Todo soporte de texto es un libro de poemas.
Pequeña intervención o libro objeto a partir de una caja de repuestos de una maquinilla de afeitar Gillete y cuatro páginas hechas con un foam negro de 5mm y tinta blanca.
Diario
Todo soporte de texto es un libro de poemas.
Pequeña intervención o libro objeto a partir de una caja de repuestos de una maquinilla de afeitar Gillete y cuatro páginas hechas con un foam negro de 5mm y tinta blanca.
Esta pequeñez es un poco diferente de otras composiciones con el teclado, aunque es especialmente útil en esta semana en la que todo parece recomenzar, como si eso fuese posible, como si el tiempo fuese circular y no una flecha que surca una trayectoria espiral tridimensional, lo que vendría a ser un helicoide.
Volvemos a comenzar un curso nuevo con la ilusión del primer día, con la incerteza de siempre, que me mantiene en el filo del riesgo donde habitar sin poder acomodarme.
Hay algo interesante en ese reinicio que ocurre cada año y es el hecho de encontrarse con gente con quien comparto tanta pasión por la poesía que parece imposible que exista. Y sin embargo se mueve.
Más información sobre los Talleres de Poesía Contemporánea que defiendo desde hace ya más de 2 décadas está en la web https://www.clave53.org/poesia
Por fin he conseguido tener un minutito (algo más de 2 días) para crear el apartado de la web dedicado a este proyecto Arqueografía en el que estuve trabajando un par de años, realizando innumerables cianotipias de palimpsestos digitales.
No tenía claro en qué apartado poner esta página, que podía ser tanto libro objeto (3D) como poesía visual, como un proyecto…
Quizá mi obsesión por ordenar lo inordenable está llegando a límites ridículos. (Hace años que llegó, no pienso engañar a nadie)
what a
fucking
difference!
Una pequeña pieza de algo que podríamos denominar poesía visual realizada con círculos adhesivos de etiquetados de CD para impresora sobre cartulina roja.
¿Cuántos puntos como mínimo harían falta para que LOVE se entendiese?
En esta ocasión lo realicé con 36 puntos, pero seguro que con muchos menos habría sido posible.
Otro vídeo de la acción realizada para el 6º Aniversario de PEPA (Pequeño Evento de Performance Art) comisariado por Analía Beltrán y del que se puede encontrar más información en el artículo que escribí hace unos días o bien en la sección de acciones de mi propia web.
He realizado un libro objeto en encuadernación japonesa de papeles blanco roto, con cubierta blanca, sobre los que he escrito una serie de textos conteniendo información sobre «mis opiniones».
En realidad, se trata de un silencio roto, más que de un blanco roto, se trata de esconderme, de silenciarme otra vez más pues tampoco es que sea preciso que esté dando mis opiniones a todo el mundo todo el rato. Es algo cansado y quizá impositivo, como muy bien sugiere Roland Barthes en su ensayo (o compendio de opiniones) Lo Neutro.
Así que he procedido a escribir unas cuantas «opiniones» todas ellas comenzando con un «mi opinión sobre XXXXX» y terminando con un enigmático «es» que no lleva ni punto final ni puntos suspensivos.
El proceso de escribirlas ha sido lento, manuscrito, por supuesto, con rotulador de gel blanco Uni-ball Signo Broad UM-153 WHITE.
Varios motivos han demorado este proceso: el primero es que los 3 rotuladores que tenía en el estudio (de un trabajo anterior) estaban completamente secos y los intenté recuperar con todas las técnicas conocidas y algunas desconocidas, pero no pudo ser. El segundo motivo es que dado el escaso tiempo que tengo para probar materiales desde que estoy con el proceso de rehabilitación de mi hombro, no encontraba un momento para ir a por nuevos rotuladores, pues no estaba seguro de si querría usar los Uni-Ball de gel blanco o, por el contrario, rotuladores POSCA de punta más fina que los que tenía disponibles. Finalmente me decanté por gel blanco Uni-Ball, no sin antes probarlos.
Otro motivo por el que este libro ha tardado en ver la luz es que requería tiempo de secado largo (entre 2 y 3 minutos) entre cada página y la siguiente, lo que siendo un total de unas 50 páginas (50 opiniones), resultaba en un proceso de paciente paso de más de dos horas.
Aunque en primer lugar realicé un boceto de opiniones (las que iba a escribir y algunas que quedaron en el tintero) con bolígrafo bic sobre papel blanco.
Algo me dice que el libro está aún por terminar, quizá rematar esa encuadernación japonesa con un cierre cruzado o escribir un texto en rojo sobre la portada o, mejor aún, un golpe seco o escritura sin tinta con bolígrafos gastados…