiada
para optimizar los resultados de mi venta
con el poder de la tecnología.

De elecciones

calidad de vida
patria empieza en
estar en este lado de la carta
hace dos años
seguramente ya me conoces
llegué a Madrid
en grave peligro
cuando me puse a escribir
grandes proyectos
de primera mano
abierta al mundo
en grave riesgo
voy a ser breve para que llegues al final
queremos que Madrid siga siendo
justa, limpia, segura
una ciudad feminista
limpia y verde
a precio de saldo
y que nada ni nadie pueda frenar
un buen servicio de transporte público
donde las mujeres sean
gasto ideológico
que tiene dos cosas
en juego
cuando la ciudadanía lo ha necesitado
reciclaje y la recuperación
para poder crear
las puertas de la Cibeles
que tiene ambición de ser mucho más
vibrante, generosa, diversa
en definitiva
queremos cuidar
la fuerza que transforma
una calidad de vida incomparable
pero no solo
recogida de basura
que merece la pena conservar
para defender
tu mayor deseo
alejada del ruido y los insultos
quiero
compromiso
para presentarme
en todos
los retos
elige
lo tuyo
saludo
el objetivo
para ti
al mundo
no es suficiente
de la mano
para que juntos loguremos
día sí y día también
una plaza de colegio
alternativa
defensora a ultranza de
hacer crecer
cargas demasiado pesadas
vivas donde
los servicios son
la llave para
tu tiempo
pido tu
cambio
de lo tuyo
cuando le doblé el brazo
en el respeto, la concordia
y que volvamos a estar
con las urnas
a sus anchas
para que los vecinos y los barrios entren en un palacio
convencido de que
no mire con pasividad
en definitiva
lo nuestro
mi hija
gozamos
de latir.

80 versos recopilados de los «programas» electorales de las formaciones políticas que me llegaron a casa para las elecciones municipales y autonómicas del pasado domingo 28 de mayo de 2023.

Están en orden riguroso, alternándose: PSOE, VOX, PODEMOS, PP y MÁS MADRID.

Recuerditos

Pequeños pedazos de papel arrancados de libretas en las que escribíamos y dibujábamos como si nos fuese la vida en ello. Era la época de los 90, cuando retomé una adolescencia que no había existido y me enamoré del mundo y sus habitantes.

Algunos textos no los reconozco, como si sus letras y su contenido hoy me fuese demasiado ajeno para recordarlo, esas referencias a los autobuses, un timbre, ese tono de siglo XX, una firma «Francisco correturnos» que no sé quién era. Qué extraño no querer tirar a la basura este papel.

Una carta de amor abierta de Beatriz, seguramente la hermana de mi querida Raquel, a quienes quise tanto y que tanto influyeron en mi vida, más allá de darme el nombre que hoy me habita.

Corría el 7 de julio de 1995. Yo me iba a algún lado. Seguramente me fui a Sidney. Continué en contacto con Beatriz, pero no lo retomé seriamente a la vuelta. Quizá la adolescencia tenía que ser dejada de lado, dejada atrás. Pero hoy me gustaría saber qué fue de ella. No puedo recordar su apellido. No creo que tenga muchas formas sencillas de localizarla.

A quien sí he vuelto a ver es a Patricia, pero ella ya no es quien era. Ni yo soy quien fui.
Aún recuerdo su cuerpo… pero ya no es su cuerpo. Su risa sigue siendo su risa. Sus ojos empequeñeciéndose sobre sus mofletes.

¡Qué divertida palabra esta de moflete!

Poco a poco, la vida me conduce al olvido paulatino de todo pasado.
Dicen que en la vejez se recuerda.
A veces,
solo a veces,
quiero llegar a viejo.

Esto no es una broma