Amapolas en el Cráter: Episodio 044

Programa *Amapolas en el Cráter*.

*20 minutos de voces habitando el espacio sonoro con poesía*. Poema de poemas propios o ajenos, fragmentados o completos. Textos recitados por poetas de los Talleres de Poesía y Escritura Creativa de la *Asociación Cultural Clave 53*. Te esperamos con nuevos episodios de Amapolas en el Cráter en nuestra web (*clave53.org*)

En este episodio han participado:

  • Susana Olalla Serra
  • Giusseppe Domínguez
  • Lucía Herrero
  • Inmaculada Sánchez
  • María Jesús Orella
  • Ester Morales García
  • Pablo Velado Pulido
  • Paula García Izu
  • Isabel Jiménez
  • Javier Jiménez

https://anchor.fm/clave53/episodes/Amapola-044-ev17l5/a-a28efov

Christine de Pizan

Christine de Pizan

Nada conocía de esta escritora, una de las precursoras del feminismo occidental, ni tampoco de la Querella de las Mujeres, un episodio que se originó en la literatura, a modo de debate académico en defensa de la capacidad intelectual, el derecho de las mujeres al acceso a la universidad y la política de las mujeres frente a la misoginia.

querelle des femmes es el nombre por el que se conoce al debate literario y académico que tuvo lugar a lo largo de varios siglos abarcando desde finales del siglo XIV, en la Europa medieval, hasta la revolución francesa en el siglo XVIII

¡Qué lejos parece y qué poco se ha avanzado en muchos ámbitos desde hace ya 7 siglos! Parece mentira, pero lamentablemente no lo es.

Se me rebatirá diciendo que se ha avanzado mucho, pero no me lo parece, teniendo en cuenta que es una justa reivindicación de hace 700 años. ¡Es una barbaridad!

Y también lo es que yo no supiera nada de ella, pero claro, no me lo contaron en todos mis años académicos.

Ahora una de esas barbaridades ha caído por casualidad, más que por causalidad: Viendo la serie The Great en la plataforma de vídeo bajo demanda (streaming) StarzPlay, me encontré desconfiando de la propuesta que le atribuían en la misma a la poco fidedignamente retratada Catalina II acerca de tratar la viruela con una «viruelización», que sería una especie de tratamiento similar a las vacunaciones.

Me dio por leer sobre la variolización y me di cuenta de que no era tan inverosímil esa atribución, pues ya a principios del SXVIII Mary Montagu había luchado por el reconocimiento de esta técnica para el tratamiento de enfermedades contagiosas, mucho antes de que se extendiese la sistemática vacunación atribuida a Edward Jenner.

Y leyendo sobre la biografía de tan singular mujer, me encontré con otra no menos relevante y también desconocida para mí hasta el punto de suponer que el feminismo había comenzado en el SXIX… en el mejor de los casos: la autora de la frase «Si todos los hombres nacen libres, ¿por qué todas las mujeres nacen esclavas?»», quien no era sino Mary Astell.

Me hizo mucha gracia encontrar en la descripción de su formación que aparece en la wikipedia la frase:

ella estaba asociada a la escuela filosófica con sede en Cambridge que basaba sus enseñanzas en los filósofos radicales tales como Aristóteles, Platón y Pitágoras.

pues no me había parado a pensar nunca en lo radicales que realmente eran, aunque sí, lo son en tantos sentidos que queda fuera de este texto el desarrollar su radicalidad. (Ay, querido Pitágoras…)

Quizá por una recomendación de la aplicación para teléfono móvil de la wikipedia, accedí a esta polémica de la Querella de las mujeres y a la primera mujer que pudo aportar su propia voz al debate (hasta entonces sólo mantenido entre hombres, «curiosamente»): Christine de Pizan de quien se dice:

Christine de Pizan (Venecia, 1364 – Monasterio de Poissy, hacia 1430) fue una filósofa, poeta humanista y escritora. Su obra más conocida es La ciudad de las damas (1454), considerada por algunas autoras como precursora del feminismo occidental y se sitúa en el inicio de la llamada querella de las mujeres, un debate literario surgido en torno a la situación de las mujeres y su defensa frente a la situación de subordinación que marcaba la época.

Aunque me parezca recomendable comprarlo, leerlo, regalarlo, etc, he encontrado esta versión escaneada en PDF (que usaré para mis talleres) de su libro más emblemático: La Ciudad de las Damas, una especie de primer protomanifiesto feminista, aún muy lejano del que en el SXX escribiera Mina Loy, pero desde entonces y hasta ahora… ¡Feminismo!

Fuck VOX

Por supuesto que estoy de acuerdo con Fuck VOX: no es complicado, pues es un partido que representa todo aquello que repudio con todas mis fuerzas: machista, racista, clasista, violento, intolerante, etc, etc, etc.

Pero.

Sí, voy a poner un pero a este «fuck VOX» y no tiene nada que ver con que se utilice el inglés (un idioma que nos coloniza paso a paso), sino con el hecho de que no podemos atraer tan sólo con negativas.

Hay mucho que ofrecer, no sólo la exclusión a VOX sino un mundo en el que estas ideas no tengan cabida, ofrézcanme un ideario, un programa, programa, programa, que me convenza (me tienen casi preconvencido, sólo hay que articular en positivo lo que queremos).

Quiero un mundo igualitario, feminista, inclusivo, quiero apoyos a colectivos sociales que lo están pasando peor en un sistema cruel e insolidario, quiero una república, quiero una república, quiero una república laica, completamente laica, donde la religión esté relegada al ámbito privado, por supuesto sin financiación pública, ni reconocimiento de «el sentir religioso» como si negasen «sentir no religiosos», quiero una sanidad pública, quiero una educación pública de calidad, financiada con una tasa impositiva que repercuta más sobre quien ingrese más, sin ningún tipo de privilegio, quiero que la carta de los derechos humanos no sea papel mojado ni un mero horizonte, sino una realidad a la que ceñirse para incrementar la libertad desde ahí, no desde la estúpida dicotomía de «libertad o XXX».

Quiero una condena contundente a toda violencia más allá de los mínimos límites puestos ahora mismo, que condenen socialmente a cualquier maltratador, hasta el punto máximo aplicado con contundencia a esa lacra que debería acordarse en denominar terrorismo machista.

Quiero una posibilidad de reconocimiento de las diferencias culturales identitarias hasta el punto de que se pueda plantear estructuras federales o diferentes encajes territoriales, como si cualquier asunto de esta índole fuese materia política y por tanto materia de debate parlamentario.

Quiero que el respeto a las libertades individuales no esté por encima de las libertades sociales hasta convertir al ser humano en lobos devorándose a sí mismo para garantizar su derecho a matar a la otredad.

Quiero tantas cosas… que no tengo que «fuck vox» para ello. Quiero que VOX no sea votado porque la población comprenda que lo que pide esa formación es inaceptable en una democracia que dice perseguir unos estándares de libertad, igualdad y fraternidad propios de una civilización que busca mejorar la calidad de vida de la sociedad.

Quiero, claro que sí, que haya un cordón sanitario o como se le quiera llamar, para garantizar que quien hace apología de la violencia machista, racista, etc, no pueda estar en las instituciones que se supone que están para protegernos a modo de contrato social, pero sobre todo, quiero enamorar a quien de mí no se enamora…

Porque sin amor no puede haber una política constructiva que ilusione y gane elecciones.

¡Más amor y menos odio!

Y desde ahí… ¡Yo votaré el 4M!

uno imagina irracionales…

Uno imagina cuando encuentra por primera vez números a los que llama irracionales que no lo son en el sentido que ha imaginado, sino en el hecho de que no son razones, razones entre números enteros, pero tampoco uno cae en la cuenta de que a las divisiones les llamamos razones, así, sin ton ni son o todo lo contrario, quizá no hay nada más razonable que dividir las cosas, repartirlas, incluso los números enteros para que dejen de ser tan pretenciosamente enteros y cuando uno se encuentra números que no son el fruto de una repartición siente cierta aversión hacia ellos, los repudia, los niega, los ningunea, uno intenta convencerse de que son aproximaciones de algo más «razonable», aunque uno llegue a saber que no es así por reducción al absurdo, que parece una reducción al Pedro Ximénez, pero no tiene nada que ver con ella, por muy sabrosa que pueda resultar en ocasiones.

Uno imagina cuando encuentra por primera vez números a los que llama irracionales que no son todos iguales y que el loco paralelismo prestado por el léxico filosófico sirve para clasificarlos en trascendentes, construibles, algebraicos, normales… Sí, también uno descubre que hay números normales y lo que a uno le vuelve aún más loco (que no irracional) es que todo número normal debe ser necesariamente irracional, así, como si nada, como si eso de repente explicase tantas cosas que uno nunca ha comprendido en la vida que parece una epifanía.

Uno imagina cuando encuentra por primera vez números a los que llama irracionales que no son el final de todos los números posibles y que ha de haber algo más allá, así que se emociona incluso cuando a uno le hablan de los números imaginarios que hacen realidad el hecho de que los números reales no sean tan completos como creían ser, mientras sí lo serán los números complejos, así: completos sin complejos.

Uno imagina (pues no puede parar de imaginar) cuando encuentra por primera vez números a los que llama irracionales que no son más que la puerta de entrada a la matemática de la poesía, la que descubrirá un número poético que incluirá sus números imaginarios, sus irracionales, sus enteros y sus fracciones, sus negatividades, sus nulidades, la nada, nada infinita, nada lemniscática, nada redonda y pueril, nada feliz en la que uno se pierde sin dilación en una ecuación diferencial diferente a lo esperable, una nada inestimable, incalculable, una nada que forma operaciones como versos sueltos en un cosmos ingrávido.

Uno imagina cuando encuentra por primera vez números a los que llama irracionales que el amor debe de estar escondido en el número π o que la i no es la e, pero ambas comparten la letra como signo último al que referirse, en el que habitar, en el que albergarse hasta que paren de llover decimales si es que alguna vez escampa; uno va más allá del signo reconocible objetivamente para abrazar el grafo, el signo asémico, la línea más o menos continua que un material traza sobre otro rompiendo y rompiéndose a nivel atómico, destrozándose para dar vida a la imagen: imagen que imagina uno cuando encuentra por primera vez números a los que llama irracionales que no lo son en el sentido que ha imaginado.

Reflexionar no es una actividad

¿Qué piensas cuando no encuentras «reflexionando» entre las actividades que puedes decir que estás llevando a cabo en FaceBook?

¿Acaso no se puede reflexionar en una red social?

¿Acaso reflexionar no es una actividad legítima?

¿Acaso estas preguntas no tienen ningún sentido?

¿Acaso las preguntas han de tener algún sentido?

¿Acaso algo ha de tener algún sentido?

¿Acaso algo?

¿Acaso?

Hoy es jueves

Otro delicioso ejemplo de literatura definicional que realicé ayer en el taller de poesía y escritura creativa que le estamos dedicando a OuLIPO, partiendo de algo tan banal como «Hoy es jueves». ¿Cómo habría sido partiendo de algo más sustancioso? Me encanta cuando se llega a encontrar, en las definiciones, a modo tautológico, lo mismo de lo que se partió, un «hoy», un «es», un «jueves»…


El tiempo presente está en situación de cuarto día de la semana.


Cada uno de los actos sucesivos en que se divide la ejecución de algo que sitúa la acción, el proceso o el estado expresados por el verbo en un lapso que incluye el momento del habla está en posición social o económica de servidumbre de un rey o de una reina de la variedad de la rayuela.


Cada cantidad que se toma como término de comparación de las medidas lineales romanas que tenían 120 pies sucesivos en que se desunen los ánimos y voluntades introduciendo discordia al procedimiento judicial con embargo y venta de bienes para pago de deudas de algo que pone a alguien o algo en determinado sitio o situación, la acción, el conjunto de actos y trámites seguidos ante un juez o tribunal, tendentes a dilucidar la justificación en derecho de una determinada pretensión entre partes y que concluye por resolución motivada o el país soberano, reconocido como tal en el orden internacional, asentado en un territorio determinado y dotado de órganos de gobierno propios expresado por el que aporta valor aspectual al sustantivo con el que se combina y con el que forma un grupo verbal semilexicalizado en un lapso que incluye el lapso de tiempo más o menos largo que se singulariza por cualquier circunstancia al sistema lingüístico de una comarca, localidad o colectividad, con rasgos propios dentro de otro sistema más extenso que está en estado que en el juicio determinan, para el demandante como para el demandado, las acciones y las excepciones o defensas utilizadas respectivamente, social o económica de derecho en predio ajeno que limita el dominio en este y que está constituido en favor de las necesidades de otra finca perteneciente a distinto propietario, o de quien no es dueño de la gravada de una pieza principal del juego de ajedrez, la cual camina en todas direcciones, pero solo de una casilla a otra contigua, excepto en el enroque o de una pieza del juego de ajedrez, la más importante después del rey, que puede moverse como cualquiera de las demás piezas, exceptuado el caballo de la inconstancia, inestabilidad o mutabilidad de las cosas del juego infantil, tradicionalmente de niñas, que consiste en ir desplazando un tejo, a puntapiés y a la pata coja, por varias casillas dibujadas en el suelo, procurando no pisar las rayas y que el tejo no quede detenido en ellas.

Exposición de Manuel Rulfo

Comencé la semana santa con esta visita a He caminado 2.876,98 Km. para hacer esta exposición en la Galería Cruce, Arte y Pensamiento, que había comisariado Fernado Baena.

Pensé que encontraría a alguien con quien ir a tomar unas cañas, pero no hubo mucho quórum, así que me volví a casa, después de no haber caminado ni unos 4 kilómetros.

Me encantó el trabajo de Manuel Rulfo, que ya conocía, en el que va «dibujando» con su cuerpo y su memoria sobre el lienzo del Parque del Retiro, hasta que encuentra un resultado que le satisface.

Así ha creado imágenes que, obviamente, no tienen valor representativo, sino conceptual, procesual, de lo que es muy consciente este artista tan interesante y a quien admiro, entre otras cosas, por su talante humilde y amistoso, que no es poco.

La exposición puede verse hasta este sábado 10 de abril de 2021, en una época en la que caminar con tanta libertad resulta limitado, lo que la convierte en una reivindicación paradójica sin esa pretensión, pues su principal sublevación (no pequeña precisamente) es contra un mercado capaz de convertir en mercancía cualquier obra.

¿Cómo puede el afán devorador y consumista adueñarse de una idea?

Sabemos, a estas alturas de inocencias fallecidas, que ha inventado mecanismos para adueñarse también de ideas, de procesos, de subproductos, subviertiéndolos en mercadería, en souvenirs, hasta no dejar nada libre de «pecado».

Así que no esperamos que este trabajo acabe impoluto en unas caminadas en el aire, sino que terminarán pudiendo generar algún objeto susceptible de intercambiarse por monedas, pero también los artistas han de comer. Al menos, eso sí, son capaces, como la obra de este genial Rulfo, de generar reflexión al respecto.

¡Gracias, Manuel!

Astenia primaveral

Estoy cansado, sí, cansado…

cansado hasta de estar cansado
cansado de mascarillas
cansado de debates sobre mascarillas
cansado de ausencias
cansado de debates sobre presencias
cansado de pólenes
cansado de debates (no, no hay debates sobre pólenes)
cansado de estar cansado sin límite
cansado de que no existan límites
cansado de tantos límites
cansado de tanto silencio
cansado de tanto ruido
cansado de algún vecino
cansado de la imposibilidad de debatir con un vecino
cansado de la primavera (que acaba de empezar)
cansado de un año tan extraño extravagante extraterrestre
cansado de la prensa
cansado de debates banales sobre las noticias de la prensa
cansado de teclear letras innecesarias como esa d de cansado
cansado de reflexiones tontas
cansado de que esas sean mis reflexiones
cansado de compartir esas reflexiones a modo de proyectos absurdos
cansado de editar libros ridículos
cansado de no editarlos
cansado de poseer poesía en pretérito imperfecto
cansado de la sintaxis
cansado de la ortografía (y de la orografía)
cansado de pantallas antialérgicas
cansado de las muertes (y la vida)

CD o DVD

Hoy estoy perdiendo el tiempo en busca de fuentes para obtener el número de personas sobre la faz de la tierra y ver la manera de convertir esa cifra en un número de bits que almacenar en un soporte como puede ser un CD o un DVD.

El objetivo sería escribir tantos bits como personas hay en el planeta (puedo caer en el «binarismo» de asignar 0 a un sexo y 1 al otro, o ignorarlo) en un CD e ir generando CDs con las estimaciones de Personas Vivas sobre la Tierra cada cierto periodo de tiempo.

He encontrado una fuente importante de datos en la ONU, como si fuese un organismo útil, pero no encuentro la manera de acceder a esos datos desde línea de comandos, lo que me encantaría.

Tampoco sé la manera de escribir un archivo en linux directamente en código binario, escribiendo bits y no bytes. Tendré que repasar la rama dura de la programación en C o en ensamblador.

Creo que lo que intento es tan ridículo como habitualmente hago, pero no por ello quiero dejar de hacerlo.

Esto no es una broma