Algunas instantáneas de la I Feria del Libro de Edita Clave 53

Algunas instantáneas que recogen el precioso ambiente que se generó el sábado en nuestra I Feria del Libro de Edita Clave 53 organizado por la Asociación Cultural Clave 53 Giusseppe Domínguez en Carromato Plató (Beatriz Pagés y Toni Cárdenas)

Musicalizó el evento la #TDJ Carmen De La Rosa – Tango

Presentamos libros editados desde el 2019 a:

Práctica de Tango N’Clave del 24 de septiembre de 2023

Carmen de la Rosa siempre deja para el final (cuando queda menos de la mitad de la gente) esta fotografía de la Práctica de Tango N’Clave que venimos organizando desde 2003 y que nos llena de orgullo cuando nos reconocen el lindo ambiente que se genera.

La hacemos al grito de 3, 2, 1, TANGO

El otro día me dijeron que era como estar en casa, en familia, y «se me pianta el lagrimón«, que decía Gardel. Siempre defendemos que «el éxito» no es una afluencia masiva, sino una estancia feliz. Y parece que lo vamos consiguiendo.

Preparamos té (ayer un té azul traído de Taiwan y un té verde Gunpowder con miel de romero), compramos chocolates y hacemos bizcochos caseros con los que agasajar a quienes vienen a bailar, pero también a compartir una velada social (el Tango es un baile social) de cariño y presencia desde hace 20 años («que 20 años no es nada…»)

Corazón

Ya sé que un corazón rojo sobre fondo rosa puede ser el epítome de la cursilería «barbie», pero también sé que este corazón está ajado, está roto, está desgarrado por un innumerable número de veces que ha sido estrujado para arrebatar una mejoría muscular a mi hombro izquierdo.

El corazón está a la izquierda.

Este corazón rojo es más duro de lo que parece y resiste mis embates y mis envites con un órdago de valentía, de coraje, de corazón (sin obvia referencia a Benedetti).

24 años y sumando

Hoy hemos estado explorando una zona de Madrid que apenas habíamos pisado, allá por donde termina casi la línea 44 de autobús, que desde Callao nos ha llevado al parque Dehesa de la Villa.

Hemos desayunado en una cafetería deliciosa (el nombre lo indicaba, pero no me lo acababa de creer) llamada Madridelicia Bakery & Cafe.

Cierto es que hemos llegado bastante tarde porque esta noche hemos dormido poco y mal por culpa de las inclemencias del tiempo y el golpeteo pertinaz de la lluvia en la chapa que hace las veces de tejado en nuestro ático.

Después hemos recorrido el parque mencionado entre pinares o semejantes arbolitos de hoja acicular y encontrado este bello lugar en el que fotografiarnos bajo una placa que parecía hecha para nosotros: locos de amor y locos por la vida.

Hoy hemos cumplido (a las 21:00) 24 años juntos. Y he imaginado lo feliz que sería si pudiésemos seguir otros 24 años más.

Cuenta de Instagram de Clave 53

Hace meses, posiblemente, perdimos nuestra cuenta de Instagram de @asociacionculturalclave53 (que entonces se denominaba @ac_clave53) y no nos habíamos dado ni cuenta, hasta que la semana pasada intentamos acceder y nos dijeron (esos entes misteriosos) que no podíamos acceder porque habíamos violado no sé muy bien qué norma sobre la edad que atribuíamos a la cuenta, de una Asociación Cultural, que no de una persona. Así que la habían dado de baja sin posibilidad de recuperación. ¡Y yo no tenía un backup! 😉 #tango #poesía

El lunes pasé toda la tarde configurando de nuevo una cuenta (no es tan fácil como parece) para que esté conectada con la página Facebook de Clave 53 y todo ello intentando hacerlo desde el navegador del PC, para poder gestionarla más cómodamente.

Es un poco aburrido y nunca se sabe si realmente merece la pena el trabajo dedicado a las redes sociales para recuperar la inversión de tiempo empleada (e incluso de dinero, anuncios mediante). Pero parece una buena idea para darle visibilidad a la web de la editorial, entre otras cosas, además de para poder desprender la publicidad de los talleres de mi propia identidad o cuenta en Instagram (la siguiente tarea pendiente es preparar lo que vaya a ir publicando en la misma, para no tenerla casi muerta).

Un encuentro inesperado

Viendo una serie bastante «tontuna» en netflix para pasar la sobremesa de diario con Carmen sin salir corriendo a trabajar, me encontré con este fragmento de la cabecera que me recuerda muchísimo a una amiga suya y coordinadora de una de las milongas más exitosas de Madrid.

(Con respecto al éxito de convocatorias de eventos:

No me canso de repetir que éxito no es tener mucha gente que acuda a tus eventos, sino tener mucha gente que está contenta de haber acudido a tus eventos. No siempre coinciden ambas acepciones)

Tener dinero y no saber usarlo

Tenemos un dinero inesperado
y queremos usarlo
para renovar
mobiliario
y no sabemos usarlo.

Nos decantamos por comprar algo
y según llegamos a casa
pensamos
que no lo necesitamos.

No pensamos que las compras
no se basan en la necesidad
salvo contadas ocasiones.

Nos decantamos por comprar algo
y nos plantea el problema
de qué hacer
con lo que sustituimos.

No pensamos que las compras
justifican la obsolescencia
que queremos creer programada.

Nos decantamos por comprar algo
y para poder usarlo
necesitamos comprar otro algo
que tampoco necesitábamos.

No pensamos que las compras
están organizadas como un dominó
y está cayendo la primera ficha.

Tenemos un dinero inesperado
que estamos seguros
de que
(por suerte y privilegios)
no nos va a hacer más felices.

Jugando a diseñador

Carmen es una fantástica diseñadora intrusa que es capaz de hacer un cartel estupendo a partir de una simple fotografía. De hecho, cada vez que estamos de vacaciones rescata paredes, detalles, playas… que luego usa para sus publicidades, que siempre son originales y mucho más creativas de lo que ella misma es consciente.

Pero tiende a usar apps de móvil que la mayoría de los casos no permiten tener un control total sobre lo que quieres hacer (aunque son muy muy potentes) y, sobre todo, si se trata de diseños que se quieran reutilizar es bastante complicado porque los formatos en los que los almacena son difíciles de manejar con libertad (tecnológicamente hablando).

Así que, como de costumbre, hacemos un buen tándem, pues es ahí, en la parte tecnológica, donde yo puedo echarle una mano, como en esta ocasión que ella había compuesto la izquierda de este díptico que he llevado a vectorial con Inkscape (salvo la fotografía de fondo) para poder modificarlo siempre que queramos, como en esta simple bandera lateral derecha negra sobre la que escribir «Práctica de la Rosa» con la tipografía que utiliza su propia web, además de añadir un SVG de licencia creative commons que ha sido sencillo colorear con el color que usa el logo de la Milonga Romántica, por ejemplo.

Esto no es una broma